20. Enamorada del Diablo

151 16 0
                                    


Mauro

Otro día mas, drogado, sin ganas de nada, en la cama con otra puta.
Neo me había dicho que salga a tomar aire, a caminar, mas no quise.
Según el Octavia esta bien, y eso me importa me gusta que este bien, por mas que no este con ella yo la sigo amando.

Mi departamento era un silencio, donde solo ella podía callar con sus carcajadas o sus gritos por ver sus famosos k-dramas esos chinos.
La piba a mi lado, morocha de ojos verdes se levantó y se fue, tampoco quería que se quedará así que bien.

Luego de unos minutos, el timbre sonó, mas no fui a atender, siguió sonando hasta que simplemente se escuchó la puerta abrir y ahí me senté en la cama, alerta de que alguien entró.

Unas pisadas se escuchaban resonar por la casa, subiendo hasta la habitación principal, Yo estaba en la de invitados, no podía llevar putas en la cama donde dormía con mi mujer, Tampoco puedo dormir ahí sin ella así que estoy acá.
Las pisadas se acercaron a donde estaba yo y la puerta se abrió lentamente, dejando ver a una Octavia algo cambiada, pero aún hermosa.

-Gorda?- Pregunte con la voz temblorosa.

-Hola...- Su voz frágil sonó, nostálgica, Como si tuviera un nudo en la garganta.

Seguía en shock mientras observaba como ella se acercaba a la cama, sentandose a mi lado, Yo petrificado toqué su mano, verificando que no estaba soñando, Cuando me di cuenta que no era así, La abrace como si la fuera a perder.

Y es que la perdí, Pero trato de hacerla volver.

Me decepciono ver como no correspondía mi abrazo, solo se manduvo estatica y empezó a sollozar lentamente.

-No,no, no, No llores gorda- Levante la cara y seque sus lágrimas.

-Porque? Porque mierda cagaste esto Mauro?- Sollozó con las manos en la cara.

Ahora yo tengo el nudo en la garganta, No sabía que decir, Entendía la pregunta, mas ni yo sabía el porque.

-No se... Ni yo se, pero se que quiero que me perdones, Soy una basura y no te merezco pero soy egoísta y te quiero para mi, Solamente para mi.

-Quería ver como estabas, los pibes me dijieron que no estabas muy bien, Y puedo ver que tenían razón- Dijo después de unos segundos, Miro con despreció la bolsa de droga que estaba en la mesa de luz.

-Estoy así desde que te fuiste- Solté sin mas- Te mudaste y dejaste tu carrera, que haces ahora?.

-Una agencia de modelaje me citó en capital y tuve que ir, ahora estoy trabajando para ellos y me va muy bien- Su voz suave y tranquila mientras observaba todo.

Y por fín su mirada paró en mi.

-Te extrañe- Dijo en un susurro casi inaudible.

-Porque no viniste antes?- Pregunté.

-Porque no arreglaste esto antes?.

Tenía razón, yo la busque pero me negué, pensé que no iba a volver y me harté.

-Perdoname gorda, encerio perdón- Susurré entre sollozos.

-Me haces tan mal pero sos una droga que amó- Sencillo y me abrazó quedando mi cabeza en su pecho.

Unos minutos de silencio se sintieron horas, solo nosotros dos, sin distracciones, Pensé que había perdido al amor de mi vida y me dí cuenta que todos tenemos nuestros antibajos, nosotros no somos la exepción.

Levante poco a poco la cabeza quedando a la misma altura, mire sus labios grandes y un poco rojizos y sus ojos grises me estaban mirando, No aguante y bese sus labios con desesperación, como si fuera nuestra última vez, la última noche.
Un beso desenfrenado, lleve mis manos a sus caderas, y la levante para que se siente a ahorcadas encima de mí, sus manos fueron a parar a mi cuello para seguir el beso.

No era nuestra primera vez, pero si después de tanto tiempo, Se sintió como la primera y ahí me di cuenta de algo, No importa nada ni nadie, ella siempre va estar por delante de todos.

Horas después

Me levanté aturdido y solo en la cama, temí porque ella se haya ido pero escuche ruidos en la  cocina así que me levanté y fui.
Estaba lavando unos platos en el fregadero, con mi remera y en tanga, moviendo las caderas al ritmo de Downtown de J Balvin y Anita.

La mire ladeando la cabeza junto a una sonrisa y la abrace por detras acomodando mi cabeza en su cuello riendo.

-Que andas haciendo vos?.- Susurré en su cuello.

-Limpiando el desastre que tenés acá, hace algo productivo y tira toda esa droga que tenés ahí.- Dijo concentrada en lo que hacía más aún se dió la vuelta y me beso la punta de la nariz con una sonrisa divina.

-Porque no me besas la punta de la chota?.- Carcajee varias veces ante mi chiste y me queje tras recibir un golpe con un trapo húmedo provocando que duela más- Ay me re dolió boba.- Me sobe la parte afectada sonriendo escuchando su risa

La había extrañado muchísimo.

-Deja de pavear y hace lo que te digo.

-Si jefa.

Corrí contento a la pieza a cumplir la orden, puse todo dentro de una bolsa y analise las últimas pastillas que quedaban en la mesa de luz.

Prometo ponerme las pilas, ya sufrí mucho sin ella, si la pierdo denuevo me muero.

Metí lo que quedaba en la bolsa, corrí nuevamente a la cocina y tire todo en el tacho de la basura.

-Mision cumplida jefa.- Hice un saludo de militar.

-Bueno me parece genial amor.

Mi corazón se estremeció al escucharla decir ese apodo denuevo, escalofríos me recorrieron y una sensación de estar lleno como antes se sintió.

-Gorda...- La llamé.

-Mhm?.

-Ya esta todo bien amor? Yo te juro que nunca mas porque te amo a vos y sos la mujer de mi vida, perdóname porque soy un pelotudo que se las manda pero este pelotudo te ama solo a vos gordita- Mire suplicante su rostro neutro ante mi pregunta.- Querés volvera ser la señora Lombardo?.

-Enamorada del diablo no?.

Me miro con una mini sonrisa y me beso como antes, un beso fogoso y con amor me demostró que volvió.

Pero si sigo así no por mucho tiempo, por eso voy a cambiar para ser todo lo que ella necesita.




















Desaparecí por un largo tiempo no? Lo siento, Tiene  cap largo de recompensa.
El jefe ya saco Ameri y tiene un nuevo cap, disfruten.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Nov 02 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Aᴍᴇʀɪ - ᵈᵘᵏⁱ ˣ ᵛᵒˢDonde viven las historias. Descúbrelo ahora