𝒊𝒗. maquillaje

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𝟭𝟵 𝗱𝗲 𝗻𝗼𝘃𝗶𝗲𝗺𝗯𝗿𝗲 𝗱𝗲 𝟮𝟬𝟮𝟭

Violeta se levantó temprano, odiaba con su vida levantarse temprano. Sus horarios de descanso eran raros, cambiaban todo el tiempo, sin razón.

Un día, como ayer por ejemplo, se podía ir a dormir temprano. Se supone que si te dormiste temprano, te podes levantar sin problemas ni quejas de querer seguir acostada en la cama, o no?

Bueno, a Violeta le pasaba lo contrario. Podía dormirse a las 21:00 PM porque se tenía que levantar a las 8:00 AM y era incapaz de despegar la cabeza de la almohada cuando sonaba la insoportable alarma que tenía a su lado, en la mesita de luz, adornada con una bonita lámpara y una pila de libros a su lado.

De todos modos, no crean que ella se dormia temprano siempre. Tuvo una época de su vida (que sigue presente) donde se iba a dormir a las 5:00 AM y lo único que la podía despertar eran sus hermanos golpeandole la puerta de manera exagerada.

Eso la hizo acordar, les tenía que dar la copia de la llave de su casa.

No era por un tema de toxicidad entre hermanos o algo parecido. Era por si llegaba a haber un accidente o quieran hacer una sorpresa sin que el dueño se diera cuenta, entre otras cosas

Tenían la suficiente confianza para saber que entre ellos no iban a irrumpir su privacidad.

Tenían una buena relación de hermanos, y no hacia falta aclarar que la favorita de Guido, Pato y Gaston era Violeta. No por ser la hermana menor, si no porque ella era tan buena para este mundo, que sin darse cuenta la podían lastimar y manipular como quisieran, aprovechándose de su dependencia emocional.

No hacía falta aclarar que a los Sardelli no les agradaba para nada el novio de su hermana. Se sabía que el la había lastimado bastante, pero siendo Vi, siempre lo terminaba perdonando por las cosas que le decía o hacia.

Quería que la quieran, eso estaba más que claro, también le tenía miedo al abandono, tenía inseguridades consigo misma y por lo que por más de que todos sus conocidos le recordaban lo hermosa que era, no solo físicamente si no personalmente, ella no llegaba a creérselo.

Y eso de quien era culpa? de su novio.

Movió la cabeza ligeramente para sacar esos pensamientos negativos que la noche anterior también había tenido acerca de su pareja, y se levantó de una vez por todas.

Fue hasta el baño, se lavo los dientes, se hizo el skincare y luego bajo las escaleras. Ni se molesto en cambiarse la ropa o peinarse el nido de carancho que tenia en la cabeza, ya que se encontraba sola en su departamento.

Fue hacia la cocina y se preparo su desayuno; un café con leche y un bol de granola mezclado con yogur sabor vainilla.

Mientras se sentaba en la mesa, miraba su alrededor, realmente era un ambiente muy acogedor.

𝗗𝗘𝗦𝗧𝗜𝗡𝗢𝗦 𝗖𝗥𝗨𝗭𝗔𝗗𝗢𝗦 | matias recalt  𓍯  (PAUSADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora