Me desperte, estaba en mi habitación, aún con la ropa del dia anterior y sin zapatos, ¿Pero cómo llegue aquí?, lo último que recuerdo es estar mirando a Bryan míentras escuchabamos música en su habitación. Quizá él me trajo cuando me quede dormida.
Me reincorpore en la cama, la luz que se filtraba por las cortinas blancas iluminaba toda el areá, era encandílante, decidido: Hoy mismo cambio esas cortinas blancas por unas negras.
Necesitaba ir urgente al baño, o mi vejiga explotaría. Me pare de la cama, y entre al baño que se encontraba dentro de mi habitación. Despúes de hacer mis necesidades primarias, labe mis dientes; mi cabello era un desastre, así que lo sujete en una coleta mal hecha y alborotada. Daba igual.
Salí de mi habitación tirando un bostezo y estirando cada musculo de mi cuerpo, iría a despertar a Alan, ya tenía hambre y quería desayunar. Entre a su cuarto sin tocar la puerta, su cama estaba tendida y él no estaba, tal vez está abajo, llegue a la parte baja, pero tampoco estaba, ¿Dónde se metío?, lo busque por toda la casa ㅡliteralㅡ , pero él no estaba. Ninguno de los chicos estaba.
Me dí por vencida. Hiba hacia arriba, ¡Pero Claro!, no busque en la habitación de Bryan. Al pasar por fuera de esta, toque, pero no obtuve respuesta algúna, entre, pero no había nadie, sólo la cama desordenada de Bryan. Me dí medía vuelta dispuesta a regresar de donde vine: mi habitación, pero entonces una puerta tras de mi crujio en señal de que se abria, me sobresalte y gire, era Bryan, salía del baño mientras se rascaba la nuca, ㅡél al igual que yoㅡ, aún traía la ropa del dia anteríor.
- ¿Qué haces aquí?- Pregunto con voz ronca, señal de que se acavaba de lebantar, se veía lindo como siempre.
- Vengo a robar tus calzónes.- Dije con sarcasmo, él sonrío ante mi respuesta y nego con la cabeza divertido. Su bella sonrisa, podria acostumbrarme a ella. Obvio, para ver a mi amigo sonreir- Vengo porque no hay nadie en casa y yo tengo hambre.- expliqué.
- En la alacena hay comida- Fruncio el seño-, puedes prepararte algo.- finalizo con una encojida de hombros.
- No, Bryan- negue con la cabeza-, Yo soy invitada de meses en esta casa, y yo no cocino- expliqué divertida-, a parte, tú eres un caballero y mi mejor amigo, tú me haras el desayuno.- Tome su mano y lo lleve afuera de la habitación. Yo no haria el desayuna por nada.
- No, espera- Dijo él antes de bajar las escaleras-, Y, ¿Por qué mejor no encargamos pizza y vemos una pelicula? - Sonrío ante su "genial" idea. ¿Él acaso creé que la pizza es desayuno?
- ¿Pizza para desayunar?- Frunci el seño, él asintio con la cabeza-, la pizza no es desayuno, Bryan.- Reí, él hizo una mueca. Este chico cada dia era más lindo y tierno. Cualquier chica se enamoraria de él.
- Pues hoy, tú y yo- Entrelazo su mano con la mía, un remolíno creció en mi estomago, esta vez, me dio un poco de pena su acto, fue lindo-, vamos a desayunar pizza y veremos una pelicula, los demas chicos se lo pierden.- dicho esto, bajamos las escaleras.
Bryan llamo a la pizzeria, pidio una pizza tamaño familiar, sí comemos mucho. Desidimos esperar en la sala, estaba por prender la tv, pero Bryan llamo mi atención.
- ______- Dijo sin mirarme-, Te buscan.- Finalizo. No habían llamado a la puerta, ni al telefono, además, aquí no conosco a nadie más que a Alex. Supongo que era una broma, así que segui su juego.
-¿Ah, sí?- pregunte haciendome la injenua- ¿Quién? - le mire frunciendo el seño.
- ¡El señor cosquillas!-Dijo con voz juguetona mientras abria las manos como arañas con patas estiradas; se acerco amí con rapides comenzo a juguetear sus dedos en mis costillas haciendome cosquillas. Tire mi cuerpo para atras para que me dejara, pero fue imposible alejarlo; estiro sus brazos y siguio, yo estallaba en risa, de verdad me hacia cosquillas.
Los musculos de mi vientre comenzaban a contraerse, el aire me faltaba, juraria que mi rostro estaba rojo por la presión - ¡Para, Ya! - ordene en un grito con poco aliento por las carcajadas que Bryan me provocaba por sus cosquillas pero él hizo caso omíso. Quize empujarlo por los hombros, pero él, más rapido que yo, tomó ambas de mis muñecas con una de sus grandes manos y las paso por encima de mi cabeza, este chico sí que tenía fuerza; recosto un poco su cuerpo sobre mis piernas para impedir que pataleé y seguir haciendo cosquillas.
De pronto, como un flash, me veo ami, tirada en el callejon, con un hombre de almenos 23 años de edad y de ojos grices sobre mí, yo forcejeó para quedar libre de su agarre, pero es imposible. Él, me sostiene fuerte y firme. Pasá su repugnante mano libre por mi pecho plano, le sigue al vientre y termina en mi sona y la acaricia, yo grito, pero nadie me olle, entoces él da una risotada.
Las cosquillas junto a la risa se van. El miedo invade mi cuerpo sin evitarlo. Grito, esta vez, con amargura. Forcejeo, pero no puedo escapar de su agarre. -¡Sueltame! - Grito esta vez aterrada, pero Bryan parece no notarlo. Siento su mano en mis costillas y me quema, me duele, pero el dolor es interno, no externo. Mi garganta arde y lagrimas queman en lo más alto de esta, mis ojos estan aguosos en segundos y pican por éllo- ¡Dejame! - Grito de nuevo- ¡Bryan, me lastimas! - Grito tan fuerte como puedo que siento como si mi garganta se desgarrara, entonces él para y se aparta de mi con ambas manos a los costados de su cabeza como si le estubiera apuntando con un arma; se pone de pie aun con las manos en alto y me mira con ojos grandes, yo me levanto del sofa, doy media vuelta al lado contrario donde se encuentra Bryan para huír, quiero huír, pero tropiezo con mi propio pie y caigo en seco al suelo, sin darme tiempo de meter las manos, al caer me golpeo fuerte el pomulo de la izquierda y el abdomen, pero lo ignoro porque quiero irme lo más pronto posible.
- ¡______!- Escucho la voz preocupada de Bryan al verme caer, pero no volteo ni respondo. Me pongo a gatas dispuesta a seguir, entonces unas manos en mi cintura me rodean. Sabía que sólo estabamos Bryan y yo en toda la casa, pero me dejo llevar por el miedo y temo que sea él quién me sujeta por la cintura, no quiero voltear y verle, porque me asusta saber que es él. Me asusta ver su rostro otra vez.
-¡No me toques! - Grito cerrando fuerte los ojos, con una mano rasguño el dorso de la mano que esta en mi parte izquierda de mi cintura, de pronto me sueltan. Gateo hasta llegar a la pared, me pongo de pie con temor a caer en cualquier momento. Mis piernas tiemblan tanto como todo mi cuerpo, mis mejillas picán y me doy cuenta que es por las lagrimas que estoy soltando, mi estomago duele y mi corazón late más fuerte de lo normal.
Giro a medias y lo veo. Veo a Bryan a pocos metros de mí. Me míra, ésta asustado y a la vez confundido por mi comportamiento, su seño esta entrefruncido pero no es por enojo. Miro la mano que esta sobando con cuidado el dorso de la otra, abro los ojos en grande, esta rasguñado por mí y sangra un poco en cada tira larga que traze con mis uñas. Ahora me da vergüenza. Vergüenza de averme dejado cegar de nuevo por el miedo, vergüenza de aver actuado de esa forma, vergüenza por averlo lastimado fisicamente, y vergüenza, porque no se como explicarselo.
Limpio con brusquedad mis lagrimas, quiero disculparme, decirle que fue un error y que no volvera a pasar, decirle que no me lastimo como yo se lo grite- Yo... - no sé que dicir, no me salen más palabras- Lo siento.- Digo casí en un susurro.
Me abrazo a mí misma, no sé a dónde ir, pero voy a la cocina bajo la mirada de Bryan. Al entrar solo me siento en un rincón, pego mis piernas flexionadas sobre mi pecho y las abrazo. Comienzo a llorar aún más en silencio, aúnque algún sollozo se me ha escapado - _____- escucho a un Bryan preocupado llamarme. No le miro.
- Sólo... sólo quiero a Alan.- Digo en un sollozo haogado. Bryan asiente con la cabeza y sale de la cocina.
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Recomendación: regresar al capitulo 9, ya que lo edite y tuvo un pequeño cambio :):LH♥
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Ella 16 y Él 21
Teen FictionY tú ... ¿Qué arias por estar con alguien cinco años mayor que tú , porque lo amas? Bryan - 21 ______ - 16