𝐋𝐎𝐕𝐄 𝐌𝐄 𝐀𝐆𝐀𝐈𝐍 |SEVERUS SNAPE

V. Advance

CAPÍTULO 5
AVANCE

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En el momento que llegue a mi habitación podia sentir lágrimas en mis mejillas pero las quité con mi mano. Ese idiota de Severus era irritante y arrogante.

Me tranquilice y fui al baño que estaba conectado a mi cuarto, me lave la cara para poder eliminar cualquier rastro de lágrimas. Salí del baño y me quité mi abrigo, Ben salió de mi bolsillo y parecía preocupado.

—¿Qué pasa Ben? —Empezó hacerme señas y gestos —¿Niffler? —Lo miré confundida hasta que reaccioné —¡NIFFLER! —Salí de mi habitación y camine por los pasillos angustiada, Hogwarts era muy grande y tardaría mucho para poder encontrarlo.

Estaba tan concentrada en Harry y en Severus que había olvidado en cuidar mis criaturas, fui una tonta. Recorrí los pasillos y agradecía que no había nadie en ellos, así que podía buscar libremente, seguí buscando hasta que choque con algo duro o más bien alguien.

Alce la cabeza y vi a Severus, nuestros cuerpos estaban muy juntos y podía sentir su pecho que parecía estar en forma. Me separé de él nerviosa y miré su semblante que era relajado e incluso pude ver una pequeña sonrisa que intentaba esconder.

—Severus, ¿que haces aquí? —Dije apurada ya que no tenía tiempo que perder conversando con él.

—Eso lo debería preguntar yo —Me miró con una sonrisa burlona y parecía tener algo en sus manos pero no pude ver bien que escondía porque sus manos estaban entrelazadas por detrás de su espalda  —¿Qué hace una profesora tan diligente como usted fuera de su habitación?, parece preocupada —Alzó una ceja mientras me miraba con burla.

—Que amables palabras profesor Snape —Lo desafié con la mirada, hace mucho que nadie me sacaba de mis casillas como lo hacía él —Y respondiendo a su pregunta me dirigía a la cocina a buscar un poco de agua.

—¿Enserio?, parecía como si buscara algo.

—Pues se equivocó —Podia sentir como me sudaban las manos, me tenía que apurar para poder seguir buscando a Nefflir Jr antes de que hiciera una travesura.

—Entonces esto no es tuyo —Enseñó sus manos y en estas tenía un frasco de vidrio, Nifflir Jr estaba adentro de este y muy enojado.

—¡NIFFLIR! —Exclame con alegría, le arrebate el frasco a Severus y lo saque del frasco —Por favor no vuelvas a escapar —Se lanzó a mis brazos muy contento —No te preocupes mamá está aquí —Lo intenté tranquilizar.

Estaba tan concentrada en darle mimos a Nifflir que había olvidado que Severus seguía ahí.

—¡EJEM! —Carraspeó mientras me veía con una ceja alzada.

—Ah gracias Severus —Le sonreí con las mejillas sonrojadas, me avergonzaba que me viera mimando a Niffler —¿Donde lo encontraste? —Pregunté para poder cambiar de tema.

—Estaba en mi oficina esculcando en mi cajón —Respondió sonriendo viendo a Niffler con burla.

—Te lo agradezco mucho, Niffler Jr es muy travieso —Le dije mientras acariciaba a Niffler —Si no lo hubieras encontrado hubiera echo muchas travesuras con los estudiantes —Solté una pequeña risa.

—Si, fue una suerte —Se rio. Al escuchar su risa me hacía recordar nuestros tiempo de Hogwarts cuando aún éramos mejores amigos.

—Gracias Severus pero ya tengo que volver a mi habitación, vamos Niffler Jr despídete —Alce a Niffler Jr a la altura de Severus y le enseñó la lengua demostrándole que no le agradaba. Solté una pequeña risa y vi desagrado en Severus al parecer no le gustaba tampoco  —Adiós Severus y gracias.

Me fui de ahí con Niffler en brazos mientras lo regañaba, hasta que llegamos a mi habitación y lo coloqué arriba de mi cama.

—Niffler ya no hagas travesuras o si no te entregare a mi padre para que te discipline—Me miró con ojos tristes y empezó a restregarse en mi mano —Ya es hora de dormir.

Me puse la pijama dispuesta para irme a dormir y al poner mi cabeza en la almohada pensaba en Severus y como fue que con ese pequeño detalle hizo que mis defensas bajaran ante el y sonreí al recordar su sonrisa pero tenía que evitarlo.

Tenía que alejarme de Severus y concentrarme en proteger a Harry de Voldemort, seguí pensando hasta que me sentí soñolienta y me quedé dormida

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Me sentía feliz, había logrado que Alondra me llamara por mi nombre eso era un gran avance. Camine hacia mi habitación para poder irme a dormir ya que mañana iniciarían las clases para los de nuevo ingreso y tenía pensado en conocer a Harry y ver su verdadera personalidad.

Entré a mi habitación y todo estaba en orden, me cambié de ropa por una más cómoda listo para irme a dormir, después me dirigí a mi armario y saqué una pequeña caja de madera, la abrí y en su interior tenía fotos mías junto a Alondra.

Las vi y no podía quitar la vista de la cara de Alondra que era angelical, sus ojos mostraban inocencia pero también era muy valiente, lo había demostrado el día que se culpó por Lily. También era cariñosa y amorosa con las criaturas, todo Hogwarts sabía el gran amor que tenía por ellas y las protegía en su habitación cuando estaban lastimadas, ella era alguien admirable.

Saqué una pulsera de oro que me había regalado cuando me confesó sus sentimientos, aveces pensaba que hubiera pasado si en ese tiempo estuviera enamorado de ella y me torturaba siempre que lo pensaba.

Me acosté con las fotos y las miraba con atención, las seguí viendo hasta que sentí mis ojos pesados y me quedé dormido.