Capítulo 3

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Uber Privado

Al levantarme en la mañana, veo que el carro de ayer estaba parqueado abajo y en la parte de afuera estaba Lisa. Cuando terminé de vestirme, bajé las escaleras y me dirigí hacia ella:

-¿Qué haces aquí?- Pregunté un poco incómoda por la situación.

-Vine a buscarte para llevarte al trabajo- Respondió mirándome de arriba abajo.

-La empresa queda a menos de 20 minutos andando, no es necesario- Dije girando mi cabeza en dirección al trabajo.

-Pero me hacía camino, y no hay ningún problema porque te lleve- Dijo abriendo la puerta del copiloto.

-Te dije que no... buenos días y nos vemos en la oficina- Dije empezando a caminar hacia la empresa.

Al llegar a la empresa, subí hasta mi oficina y comencé a trabajar. Lo raro era que Lisa no me había molestado en toda la mañana, en la zona de descanso no la vi, ni a Rosé tampoco, pero al menos eso no era extraño, porque ella comía en su oficina, no le gustaba mucho el contacto social si estaba sola, además yo solo había ido por un vaso de agua, volví enseguida a mi puesto, necesitaba terminar, me quedaban dos días para presentar mi trabajo en la reunión, al menos hoy terminaba con la segunda empresa. Iba bastante bien, se notaba que Lisa no me estaba molestando. Al llegar a hora de irse, cuando ya no quedaba nadie, se abrió la puerta como de costumbre, ya yo sabía quién era:

-Vamos, sabes que no puedes hacer horas extra- Ordenó sin moverse de la puerta.

-Está bien, déjame recoger las cosas para seguir en casa- Contesté recogiendo todo.

Ella salió sin decir nada, hoy estaba rara conmigo, pero igual no quiere que salga mal el trabajo y por eso me está dejando un poco tranquila, si yo salía mal, la empresa también iba a salir mal. Al estar fuera del edificio, me estaba esperando con su carro:

-¿Necesitas un Uber privado?- Me preguntó con una sonrisa pícara.

-No, me voy a casa caminando, ya lo sabes- Me fui de allí sin esperar una respuesta.

Al llegar a la casa no venía nadie detrás de mí, parece que se había rendido, no sé cómo, pero lo había logrado. Ya en casa me puse a trabajar en mi laptop, para adelantar para mañana:

Notificación de correo

"Que no te haya seguido hasta tu casa, no quiere decir que no sepa que llegaste a salvo"
"Buenas noches, nos vemos mañana"

Pero, ¿Qué le pasa a esta mujer conmigo? Tengo que averiguar que esta pasando, porque esto no es normal, a veces pienso que de cierta manera le atraigo, pero eso es imposible, una mujer como Lisa, no se fijaría en mí, algo malo debe haber pasado para que ella me trate así.

Al otro día al bajar las escaleras de mi departamento, Lisa estaba afuera otra vez:

-¿Otra vez?- Pregunté mirándola fijamente.

-Hasta que me digas que sí- Respondió abriendo la puerta.

-Ya te sabes la respuesta- Dije girándome para empezar a caminar.

Al llegar a la oficina, me puse a trabajar, me quedaba una sola empresa. Dejé la más fácil para el final, y así tener tiempo de preparar la reunión para mañana. No lo podía creer, ya mañana era la reunión, Lisa no me había molestado en toda la mañana, lo cual era raro. Llevaba dos días que solo venía a verme por la tarde, para decirme que no podía seguir trabajando, no se el porqué, pero no quería que hiciera horas extra. Pasó todo el día bastante rápido, logré terminar todo el trabajo a tiempo, solo quedaba prepararlo, pero eso lo podía hacer en casa. Cuando ya me estaba por ir, apareció ella a decirme lo que ya yo sabía:

-¿Por qué no esperaste a que yo viniera?- Preguntó entrándome a la oficina nuevamente.

-Porque ya yo sé que no me dejas hacer horas extra, así que para que voy a esperar a que me lo digas- Respondí dejando que me empujara hacia mi mesa.

-Si yo no vengo a decírtelo, no te puedes ir- Dijo mirándome a los ojos.

-¿Por qué?- Pregunté acercándome a ella.

-Porque lo digo yo... y no te acerques de esa manera, puede ser peligroso. Ahora vete a casa, mañana es la reunión- Respondió saliendo de la oficina sin mirar atrás.

¿Por qué? Hay tantas preguntas en mi cabeza, pero la única que quiero que me responda es, ¿Por qué? Cuando bajé las escaleras del edificio, ahí estaba ella, no se iba a rendir hasta que le dijera que sí:

-¿Te lo digo o ya sabes lo que es?- Preguntó bajando la ventanilla.

-No hace falta... vamos- Respondí dirigiéndome a la puerta del copiloto.

-Buena chica- Dijo encendiendo el motor.

En el transcurso del camino no dijimos nada ninguna de las dos, pero a mí me mataba la curiosidad de preguntarle todo, pero no podía, no tenía autoridad. Al llegar a la casa, cuando me fui a bajar me dijo directamente:

-¿Me invitas a conocer tu casa?- Preguntó mientras sonreía.

-Si claro... sígueme- Respondí terminando de bajarme de su carro.

Lisa subió conmigo pero no hacía más que mirarme. Al entrar al departamento, analizó cada rincón, hasta que vio la mesa donde trabajo, me miró y me dijo:

-¿Tú no dejas de trabajar ni en casa?- Preguntó tomando una silla para sentarse.

-Mañana es la reunión, tengo que prepararla- Respondí poniendo los otros papeles sobre la mesa.

-Deja tus cosas ahí y ven, voy a ayudarte con lo de mañana- Dijo mientras meticulosamente analizaba mis movimientos.

Quería decirle que no, pero me era imposible, una parte de mi quería que se quedará. Me senté a su lado y preparamos juntas la reunión. Revisó mi trabajo y me dijo que estaba perfecto. Casi se nos fue la mitad de la tarde y la noche, cuando vi el reloj, eran más de las 12:00 AM, no tardé en decírselo, no quería que le pasara nada de camino a su casa:

-Lisa... es un poco tarde ya, son más de las 12:00 AM- Dije tomando su mano para que me hiciera caso. No estábamos en la empresa, no pasaba nada porque lo hiciera.

-Es demasiado tarde para irme a casa, creo que voy a pedir un Uber y mañana recojo mi carro- Dijo tomando su teléfono para llamar al Uber.

-Puedes quedarte aquí, ya es tarde... quien sabe lo que te pueda pasar por ahí tú sola- Dije intentando que no pensara mal de mi, solo quería que se quedará -Puedes dormir en mi cama, yo dormiré en el sofá.

-Vale, me parece bien. Creo que es hora de ir a descansar, mañana nos espera un día agotador- Dijo levantándose de la silla.

La llevé al cuarto, le di un pulóver mío para que lo usará como pijama, me llevé una manta y una almohada al sofá. Me acosté a dormir cuando ya me había asegurado que Lisa estaba en cama y descansando cómodamente. Dormí bien esa noche, creo que el saber que tenía a Lisa cerca, había producido ese efecto en mí. Poco a poco estaba desarrollando más que un sentimiento de administración hacia ella, sabía que no podía, pero era inevitable que pasará. Me levanté lo más temprano posible para hacerle el desayuno, pero cuando me dirigí a la cocina para prepáralo, había una nota que decía:

"Gracias por permitir que pasará la noche aquí, en un rato nos vemos en la oficina, tenemos una reunión importante a primera hora."




Nota: No se muevan que son dos por las demoras🙂
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Solamente Tuya Jenlisa (G!P)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora