ACTO 3

4 0 0
                                    

Ya habían pasado 4 meses desde la llegada de aurora a la tierra y de que Darién, "Alexander" despertará el poder que tenia dentro de el, desde que eso sucedió Darién y aurora no habían dejado de pelear contra los  enemigos que aparecían  ya fuera de día o de noche, la situación actual era como si el despertar de ambos hubiera dado luz verde para ser amenazados, como si las criaturas se hubieran librando de alguna represión y ahora eran libres de actuar a su merced.


— Alexander— tomo asiento para recostarse un momento en la banca y recargar su cabeza en las piernas de el ahora pelirojo — Mi espejo me ha avisado que un nuevo enemigo aparecerá esta noche, al parecer es fuerte, nos costara trabajo acabar con el.

— Pero eso no es problema para nosotros dos — Soltó animado mientras termina de beber un refresco de lata.

— No te confíes Alexander— dejo salir un suspiró, tratando de no quedarse dormida.

— No me confió, solo tengo demasiada confianza en nosotros dos — posó una de sus manos en la cabeza de la rubia y la acarició despacio.

— Cómo sea— sonrió ante lo que Alexander habia comentado.


Mientras ellos dos hablan, Fernanda se acercaba hacia Darién, el pudo notar que ella se dirigía hacia donde estaban ellos dos descansando un poco, por lo que no  pudo evitar poner una cara un poco molesta, aurora pudo darse cuenta de su reacción Porqué presiono de más su cabeza, ante esa acción  solo pudo preguntarle si algo pasaba, así que le conto cada detalle, aurora con una sonrisa socarrona le dijo que no se preocupara y que lo dejara en sus manos, si ella hacia algo fuera de lugar, se había adaptado sin problema  a la Sociedad actual, y sabia que hacer en estos casos.


— Hola Darién — no paso desapercibida la presencia de la chica que acompañaba al joven — Vaya,pero que bonito día, si no tienes nada que hacer te invito a mi casa ver una película, mis padres no estarán — Después de decir eso, barría con la mirada a la joven rubia.

— ¡Pero que atrevida! Mira que hablarte de esa manera —  Ella no se quedaría atras con la guerra de de miradas,— debes de estar muy desesperada — Se había puesto de pie, y la diferencia de altura era notable, por lo que aurora ni dudo un segundo en mirarla hacia bajo como si fuera menos ante ella.

— ¡Disculpa! — Soltó con gran molestia, se enderezo un poco, tratando de verse alta, no lo admitiria, pero aquella rubia le provocaba un poco de miedo— Pero yo estoy hablando con Darién o dime acaso ¿tienes algo que ver con el? — Se cruzo de brazos esperando una respuesta.

— Pues si —rodeo a al chico quedando delante de ella, por las jardineras tomo un poco mas de altura, lo abrazo debajo de los hombros y posiciono su cabeza en su hombro, por lo que sus mejillas rosaban— ya que yo, soy su novia, así que vete a molestar a otra parte, quizás haya alguien por ahí que quiera ir a tu casa —  La sonrisa que ahora había soltado, provocaba escalofríos.

— ¡Pero que mal gusto tienes Darién! ¿como puedes andar con una persona como ella? — Ahora se sentía muy ofendida.

— Fernanda, no quiero nada contigo— Porfin había hablado, y aprovechaba la situación para tomar las manos de aurora, sin quitarlas de donde estaban— Solo te quiero como amiga, así que no sigas con esto.

— tu te lo pierdes Darién— Dio una última mirada a ambos y se retiro del lugar.

— ¿Por qué le dijiste que eras mi novia?— Al repetir la ultima palabra, se sonrojo hasta las orejas y más  ya que aun seguían en la misma posición.

LA LUNA DEL SOL ( CORREGIDA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora