Día Dos

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Su mirada no se podía apartar de la escena tan bella que presencia, Jay se encuentra hablando con su madre, pero eso no era lo que le tenía anonado, era la preciosa sonrisa que su compañero poseía, un leve hoyuelo se asomaba, sus perfectos dientes relucen y más con la luz del sol. Habían quedado en desayunar fuera del departamento, por ende se encuentran en una cafetería cercana a su empresa, los habían comunicado por su mánager, pero en cuanto terminaron su junta, ambos decidieron quedarse a tomar el desayuno.

-¡Hyung!

Ante el llamado, parpadeó varias veces, soltando una risa nerviosa, le miró a los ojos.

-¿Aún tiene sueño?, le estuve hablando por un buen ratito y no reaccionaba

Sus mejillas ardieron, se había quedado viéndole tontamente, mentalmente se golpeó la frente, negó con la cabeza.

-Perdón, sí, aún tengo un poco de sueño, ¿me estabas tratando de decir algo?

Se disculpo apenado, Jay solo rió y negó con la cabeza.

-En realidad le había preguntado si ya quería regresar al departamento, la verdad es que me apetece dormir un poco más

Su mirada le ponía los pelos de punta, con la palma de su mano acarició la suave piel de su brazo, asintiendo en el proceso ante las palabras de Jay.

-Vamos, ¿quiere que pida un Uber o caminamos?

La verdad es que le apetecía caminar, así podría despejar su mente, asintió.

-Mejor caminemos

Trato de sonar tranquilo, Jay asintió ante sus palabras y se levantó de su lugar, para luego hacerlo él, ambos se dispusieron a caminar con destino a su departamento.

-Heeseung Hyung

Jay le llamo, su mirada la dirigió a la de él, sin embargo se puso nervioso ante su atenta mirada.

-Dime, Jay

Jay sonrió y sin esperarse la acción de este, se le acercó demasiado al rostro, haciéndole retroceder un poco, aunque esto no hizo inmutar a Jay.

-¿Le gustaría pizza para almorzar después?

Sus ojos se conectaron, sintió su corazón golpeando su pecho, nervioso desvío la mirada y durante el proceso asintió ante su petición.

-Claro, pizza para almorzar suena bien

Dijo sin más, sintiendo la lejanía de Jay después de un rato.

-Pizza será, yo invitaré

Ambos hombros chocaron, y una sorprendente corriente eléctrica le recorrió la columna, haciéndole sonrojar demasiado.

-Oh, hyung, ¿se siente bien?, está completamente rojo y tiembla un poco

Asustado ante las palabras de Jay, de inmediato llevo su mirada a la de él, quedando muy cerca de su rostro, una vez más sus miradas conectaron.

-¿Acaso es un resfriado lo que se asoma?

Mencionó Jay, sin embargo no le tomo importancia, su aliento lo había hipnotizado, el tenue aroma de frutos rojos se colo por sus fosas nasales, haciéndole latir más rápido su corazón, su respiración era cálida y relajada.

-Lo dudo, tenemos que llegar al departamento, tengo que trabajar

Alejo su cuerpo de él, y sus pies empezaron a caminar más de prisa, escuchando los pasos apresurados de Jay detrás de él.

-¡Es cierto!, pero no olvide tomar algo cuando lleguemos, así no continuará el posible resfriado

Asintió ante sus palabras con rapidez y no se detuvo ante lo apresurado que oía los pasos de Jay.

¿Qué había sido eso?



















A Solas |JaySeung|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora