Todo parecía marchar normal en la tierra, desde que Elian apareció, la energíanegativas habia disminuido, el hecho que las peleas disminuyeran mantenía a Aurora muy aburrida.
— Que aburrimiento — se encontraba desempacando peoductos que habian llegado a la tienda— no puedo creer lo que voy a decir pero, extraño a esos tipos, no hay nada divertido.
— Buenos días me bella dama— Ingresaba alegremente a la tienda.
— ¿Que tiene de bueno el día?— Miraba fastidiada chico— no ves que estoy aburrida.
— Y ¿no te gustaría salir a comer? A tomar un poco de aire.
— mmm— penso unos segundos la propuesta — pero salgo hasta la una.
— Pues espero aquí contigo.
— ¿Esta seguro? no hay nada que hacer aquí.
— No me hablas de tu, siento raro, ¡oh! por cierto, ¿recuerdas que una vez te traje una rosa?
— No.
— Bueno te traje una linda maceta— puso en el mostrador la planta que habia traido— es una linda azucena.
— Que detalle, eres muy lindo gracias— sonrió mientras olia la flor.
— lo se .
— Oye aron ¿te puedo hacer una pregunta?
— Acabas de hacerme una— jalaba una silla periquera para tomar asiento.
— ¿puedo hacerte otra?
— Acabas de hacerla— se rio por haber logrado su objetivo.
— ¡ay! — se recargo bruscamente en el mostrador quedadon cerca del rostro del chico— ¿Que relación tiene tu miranda, con mi hermano?
— ¡oh ya se a que va esto!— alzo su ceja de forma burlona— ¿acaso estas celosa?
— No— se sonrojo y se alejo para también tomar asiento en su silla— solo quiero saber.
— Tranquila solo son amigos,— saco un cigarrillo para encenderlo y darle una calada— por ahora.
— Creí que eran algo más— Tomo el cigarrillo para apagalo y tirarlo a la basura — Me alegra que el hallá encontrado a alguien más para amar— Señaló el cartel de " prohibido fumar" ante la reacción del chico— pero a la vez me molesta, no puedo soportar que alguien más lo quiera.
— Tranquila aurora— ahora saco una paleta de caramelo que traía en su bolsillo— se lo difícil que es dejar a la persona que más amamos en manos de alguien más, nunca sabemos si es la correcta para ellos, yo estoy tranquilo por que se que tu hermano es una buena persona, se que ella estará en buenas manos, aun que al principio no me agradaba que mi hermana se fijara en los chicos, pero es parte del crecer.
— No lo quiero perder — tomo la bebida que habia dejado hace tiempo enfriar— no después de haberle jurado a mi madre que lo protegería siempre, incluso con mi vida.
— Un amor no daña a madie, además sabias que tarde o temprano pasaría esto.
— No, hasta que los conocímos a ustedes.
— Que linda— se arriesgo a jalar suavente la mejilla de la rubia — ¡oh mira! es la una,vamos por un Heladio.
— claro— miro mal a Aron— vamos.