Te llevaré al hospital
"Ala grande, te lo advierto... no te vas a burlar de mí", Álvaro se quitó el
abrigo y lo puso en el sofá, solo llevaba una camisa ajustada. Ángela pudo
notar su cuerpo fuerte y musculoso en la penumbra, los músculos de Álvaro
parecían esculpidos. Ella tragó saliva, parecía que Álvaro tenía un cuerpo
perfecto. Le gustó lo que veía...
"¿burlarme yo de ti?", miró a Ángela, que tenía un evidente rubor en sus
mejillas. Él caminó un paso hacia ella, ella retrocedió.
Mientras su juego de persecución continuaba, a ella no le quedó más remedio
que sentarse en la cama. Entonces, Álvaro se apretó contra ella con las
palmas en la cama y cerró la distancia entre ellos.
Iba a besarla. Esto la puso tan nerviosa que tuvo que inclinar su cuerpo; sin
embargo, cuando miró a los ojos a Álvaro, no pudo decir una palabra. Tenía
ojos oscuros pero bonitos, ¡era demasiado guapo!
Entonces, Ángela se acostó en la cama...
Álvaro sintió los latidos de su corazón y supo que estaba nerviosa, sonrió
astutamente y se acercó a ella. La sostuvo con el brazo izquierdo y se aflojó
la corbata con la otra mano.
La habitación estaba llena de ambigüedad y el ambiente era intenso debido a
lo que Álvaro acababa de hacer.
Ella dejó atrás su confusión. Dios mío, ¿Álvaro la estaba seduciendo?
Justo en este momento, él aventó su corbata hacia otro lado y se desabotonó
la camisa, la forma en que se movía su cuerpo era tan seductora que Ángela
casi no podía controlarse. Quería abrazarlo y besarlo.
"Grande... grande... doctor Gu... Álvaro, ¿qué quieres hacer?", finalmente,
Ángela decidió llamarlo por su nombre en lugar de ala grande"¿Qué quiero hacer? quiero que experimentes la sensación de vivir conmigo",
dibujo en sus labios una sonrisa juguetona.
"¿La sensación de vivir contigo, a qué te refieres?", ella no entendía a lo que
se refería. Pero él era demasiado atractivo y no podía resistirse a sus
encantos. Ella no podía pensar con claridad y entender a qué se refería
cuando estaba con él, "Sólo estamos tú y yo en esta habitación, todo podría
suceder... ¿Te gusta lo que sientes?", él movió ligeramente su flequillo a sus
orejas, era muy amable con ella.
Ammm... ¡Ángela finalmente entendió lo que Álvaro quería decir, lo sabía!
Él estaba molesto por lo que ella le había dicho a Rafael y él no la dejaría
zafarse tan fácilmente, ¡quería castigarla, por eso la había llevado a su
departamento!
"Álvaro...", él puso un dedo en su boca y le dijo:"silencio". Su seductora voz
hizo que guardara silencio.
Sus ojos parpadearon y sus largas pestañas parecían aletear, ella se veía
realmente encantadora.
Álvaro no pudo evitar presionar sus labios contra los de Ángela, ella estaba
fuera de sí, no podía controlar sus pensamientos y emociones cuando él la
besaba. Su perfume hacía que tuviera ganas de besarlo aún más...
el cuarto estaba tranquilo pero el ambiente era demasiado intenso. El beso
había sido tan sensual que ella dejó escapar un suave gemido.
Al escucharlo, Álvaro regresó a la realidad.
Dejó de besarla y apretó sus manos. Luego, cerró los ojos mientras jadeaba
por aire, ella también volvió a la realidad y contuvieron el extraño
sentimiento en su corazón. Él parecía incómodo. Ángela lo miró preocupada,
"¿qué pasa, estás bien?", ella le acarició sus tonificados brazos. Planeaba
darle una sacudida para asegurarse de que estaba bien. Sin embargo, no se
atrevió a hacerlo porque él parecía muy incómodo.Sus suaves caricias lo hicieron perder el control, no pudo evitar besar
nuevamente sus labios.
'¿Qué?, Álvaro es muy raro, ¿qué le pasa, porqué me besa otra vez?' Ángela
pensó para sí misma, quiso alejarlo pero no pudo. El beso se había puesto
más intenso y apasionado, "¡Para!... me siento un poco incómodo", ese beso
había sido ardiente y profundo. ¡Ella estaba sin aliento!
Álvaro continuó ignorándola. Sus ojos se habían llenado de pasión cuando
inhaló su dulce aroma y besó su delicada mejilla que bajaba a su cuello...
¡No, no era posible, Álvaro se comportaba de forma extraña, quizás está
enfermo!
Cuando ella lo pensó, lo empujó con todas sus fuerzas, "¡Ala grande, déjame
ir, te llevaré al hospital!", la pasón de Álvaro fue repentinamente sometida
por Ángela, ella pensó que estaba enfermo y quería llevarlo al hospital; que
chica tan ingenua...
Se apartó y se acostó a su lado, luego le habló con su voz profunda y áspera:
"¡Vete a la cocina y prepárame algo!".
'¿Qué?, ¿qué quiso decir él?', se preguntó ella. "¿Qué?", Ángela miró con
curiosidad al hombre que de repente se había transformado ante sus ojos.
Para ocultar lo que sentía, se cubrió la cara con la mano derecha y luego
repitió lo que había dicho: "¡Vete a la cocina y prepárame algo!"
... Estaba a punto de rebelarse. Sin embargo, parecía que Álvaro estaba muy
cómodo, así que ella le obedeció y fue a la cocina, la habitación quedó en
silencio de nuevo, esa mujer, que siempre le había parecido hermosa,
finalmente se había ido.
Cuando Ángela salió de la habitación, Álvaro se atrevió a liberar todas sus
emociones, jadeaba al mismo tiempo que agarraba firmemente la sábana
detrás de él.Su plan era asustarla y hacerle saber que debía pagar el precio por lo que
había dicho.
Pero...
sintió una atracción indescriptible por ella cuando miró sus expresivos ojos,
era tan pura y encantadora. Él no podía controlar sus emociones cuando la
tuvo de frente, pero ella no se enteraba de lo que él pensaba...
Recordó la noche en la que se besaron en el baño.
Y también recordó cuando él personalmente hizo el examen por ella. Era tan
tímida y sus mejillas estaban sonrojadas...
Algo escurrió de su nariz...
Álvaro se tocó la nariz. ¡Cuando se dio cuenta de lo que era, bajó
rápidamente al baño con una cara de espanto total!
¡Maldita sea!
Ángela era una chica muy ingenua, ¡pero además era tan pura, cómo diablos
podía ser tan atractiva! No lo comprendía, era algo que carecía de sentido.
De hecho, Álvaro olvidó que ella ya ha cumplido 23 años, aunque él siempre
la trató como a una niña pequeña, ella había madurado mucho.
En la cocina...
Ángela no tenía idea de lo que pasaba por la mente de Álvaro, miró las cosas
que estaban en el refri y las fue sacando una por una.
"Tomates... ¡aquí! setas... ¡por acá! filete... ¡listo! papas..."
media hora más tarde, se sorprendió cuando vio que Álvaro ya estaba parado
en la puerta. ¡Solo traía puesta una bata de dormir!
Su rostro estaba serio, cruzó los brazos sobre su pecho y la miró fijamente"Eres un tonto, ¿no es cierto? ¿por qué tienes que tomar un baño justo
ahora?", Ángela agitó la espátula frente a la cara de Álvaro.
Él puso los ojos en blanco y se dio la vuelta, luego salió de la cocina.
...
"¡Hombre de hielo, Ala congelada, Ala grande... pum, pum, pum... te
despediré... lalala..." Ángela quiso maldecirlo, no obstante, terminó
componiéndole una canción.
Álvaro estaba sentado en el sofá. La miraba, ella estaba ocupada cocinando
en su cocina, no podía creer lo que estaba viendo y oyendo.
Ella lo estaba maldiciendo, ¿cierto? ¿cómo podría ella cambiarlo en una
canción? ¿cómo podría ella cambiar rápidamente su actitud en un instante?
¡Eso fue más rápido que cambiar la página de un libro!
Veinte minutos después...
Ángela aplaudió cuando colocó pescado con chucrut en la mesa del comedor.
"¡Está listo!".
Él se guardó el celular en el bolsillo y se sentó en la silla del comedor.
El olor de la comida le hizo agua la boca, tomó los palillos y apuntó al
pescado, pero de repente fue interrumpido por ella, "¡espérate tantito, este
plato definitivamente tiene un gran aspecto y un sabor magnifico, así que
primero quiero tomarle una foto!".
Álvaro se quedó mudo. Sin embargo, Ángela lo ignoró por completo y
regresó apresurada a la habitación para tomar su teléfono.
Cuando volvió al comedor, él ya estaba comiendo el tomate y los hongos con
una sonrisa en el rostro.
ESTÁS LEYENDO
Enamorada del doctor
Romancela historia de Angela si y Alvaro gu ... una historia de amor que comienza en "ENAMORADA DE DANIEL " QUIÉN ME ACOMPAÑAN Atreves de esta store....