El Amor En Forma De Arte

Capítulo 15

¿Qué era mejor, la verdad o la mentira?

Franck:
Mientras observaba por la ventana como pasaban las luces de los autos, a mi mente llegaban recuerdos bonitos que de alguna manera se volvían dolorosos, mentir ya no era la solución, tenía que contarle la verdad a Pamela, no porque quisiera que las cosas cambiarán y me eligiera a mi, o talvez esa era la razón por la que contenerme ya no era la opción.

Mire por toda la cafetería esperando encontrar algo que me ayudara a decidir si debía o no ser sincero, y justo lo encontré en esos ojos cafés chocolate con los que conecte en la entrada.

Nuestras miradas se quedaron conectadas por un largo tiempo, no era capaz de separarme de ellos. Todo a mi alrededor se había borrado de un momento a otro cuando al bajar mi vista a sus labios estos dibujaban tristeza.

- ¡¡Franck!! - el llamado me centro de nuevo en el presente, Luke estaba hablando de algo pero no había prestado atención a la conversación.

- ¡Luke! - Escuche una voz dulce y chillona que gritaba en nuestra dirección, solo había una persona a la que le pertenecía.

Darcy, Dylan y Pamela se dirigían a nuestra mesa, la primera estaba furiosa, pero los otros dos solo estaban confundidos, se acercaron en completo silencio, hasta que mi hermana me miró y comenzó un discurso del porque tenía que avisarle a dónde iba.

De verdad que intentaba centrarme en mi hermana, pero solo podía bajar la mirada y pensar en Miles de cosas, ninguna de ellas tenía que ver con Darcy por desgracia.

- Quiero que me digas la verdad Francisco - Pamela se sentó al lado de Luke, me miró decidida a obtener su respuesta.

- ¿Qué le dijiste, Darcy? - mire a mi hermana con furia, a ella no le correspondía decirle nada.

- No la metas en esto, ella es la única persona que se atrevió a decirme la verdad, no la regañes - puso su mano en la mesa, me miró y guardo silenció esperando una respuesta.

Me dolía que su mirada hacía mi ya no era cálida, dulce, graciosa o pervertida, en su lugar había enojo, decepción, tristeza profunda.

- Pamela... - hice una pausa pequeña para formular bien mis siguientes palabras. - ¿De verdad estás lista para escucharlo? -

- Estoy segura, no quiero más mentiras Francisco, se sincero de verdad - por supuesto que sería sincero, ya no aguantaba más este secreto.

- Bien, todo comenzó hace tres años, recuerdo que habíamos quedado de vernos en esta misma cafetería aquel día....

Hace tres años:
Estaba corriendo a toda velocidad, era tarde lo sabía, pero me había desvelado terminando una nueva canción y estaba tan cansado que me quedé dormido. Corrí empujando a todas las personas que me bloqueaban el paso, estaba sudando y agitado, pero si no llegaba en cinco minutos tendría que considerarme hombre muerto.

Llegué a la puerta de la cafetería y entre bastante cansado, busque entre todas las personas y la encontré sentada en la ventana metida en sus pensamientos. Me acerque con cautela y la asuste.

- ¡Pam! - ella se sobresalto y se agarró el pecho, tratando de calmarse.

- Casi me matas, ya te dije que no hagas eso tarado -

- Es inevitable, eres muy fácil de asustar -

Me senté enfrente de ella para descansar un poco, pasados unos minutos había recuperado el aliento, pero me detuve cuando note que algo le pasaba.