Ming

El significado del Terror

Mas allá de las montañas en el horizonte, grandes y caóticos estallidos resuenan dispersando brutales ondas de choque hacia todas direcciones, todas generando devastación y caos, desintegrando y desmoronando grandes cordilleras de inmenso tamaño, reduciéndolas a pesados escombros condenados a la extinción que se hunden en lo profundo de las grandes grietas transformadas en cañones.

Allí por los áridos desiertos oscuros reluce el forzado retroceder de los dos pilares demonio que arrastran sus pies por la arena en busca de ganar estabilidad, la dama del vestido rojo, el pilar demonio del control a pesar de tener sus ojos vendados, ella contempla sorpresivamente a Ji-Eun78 como si pudiera verla con claridad, el pilar de la sangre estaba a su lado, y ambos lucen con sus vestiduras rasgadas y su piel rasguñada y moreteada debido a los golpes y los ataques críticos que han recibido de la poderosa Ming que tienen como contrincante.

- Tsk, es muy fuerte, si no hacemos algo, a este paso, nos va a matar… -

Comentó la mujer demonio, mostrándose agotada por no poder seguirle el ritmo a su contendiente, el pilar de la sangre quien yace a su costado, respondió con tenacidad.

- Debemos buscar una manera de hacerla caer… -

Entonces, en ese preciso momento, el pilar de la sangre desapareció de repente, pues el acaba de ser embestido por la hermosa dama de cabellera ondulada color rosa quien agarrándole del cuello, la dama arrastró al demonio por el suelo por unos diez metros de avance, marcando la grava con la figura y el grosor del individuo que estaba sometido ante la fuerza tan abrumadora que tiene Ji-Eun78, una fuerza que él no es capaz de igualar.

- Vamos, que sucede con ustedes dos, no se suponía que acabarían conmigo?... Estoy esperando… –

Ji-Eun78 comentó eufórica y desafiante descargando un poderoso puño sobre la mejilla derecha del tipo, ella continuó con otro puño dirigido a su otra mejilla, pero está vez por cortesía de la otra extremidad de la agresora, los golpes se escuchaban claramente a la distancia, pues la fuerza de los impactos lograban hacer que el área entera comenzara a temblar.

- // PUM, PUM, PUM, PUM… // -

Una combinación continúa de golpes imparables habían dejado un gran cráter circular que poco a poco se hacía más y más profundo, el rostro magullado del pilar de la sangre ya estaba desfigurado y en un estado lamentable, pues los huesos de su cara no resistieron a la andanada de golpes de Ji-Eun78, las heridas y las inflamaciones únicamente asemejan al estado de la carne que ha sido golpeada en repetidas ocasiones.

Pero justamente cuando su último golpe estaba por llegar, algo sucedió, y es que un hilo definido de color carmesí logró capturar su muñeca derecha antes de enviar el último impacto, esto sin lugar a dudas fue lo que salvó al pilar de la sangre.

Ji-Eun78 giró su primoroso rostro para observar de perfil a la responsable, se trataba de la otra demonio, el pilar del control quien tenía en su poder el uso de incontables hilos rojos que no tardaron en llegar y capturar completamente el cuerpo de la Ming. La dama de cabellera color rosa se puso de pie e intentó forcejear ante la captura de la mujer demonio, Ji-Eun78 no se podía mover ni un milímetro, su mirar color celeste observó los hilos rojos con total atención hasta que la voz de la mujer demonio le interrumpió.

- Es inútil, estos hilos carmesí que estás observando tienen la capacidad de aprisionar a cualquier individuo y someterlo, todo aquel que sea capturado en ese momento perderá toda su fuerza y todo su poder y energía, todo será neutralizado y ya no serás capaz de hacer absolutamente nada… me temo que estás acabada señorita… -