Capítulo 6

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Volvimos a la tienda y todos seguimos hablando hasta que se hizo tarde. Estábamos tan cansados por el rodaje y la fiestecita en la tienda, que decidimos irnos a dormir ya.

Acabamos durmiendo con el orden de Blas, Matías, yo, Juani y Enzo. Aunque me doliera lo de Matías no iba hacerle el feo de dejarle de hablar, porqué yo al menos sí que había sentido el momento que tuvimos en los baños. Pero dormí mirando hacia Juani, ya que tenía más confianza.

En medio de la noche intenté moverme para estar más cómoda, pero sentí como alguien me agarraba por la cintura desde mi espalda, impidiendo moverme. Eso me alertó e hizo que me despertara.

Cuando fui consciente caí en que era Matías, quien me estaba abrazando.

Rápidamente, abrí los ojos por la impresión, y en vez de encontrarme cara a cara con Juani, me encontré con Enzo. ¿Pero qué estaba pasando? ¿Cómo había acabado al lado de Enzo si Juani estaba entre nosotros?

Al moverme antes para intentar zafarme del agarre, hice que Enzo se despertara. Se giró medio dormido hacía mi. Al ver que estaba delante suyo puso la misma cara de impresión que yo. Ninguno de los dos nos esperábamos acabar al lado.

Levantó la cabeza para mirar más allá de mi. Ahí caí que estaba buscando con la mirada donde estaba Juani, que era el que nos separaba antes.

Volvió a su posición de antes y se quedó mirándome fijamente en silencio. Era raro, porque a diferencia del reto no era incómodo. Nos quedamos mirándonos en silencio. Aunque no hubiera luz a Enzo le brillaban los ojos, la verdad es que eran bonitos. No pude apreciar muchos de sus rasgos, ya que no había nada que lo iluminase.

Entre el agarre de Matías y la mirada fija de Enzo, me estaba poniendo nerviosa.

Cuando pensaba que él ya se giraría para darme la espalda, hizo todo lo contrario. Se acercó a mí lentamente. Poco a poco fui notando su respiración y su aliento, que seguía oliendo a alcohol. Llegó hasta mi oreja dejándome llegar a oler su colonia.

— ¿Por qué me odias? — Dijo en un susurro. Ahí su aliento chocó contra mi oreja.

Aún notaba el brazo de Matías, y se me aceleraba el pulso al tener a Enzo tan cerca.

— Yo no...— Empecé a decir pero no pude acabar la frase. A ver, no es que le odiara pero simplemente no habíamos congeniado.

Después de ver que no le contestaba, se alejó de mí y se quedó unos instantes mirándome a la cara, pero esta vez con tristeza. Dió un suspiro y acto seguido se giró hacia la pared de la tienda, dejándome ver solamente su espalda.

Ahora lo único que notaba era el brazo de Mati, así que intenté quitar su agarre de mi lentamente para que no se despertara e intentar volver a dormirme. Al final lo conseguí.

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Al día siguiente nos despertamos y fuimos a desayunar. Esta vez decidí irme con Felipe, Fran y Juani. El día transcurrió más relajado y después volvimos a la residencia dónde nos hospedamos.

Lo que quedaba de tarde me la pasé viendo alguna serie en mi habitación, más tarde vino Juani y Fran a mi habitación, y pusimos una película.

Después, bajamos al comedor de la residencia para cenar. Me encantaba comer y más ahí que era buffet. Cuando acabé y me iba a ir a mi habitación, vi a Matías acercarse a mí.

— T/n ¿podemos hablar? — Me preguntó.

— Claro. — Dije y le seguí hasta su habitación para hablar tranquilos. Una vez dentro me senté en el borde de la cama de Mati para estar más cómoda, pero él seguía de pie. Parecía tenso y como si siguiera pensando en qué decir. Supongo que querría hablar de lo que pasó en la puerta de los baños. — ¿De qué querías hablar?

— Ya sabes... Lo de los baños. — Dijo rascándose la nuca.

— Sí, tenemos que hablar del tema. — Dije asintiendo. Él se sentó al lado de la cama junto a mí, para poder hablar mejor.

— T/n, me pareces una mina increíble, contigo estoy muy cómodo y me haces reír mucho. — Dijo sonriendo.

— A mi también me pareces muy buen chico y además atractivo Mati. Sino en los baños me hubiese apartado, pero no lo hice por algo. — Mati levantó la cabeza para mirarme directamente a los ojos, tenía la mirada iluminada por mis palabras.

— Yo...— Empezó diciendo. Pero antes de que acabara le interrumpí.

— Aunque fue un error. — Dije rápidamente dolida, pero intentando que no se me notara. Claramente no fue un error para mí, yo sí que quería besarle, pero ahora que sabía que tenía novia no podía hacerle esto. — Tú ya tienes tu vida hecha fuera del rodaje, puede que sea la hija de tu jefe y por eso te llame la atención, o yo qué sé, pero piensa bien lo que haces antes de que te arrepientas y le hagas daño a alguien.

A él se le borró la sonrisa, ahora parecía tenso.

— Yo no te quiero hacer daño. — Dijo seriamente. — Bueno si vos piensas que fue un error, pues alomejor sí lo fue. Pero no entiendo por qué lo piensas si me acabas de decir que te parezco atractivo y que no te querías alejar de mí en los baños. De todas formas aceptaré lo que decidas.

— No todo es tan fácil, Matías. — Esto me estaba doliendo mucho, pero no quiero ser parte de una infidelidad. — Mejor que hagamos como si no hubiera pasado nada, me gustaría seguir igual que antes contigo, siendo amigos.

— Está bien. — Dijo desanimado. Me levanté para irme de su habitación y él también lo hizo. Antes de irme me acerqué a él y lo abracé.

— Gracias por esto. — Dije aún en el abrazo. Sentía mis ojos algo llorosos.

Él dejó de abrazarme y se quedó mirando a un punto fijo de la habitación.

Yo ya tenía que irme, esto me dolía mucho, y más de alguien del cual me estaba enamorando. También me dolía pensar en que alguien como él pudiese serle infiel a su novia, aunque no la conociera es algo que no me gustaría que me hicieran y estaba algo decepcionada.

Pensé que diría algo más antes de marcharme, pero no lo hizo. Me dejó marchar sin decir ni una sola palabra.


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Como está el ambiente... puff

¿Qué opináis?

¿Esto será el final de Matías y T/n?

Por cierto, lo siento si hay muchos diálogos en los que hablan ellos que no están bien. Lo intento hacer lo mejor posible pero no soy argentina.

Estaros atentos que hay una nueva historia con Blas. Esperemos que tenga tanto apoyo como esta. 

Besis :)

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