Lee Minho es un jefe exigente conocido como "demonio sexy" el único que lo tolera es su asistente Hwang Hyunjin pero lo que el joven no sabe es que Minho lo ha deseado desde el momento en que lo vio, todos esos años estuvo paciente y guardo su dista...
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Bang Chan llevo a Hyunjin a un lujoso restaurante donde comieron cosas que Hyunjin solo habia visto por televisión de ahí partieron a un hermoso centro de patinaje para parejas, Hyunjin no sabia patinar aun asi era una experiencia divertida para ambos, entre risas y caricias delicadas Hyunjin fue bajando la guardia con el.
-¿que tal? ¿te ha gustado patinar?- dijo ya colocándose los zapatos nuevamente.
-jaja no tanto en realidad nunca lo había hecho.
-siempre hay una primera vez..- Chan le ayudo a colocar los suyos como un príncipe colocando la zapatilla a su princesa.
-si, gracias por este día..ha sido muy lindo.
-no, no, gracias a ti por este día, Hyunjin hay un último sitio a donde quiero llevarte ¿me permites?
La galantería y caballerosidad era una personalidad que Chan tenía muy marcada, con eso mismo terminaron en lo más alto de la ciudad podían ver todo desde ese lugar digno de una postal.
-es hermoso- solto en un suspiro el menor.
-lo se, yo vengo aquí cuando quiero estar solo, cuando ya no soporto la presión del trabajo, también cuando quiero llorar...- se sincero.
-pero..perdon que lo diga pero.. ¿tu lloras?
-jaja ni que fuera de piedra Hyunjin, claro que lloro, aveces lo hago cuando no puedo conseguir mis propósitos o cuando fallo en algo, tambien cuando...cuando me enamoro
-wow, que profundo.
-quisiera no ser tan profundo aveces pero amar es de humanos, por eso debes saberlo estoy enamorado de ti, no es solo tu físico realmente siento algo por ti
-Chan...
-solo déjame intentar una cosa porfavor.
Bang Chan se acerco lentamente al rostro del alto y roso sus labios apenas en un timido toque como pidiendo permiso para besarlo a lo que Hyunjin terminó cediendo su beso era cálido, suave, romántico ambos profundizaron más y más hasta llegar a perderse en la boca del otro por un instante Hyunjin creyó encontrar una salida, una salida a ese amor que lo estaba consumiendo.
-Hyunjin déjame quitarte sus besos de tu piel, déjame intentarlo.
Las manos de Chan eran expertas en tocar los cuerpos ajenos, las venas se le saltaban y Hyunjin cedía lentamente ante el deseo que le provocaban sus besos, una parte del el quería intentarlo pero cada roce cada estímulo solo le traía de nuevo una cosa en la cabeza "Minho".
-lo siento Chan yo..
-no, perdón es que me deje llevar tu piel es tan suave, porfavor no me mal interpretes no creas que soy una bestia hambrienta solo que tu despiertas en mi algo...intenso pero entiendo debo parar aquí.
-gracias Chan, ¿puedes llevarme a casa?- Hyunjin solo dio un beso delicado en su mejilla, aquella tierna acción derritió el corazón de Chan que apesar de su malicia ante el era débil.
