Capítulo 7

458 55 8
                                    

La pequeña flor descansaba en un florero que pude conseguir; estaba justo cerca de la ventana, para que pudiera sentir el sol. No me esperaba nada de lo que estaba sucediendo, ni siquiera sabía que el hermano de Navier podía ser así de amable. Aunque vi su rostro cuando apareció el emperador con esa mujer, creo que habrá una nueva víctima de su ira. Es que ahora puedo entenderlo mejor, él solo protege a su hermana y se va contra cualquiera que la dañe. En esta vida yo no dañé a Navier, por eso no me odia.

Aunque si la historia se vuelve a repetir y Sovieshu trae otra amante, está claro que Kosair será expulsado nuevamente. De igual forma, no se va a divorciar de Navier, al menos no si la otra chica no se embaraza igual que yo, pero recordemos que el emperador es estéril. Si esa otra chica se embaraza, sería de la misma forma que yo, con otro hombre. Yo ya llegué embarazada, pero sería demasiada casualidad que ella igual. Yo aproveché mi embarazo para obtener ventaja, ella directamente se va a embarazar con esa intención. Es la única forma de que todo se repita, si no no veo manera.

Aunque ahora que lo pienso, muchas cosas podrían cambiar. Dado que Kosair vino a visitar a Navier antes de tiempo y otros sucesos se vieron alterados, esto también significaría que el emperador podría no conseguir una amante, Navier podría aceptar criar un hijo ajeno, él podría divorciarse de ella sin tener una mujer embarazada, ambos podrían ya no ser estériles o mejor aún, podría ser Navier la que al final consiga un amante. Esto, más que viajar en el tiempo, parece un viaje a un mundo diferente.

Son tantas las cosas que podrían pasar que no puedo descifrarlas, por lo que tengo que buscar otra forma de jugar mis cartas, una que no me perjudique. La protección de Navier podría ser muy importante, al igual que la de Kosair, pero ciertamente él parece un poco clasista, además de que, según lo que pasó antes, será exiliado, por lo que no puedo contar demasiado con su apoyo.

De cualquier forma debo ser cuidadosa, ya confié en alguien y fui traicionada, no puedo volver a caer en esa trampa. Tengo que tratar de jugar sola, tengo que agarrar a mis peones y moverlos a mi antojo, pero sin perder el control de la partida. Eso significa que si evito que Kosair sea exiliado, él podría ser un gran punto de partida para obtener mi libertad total. Los hermanos podrían protegerme mejor que el emperador, siempre y cuando no olvide que soy yo quien está moviendo las fichas.

Además, también tengo que acercarme al príncipe de Occidente, después de todo, él es amigo del duque Elgy y yo aún tengo una venganza pendiente. Necesito encargarme de eso, pero no va a ser fácil. Por lo que pude ver en mi vida anterior, es un sujeto demasiado astuto y lo necesito cerca para que pueda armar un plan adecuado. Bueno, me ocuparé de eso en otro momento. Lo que necesito ahora es evitar que el emperador tenga una amante y encontrar la forma de probarle mi teoría.

Si el príncipe se volviera amante de Navier me sería demasiado útil, podría tenerlo cerca, pero hay que recordar que su hermano muere y él se vuelve rey, por lo que podría haber muchos problemas si embaraza a Navier. Así que esa idea está del todo descartada, aunque ahora que lo pienso, no he oído nada de que su hermano esté enfermo y ya estamos en fechas cercanas a su muerte.

¿Por qué siento que este mundo tiene todo cambiado? ¿Será posible que acá el príncipe nunca se convierta en rey? De ser así me sería muy útil, porque podría matar dos pájaros de un tiro y vengarme de Elgy y Sovieshu. De cualquier forma nadie sabe lo que va a pasar, ni que el rey de occidente va a morir, ni que su hermano lo sucederá, por lo que los problemas que cause no me incumben.

Si el príncipe se vuelve el amante de Navier arreglamos muchas cosas, el nacimiento de su hijo, Sovieshu jamás soportaría eso, seamos honestos, el príncipe lo supera por creces y de paso lo tengo cerca, puedo encontrar la forma de vengarme de Elgy a través de él y al final, todos pagaron el daño que me causaron. Luego tendría que encontrar la forma de obtener mi libertad como esclava y vivir una buena vida. Aunque si no lo logro, me conformo con hacer sufrir a mis enemigos, ese sería el mejor de los regalos que podría recibir.

El problema va a ser convencer a la emperatriz de que, claro está, no va a estar de acuerdo. Además, el emperador podría querer divorciarse de ella por esto y eso no ayudaría a mi plan. Entonces tengo que encontrar una forma de que ambos lo acepten y eso significaría que, en vez de espantar a esa mujer, tengo que conseguir que ella ocupe mi lugar y eso podría ser una buena ventaja para luego impulsar a Navier y de esta forma mi plan no fallaría.

El desenlace que tenga esa mujer no me importa, el único que me interesa es el mío y tengo que esforzarme más que nunca. Aun mi vientre no está abultado, pero en cualquier momento podría pasar y además del nacimiento de la bebé. No puedo ocultarlo por siempre, pero aún no estoy segura de si sea lo mejor revelarlo. Estoy algo cansada y confundida, pero necesito poner en orden mi mente.

En ese momento levanté la mirada y observé la preciosa flor, sentí un impulso inquebrantable de ir a ver a su dueño, a quien me la había obsequiado. Me volví a vestir, ya era de noche, pero tenía la esperanza de encontrarlo. Comencé a caminar al jardín, no había nadie cerca y eso me resultaba algo incómodo. Las puertas estaban cerradas, por lo que tuve que abrir una ventana y saltar.

Aunque pensé que había sido en vano y que tendría que volverme a mis aposentos para acostarme e intentar dormir. Diría que me equivoque. El dueño de la flor estaba sentado en el suelo, observando la luna y nada podía ser más hermoso que esa vista. Me acerqué con siglo y cuando me sintió se volteó a verme, nuestras miradas chocaron al instante y todo se congeló.

 Me acerqué con siglo y cuando me sintió se volteó a verme, nuestras miradas chocaron al instante y todo se congeló

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Retornemos la historiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora