En mis recuerdos [ AU ]

27.- ¿Deuda?

Velvet había regresado a su habitación con la fruta en mano al igual que su hermano Veneer a quien antes de que regresara con Floyd se tropezó y cayó de cara haciendo que este sangrara de la nariz, intentó detenerlo con la palma de su mano pero salía cada vez más, entro en pánico y no sabía que hacer así que le pidió ayuda a Floyd.

— ¡Floyd ayúdame!— entró desesperado a su habitación con chorros de sangre saliendo de nariz, el mencionado sólo lo miraba sorprendido y después aterrorizado, hace 20 minutos salió de la habitación bien y ahora tiene un derrame de sangre, que carajo...

— Espera, ¿Qué pasó? Cómo pudo ocurrir esto en un pequeño lapso de tiempo...— se levantó y se acercó a revisar a Veneer, así que lo hizo que agachara la cabeza mientras sujetaba con su dedo índice y pulgar la parte blanca de su nariz, esto para generar presión en las fosas nasales y lograr detener su sangrado.

Veneer estaba asustado y a la vez un poco avergonzado, la textura de los dedos de Floyd era tan suave que se había perdido completamente en la sensación, Floyd por otro lado lo seguía sujetando y lo haría por lo menos 10 minutos así aseguraría detenerlo por completo.

El tiempo para Veneer pasaba tan lento y le agradaba sentir sus dedos en su rostro aunque no de la forma que el quisiera y fuera en una situación tan embarazosa.

Estaba tan centrado en la sensación de sus dedos que le tomo por sorpresa cuando lo soltó y se alejó de él, realmente estaba sumido en sus pensamientos y disfrutaba de la calidez de sus deditos.

— ¿Qué fue lo que pasó?— preguntaba Floyd mientras se alejaba y regresaba a su mochila, sacó más papel y lo mojó un poco para después volver a acercarse a Veneer.

— Yo... Salí del baño, pero supongo que venía distraído que me tropecé sin querer y-...— no pudo terminar de hablar porque el peli-rosa lo tomó del mentón y comenzó a limpiar la sangre que tenía antes de que se terminara de secar.

Veneer lo miraba embobado, hasta ahora no se había dado cuenta de las características más recientes de Floyd, tenía su cabello un poco más largo seguía usando el típico tinte magenta pero también estaba combinado con blanco eso lo hacía ver más hermoso, tenía su fleco que cubría parte de su ojo izquierdo, llevaba un piercing en su labio inferior del mismo lado, uno en la ceja derecha y traía muchos más en ambas orejas, siempre supo que era un amante de ese estilo pero no imaginaba lo sexy y bello que se vería actualmente.

Pero lo más extraño es que sus ojos no tenían aquel brillo que siempre lo caracterizaba, es cómo si no pudiera leer sus emociones y esto ya lo había notado antes incluso con Orchid, ella también tenía la misma mirada aunque aparentemente reían es cómo si estuvieran muertos en vida. En el fondo lo hacía sentir culpable, quizás ellos eran la razón de esa mirada... Pero la realidad era otra.

Floyd seguía limpiando y Veneer seguía contemplando su belleza, cómo sería volver a besarlo o acariciar sus lindas mejillas, las pequeñas pecas que adornaban su rostro las cuáles no eran muy evidentes pero si te acercabas a él lo suficiente podías notarlo, su ojos color magenta eran tan hipnotizantes no podía dejar de mirarlos.

Llegó un punto en el que Floyd se acercó demasiado que podía sentir su respiración cerca de su rostro... Quería besarlo, pero antes de hacer algún otro movimiento este se alejó.

— Debes tener cuidado la siguiente vez, pudiste fracturar tu nariz— se alejó y fue a tirar el papel usado al cesto de basura.

Veneer todavía estaba en shock y después movió su cabeza para volver a la realidad, estaba a punto de cometer una tontería.

— Ammm gracias... Estoy en deuda contigo por ayudarme— se acercó hasta él mientras se rasca la nunca y se sentaba en su lugar.

— No es nada, no iba a dejar que te desangraras tampoco, cómo ya te dije debes tener muchísimo cuidado por dónde caminas— con eso dicho regreso a su lugar para seguir en lo que estaba antes de verse interrumpido por un Veneer paranoico.