Solo es un recuerdo

No sé, me siento rara

Para las grandes personas
Capítulo 1

No sé, me siento rara, extraña mejor dicho: "atontada", siento como si un día de estos mi vida desapareciera, como si todo fuese un simple y tenebroso secreto. Me pregunto: Amaya Race, ¿Qué pasa contigo?

Me contesto:
-NADA (grito, mientras por dentro lloro)

Me siento angustiada mis ojos me arden de tanto mirar fijamente a ese bosque frondoso y cada palabra nauseabunda cargan en mi espalda como un colchón mojado. Estoy navegando en un mar de arena dónde solo estoy yo y el sol quemando lentamente mis ojos color miel claros. ¡Despierta Amaya! (me digo yo misma) bajo a la sala donde mi madre prepara un rico banquete. Me quedo mirándola fijamente, mi hermosa madre, esa mujer llamada: Aria que me ha criado toda la vida desde que mi padre: Eirastón falleció. Pues esa mujer alta, pelirroja de cabello ondulado, ojos grandes y marrones, tez blanca y pecas en su rostro... tan callada y sensual. Mi hermosa madre sería incapaz de hacer algo en contra de ella.

Hoy conoceré a mi padrastro, él hombre que le a robado el corazón a Aria. Mientras ella cocinaba, comencé a conversar de nuestro hogar, la universidad y otros temas, ella me mira fijamente a los ojos, transmitiendo paz y me dice:

-¿Qué haría yo sin ti? (Suspiro lentamente y la abrazo)

Me quedé callada, pues tomamos un rumbo a la conversación sobre donde vivíamos, una hermosa villa en Inglaterra llamada: "Lackock"( tiene un valor histórico y un buen estado de conservación, atraen a muchos visitantes) una cabaña solitaria, fría un poco tenebrosa (me río en voz baja) al lado izquierdo tenía un pequeño lago, lleno de flores llamativas; ese lugar en donde me conectaba y me sentía en paz. Subo a mi cuarto y por toda la casa olía un rico aroma de lavanda y al final una música de fondo lenta, relajada me hacía descansar por un momento...

Me visto con un traje de seda color salmón, unas zapatillas color hueso, de accesorios combiné unas pantallas color oro y mi reloj que jamás me he quitado ya que, supuestamente, mi padre me lo obsequió a mi menoría de edad. Ese reloj era lujoso, en piedras de sal, color oro, con números romanos, también era mi alerta, pero ¿Para qué? No lo sé, cada vez que llega la 1 de la mañana, expulsa un polvo color magenta que me causa mareos, me transporta a un ambiente tenue, donde me adormece; luego de ese efecto se va y a la 1 am vuelve y sucede lo mismo, jamás he sabido para que es. Aria (mi madre) me grita:

-Amaya, baja llegó el invitado.

Me perfume, con mi mejor perfume de aceites de uvas envueltas en champagne ¡Qué delicia! Bajo y veo a ese hombre alto, un poco coqueto, la astucia le corría por su cuerpo, un fortachón, robusto, sensual, ¡Ay! Tiene una mirada penetrante  y su color de ojo es verde olivo, cabello claro (me envolví en mi pensar) mi madre grita:

-Amaya Race, acércate,

Yo caí, estaba desorientada, me envolví, ¡Qué estúpida! ¡Amaya despierta! Es tu padrastro... Me percato, ¿En qué pensé Dios?... Me relajo, camino lentamente a donde él, me presento y responde:

-Me llamo: Cheslock Coi, el placer es todo mío.

Me dio su mano y se sentía tan suave, delicada. Lo miro y responde con una pequeña guiñada. Mi madre lo agarró por la mano derecha y le enseñó la casa. Yo viré un poco y nuestras miradas conectaban como un imán atrayendo su metal. Continué pensando... me senté en la sala a esperar que llegarán para cenar; de momento oí leves pasos en la azotea, mi pupila se agrandó, me sentía mareada, manipulada por un ser raro. Me encerré en mi, corrí al baño, miré al espejo y en mi ojo izquierdo una nube sombreaba mi pupila, incline la cabeza más cerca a el espejo y detrás de mi flotaban unas campanas color cereza, vive en mi cuerpo un vacío que se reflejaba en un entorno abrupto... ¡DESPIERTA AMAYA! Grita Aria. Abrí mis ojos y solo miraba dos ojos achinados y era Cheslock. Me levanté, me sentía confundida, tenía frío, mi reloj marcaba la 1 am, expulsa el polvo espeso que me hipnotiza lentamente, madre grita:

-¡Amaya, baja!

Quedé inmovilizada por una fuerza sobrenatural; ¿Será magia? Aria grita aún más fuerte, de repente una voz leve grita:

-Ven, ven, ven...

Quedé asustada, mi ojo comenzó a llorar sentía el dolor de una persona compatible a mi. ¡Qué noche tan extraña! estoy desconcertada (pausé) bajo a la sala.

-Race, siéntate para comer, ( grita Aria) lo hago. Había de fondo una clásica música de "Eduardo Elgor" de 1970 (la época en donde vivíamos).  Mientras bendecimos la comida; se vio una luz brillante. Salgo a mirar qué es... ¡Enserio! Era el machista y estúpido amigo de Aria, él supuesto mano derecha de mi padre. Le gritó:

-¡Llegó Axel!

Mami sorprendida sale, le da un beso, deja marcado su labial color rojo, él la mira alegre, mami lo invita a pasar para cenar todos juntos, me siento y pienso:

-No es justo que Eirastón( padre) desapareció y Axel (policía) andaba con él, luego llegó como si su mente fuera absorbida, callado, ni tan siquiera me mira a la cara, cruel e idiota... (Suspiro, mientras el bosque me llamaba). Mi padre era Capitán de la FBI, Axel era su mano derecha, "según él". Mi madre a la edad de mis 18 años, me contó la verdadera historia de mi padre, "según ella"; Axel y mi padre fueron a un viaje secreto en la búsqueda de unos animales cuyos nombres eran: "Phantom" el viaje era en "South África" luego de ahí, mi padre desapareció sin rumbo alguno. En ese entonces, mi mente no se callaba, estaba anclada en un suelo de cristal, donde cada cortada derramaba mi pura sangre iluminando un oasis, el reflejo en mi mente detenía mi pensar.

Me siento derrotada, jamás conocí la verdadera identidad de él, no sé si sea cierta la historia que Aria me contó, quisiera descubrirla, reclamo todos los días, pues siento vida a mi alrededor, siento pasos, oigo diferentes voces. Hay algo ahí afuera que retumba mi ser...

Continuará...

AMAYA Y...✨