MI PEQUEÑO RAYITO DE SOL ☀ OMEGAVERSE (KAGEYAMA X HINATA)

[CAP2. ENCUENTRO CASUAL]

Muchas gracias por seguir aquí! Continuemos con la historia...! ❤

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Ya era la segunda hora. Kageyama, quien se había quedado afuera mientras fumaba un cigarrillo, observaba cómo unos pájaros construían un nido en un árbol del jardín universitario.

En ese momento, alguien golpeó su nuca, haciendo que dejara caer el cigarrillo que tenía en la boca.

Kageyama: ¡Ah! ¿Qué te sucede? —Dijo al voltear y encontrarse con un Sugawara enfadado— Ah, Sugawara.

Sugawara: ¡Kageyama! ¿Por qué no asististe a clases? Y además, ¿qué te dije sobre fumar? —Preguntó enojado, con los brazos cruzados—

Kageyama: Pero esto me calma... -respondió indiferente-

Sugawara: No importa, Kageyama, ya hemos discutido eso. No puedes buscar consuelo en un cigarrillo. Caerás en un vicio... Y no quiero verte así de nuevo. —Dijo preocupado mientras se acercaba—

Kageyama: Tranquilo, Suga, no me volveré adicto. Lo prometo. —Aseguró con una sonrisa—

Sugawara: -Suspiró- ¿Me dirás por qué no llegaste a clases? -preguntó preocupado-

Kageyama: Oh, me encontré con un chico nuevo que estaba perdido. Se llama... Hinata, Hinata Shoyo. —Respondió-

Sugawara: ¿Ah, sí? -quedó pensativo- ¡Oh, cierto! El director mencionó que llegaría un estudiante nuevo hoy. Se me olvidó por completo. ¿Estaba perdido?

Kageyama: Sí, es un omega y no encontraba su aula. Me pidió ayuda para ubicarla.

Sugawara: Está bien. —Sonrió— Vamos a clase, ya es hora de entrar. —Tomó el brazo de Kageyama y lo llevó consigo—

Más tarde, llegó la hora del descanso o recreo, como prefieran llamarlo. Kageyama ya había guardado sus cosas y luego salió junto a sus amigos Sugawara y Daichi.

Los tres se dirigieron a una zona tranquila de la universidad, un patio con bancos donde podían sentarse y disfrutar del ambiente, un lugar apartado de la multitud.

Sugawara y Daichi se sentaron mientras que Kageyama, el de cabello oscuro, se dirigió a una de las máquinas expendedoras. Optó por comprar un batido de proteínas y un sándwich de jamón y queso.

Kageyama: ¿Alguien quiere algo, chicos? —Preguntó en voz alta—

Sugawara: No te preocupes, estamos bien, Kageyama. —Respondió con una sonrisa y continuó conversando con Daichi—

Kageyama: Está bien... —murmuró mientras seguía con su compra—

En ese momento, divisó a un chico pelirrojo que parecía estar un poco perdido. Era evidente que era el mismo omega que había conocido antes. Se apresuró a completar su compra, pero se encontró con un atasco en la máquina.

Kageyama: ¡Maldición! ¡Vamos, sal! —Exclamó frustrado, golpeando la máquina— ¡Vamos!

A pesar de sus esfuerzos, no pudo resolverlo. Estaba a punto de rendirse cuando escuchó un golpe en la parte trasera de la máquina. Observó y vio al causante del golpe: el omega, quien logró liberar el sándwich atascado de un solo golpe.