En mis recuerdos [ AU ]

35.- Deseos

Al llegar a su departamento tuvieron que vendar sus heridas de la caída y aunque Floyd negaba necesitar la ayuda de la peli-morada esta lo tomó del cabello y lo hizo sentarse para curarlo, parecía que tenía experiencia en ello pero los gritos del chico hacía parecer que lo estaba torturando y mentira no era, usar algodón con alcohol y pasarlo por las raspaduras no era algo agradable de sentir.

- ¡AUCH! ¡ARDE ORCHID, BASTA!- trataba de quitar su mano pero esta sólo lo jalaba con más fuerza para que se quedara quieto

- ¡Quédate quieto o juro que te echaré alcohol en los ojos!- se quería reír de sus expresiones pero cómo ella era una persona muy noble no lo haría- Ya terminé, esto tiene el fin de desinfectar tu herida, quiero que te mueras pero no por una bacteria o que se te infecte la herida, si no mueres en mis manos no tienes permitido hacerlo-. puso a un lado el algodón y comenzó a vendar su mano para proteger la última herida.

Para ese momento ambos parecían momias con tanta venda y parches en sus rostros y manos al igual que en sus rodillas, agregando que Floyd traía un curita en la nariz debido a la mordida que le dió Orchid durante su "conversación" de hace un rato.

Una vez terminado el vendaje, ambos tomaron sus cosas y emprendieron su camino a casa de los mellizos, claro que estaban nerviosos pero sabían manejarlo bien, lo habían hecho con Viva, ¿porque no con ellos?

- Or, ¿realmente crees que Viva haya faltado porque se quedó dormida?, siento que nos mintió...- Floyd había hablado para romper el silencio que se había formado entre ellos.

- Yo tampoco creo que haya sido por quedarse dormida... Sólo falta que se quedara dormida a causa de alguien por alguna noche desenfrenada de pasiones carnales hahahaha...-

Ambos pararon su caminar y se voltearon a ver con evidente susto y en ese momento entendieron todo

- Oh mierda...- dijeron al mismo tiempo

Eso explicaba su ropa color negro y su polera con cuello de tortuga...

- Esa hija del sol nos debe una explicación a nosotros ahora...- su tono era decidido y Orchid asintió ante lo dicho por Floyd.

Ambos siguieron sacando hipótesis de con quién había pasado su mañana pero por más que lo intentaban no lograban encontrar una que les convenciera...

Llegaron hasta la casa de los mellizos y tocaron el timbre, les volvió a abrir el ama de llaves y Orchid comenzaba a tomarle cada vez más odio por simple hecho de existir.

Entraron y se dirigieron a las habitaciones de los mellizos, tocaron y cerraron los ojos no querían sorpresas cómo la última vez...

Pero el ama de llaves subió para decirles algo.

- Una disculpa pero los mellizos se encuentran en la piscina que está detrás de la casa, dejen que los dirija a ella- su voz no sonaba molesta más bien parecía apenada por no decirles.

Orchid la miró mal y pensó

- Vieja tonta...-

Asintieron y la señora les hizo una señal para que la siguieran y estos lo hicieron, caminaron por el enorme pasillo de la casa y llegaron hasta la parte de atrás donde había otro pequeño jardín que poseía varias mesas para tomar algún refrigerio así cómo camas para tomar el sol y estaba la majestuosa piscina, ambos abrieron la boca al ver lo impresionante que era y ahí se encontraban los mellizos, Veneer estaba nadando y Velvet reposaba en una esquina mientras tomaba una bebida.

- Señorita Velvet, sus visitas han llegado...- dicho esto hizo una reverencia y se retiró.

Velvet se espantó que hasta su bebida se cayó en la misma y casi se ahoga con el agua, Veneer estaba en su mundo nadando hasta que su hermana llamó su atención y este también se asustó.