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⋕⭑ׅ❋NARRADOR 𝗣𝗢𝗜𝗡𝗧 𝗢𝗙 𝗩𝗜𝗘𝗪 🍃
El velorio de Mateo había sido reservado, solo las autoridades lo sabían, después de todo, toda la ciudad creía que estaba muerto desde hacía mucho tiempo.
Esperaron a Sofía, pero no apareció, y después de algunas semanas, simplemente desapareció de la ciudad. La casa de los Palacios fue tomada por el gobierno y sería subastada, una gran pérdida de tiempo, nadie quería comprar una casa tan maldita como esa.
Lara Beckman estaba en todos los diarios, pero se negaba a dar entrevistas. Según las enfermeras, la chica no había dicho una palabra desde que se entregó nuevamente a las autoridades.
Tenía la mirada perdida, apenas comía y pasaba la mayor parte del tiempo mirando al vacío. Algunas pacientes la veían llorar desesperadamente todas las madrugadas, pero incluso en ese estado, seguía sin decir una palabra.
Lara ya no tenía su salud mental en orden. Había visto chicas morir frente a ella, pero ver a Mateo perder la conciencia, esta vez de verdad, había creado un gran vacío en su pecho.
Se sentía sin propósito, recibía la visita de sus padres y hermano, pero se negaba a hablar con cualquiera de ellos. Era como si Lara hubiera muerto junto con Mateo y su cuerpo sin vida era todo lo que quedaba atrás.
En las semanas siguientes, no hubo noticias nuevas, excepto que las ojeras de Lara aumentaban y perdía cada vez más peso. Estaba irreconocible y los diarios más crueles decían que ya no era hermosa ni agradable, y que si hubiera sido así cuando conoció a Mateo, ni siquiera la habría elegido para el plan.
Lara no veía esas noticias y sinceramente, ya no le importaba lo que la gente decía de ella. Sentía que estaba cada vez más agotada, sentía que nunca volvería a ser la Lara valiente y loca que tanto le gustaba a Mateo.
Quitaron a Mateo de escena y entonces, creyeron que la calma y tranquilidad finalmente se instalarían en el pueblo.
Error de ellos, la paz nunca dura tanto tiempo.
Ocurrió una muerte en el sanatorio, exactamente seis semanas después del regreso de Beckman. La víctima fue Celina Johnsons, una chica con discapacidades mentales, que apenas podía moverse por sí sola.
De repente murió, por falta de oxigenación en el cerebro. Como si alguien hubiera apretado su cuello hasta que ya no pudiera respirar.
Podría haber sido un accidente y si fuera un crimen, nadie podría ser condenado, después de todo eran chicas que no estaban en su sano juicio.
Y fue entonces cuando las sospechas se levantaron, después de todo, además de las enfermeras, solo había una persona que mantenía contacto con la pobre Celina.
Y esa persona era su compañera de habitación, Lara Beckman.
