Capítulo doce: Una Decisión

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Me levante de la cama, ya que en cualquier momento sonaba mi alarma, así, que me pare, y prendí la luz, y en ese preciso momento suena mi alarma, camine hasta la mesita de noche y tome mi teléfono, y quite la alarma, lo cual camino hasta el baño, ...

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Me levante de la cama, ya que en cualquier momento sonaba mi alarma, así, que me pare, y prendí la luz, y en ese preciso momento suena mi alarma, camine hasta la mesita de noche y tome mi teléfono, y quite la alarma, lo cual camino hasta el baño, entro en este y me doy una refrescante ducha, lamentablemente solo fue de diez minutos si fuera por mi fuera de más, pero no, salí de hay y me fui hasta el armario, para escoger que ponerme, a lo cual abrí la puerta de este para tomar una camisa de manga larga, blanca con las mangas negras, un poco ajustada y corta la cual me llega un poco mas abajo del ombligo, luego tome un pans negros un poco holgados, termine de tomar esa ropa, a lo cual la dejo en la cama, y camino hasta el otro lado para tomar mi ropa interior, y mis calcetas blancas a lo cual tome también mis tenis, a lo cual eran unos Adidas, blancos con negro, termine de escoger la ropa, camino hasta la cama, a lo cual me pongo toda mi ropa, me estaba amarrando mis tenis cuando me llaga un mensaje de Lucas diciendo buenos días, y luego un audio de Christopher igual, yo sole mande una carita sonriente, me pare de la cama, me fui a peinar a lo cual me acomode el pelo y después me puse un poco de rímel, y de brillo labial, me puse crema corporal y de la cara, para luego ponerme perfume, salí del baño y tome mi mochila y teléfono y baje.

estaba picando mi manzana cuando escucho que tocan el timbré, a lo cual guardé mi manzana en la mochila, a lo cual camino hasta la puerta y abro, a lo cual me doy cuanta que son los hermanos Laferte, ellos pasan yo solo tomo mi mochila y salimos de la casa, caminamos hasta la preparatoria, a lo cual fue una caminata fue algo muy divertido, ya que los chicos iban platicando de muchas cosas, una de ellas, era contar chistes muy malos, pero de lo malos que son dan risa, cuando llegamos, caminamos hasta nuestros casillero, a lo cual puede notar que los cambiaron a un color blancos con los números negros, yo abrí mi casillero y saque mis cuadernos tome de barias materias, para luego caminar hasta mi salón, camino por los pasillo y saludo a los chicos a lo cual ellos me regresan el saludo o ellos a mí, cuando llego a mi salón, me voy hasta mi lugar, a lo cual me siento en este y saco mi cuaderno de dibujo y de mis lápices, para luego empezar un nuevo dibujo a lo cual era como yo veía a Cristopher, atreves de mis ojos, a lo cual el esta de perfil, conduciendo con una manos y la otra en su frente, y con una cara seria, estaba tan metida en mi dibujo que cuando siento que alguien me agarra de uno de mis hombros me asusto, así que cuando veo a esa persona era Lucas, a lo cual cierro mi cuaderno

-Que haces, Carolina -hablo Lucas, una vez que ya estaba sentado, a lo cual yo pongo a un lado el cuaderno

-Que haces, Carolina - hablo una vez que estaba sentado a un lado mío

-nada -conteste, poniendo mi cuaderno de mi lado izquierdo

-ok, oyes tu y Christopher que, e visto que esta muy raro -pregunto Lucas, a lo cual yo solo frunzo el seño, por la pregunta que hizo, eso me confunde mucho

-no se, de que hablas, entre el y yo nada, bueno eso creo -, dije a lo cual el solo sonríe, a lo cual la sonrisa que pone no me gusta nada

-tranquila, te puedo decir una cosa -poniendo ambos codos en la mesa y poniéndose mas cerca de mi

El rojizo peligrosoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora