Ming

Perdición

Un desgarrador impacto se escuchó incluso desde unos cuantos kilómetros a la lejanía de la zona, el séptimo de los doce pilares demonio había sido brutalmente golpeado y a causa de ese golpe, su cuerpo salió a volar a una vertiginosa velocidad superior a la de cualquier proyectil recién disparado.

El cuerpo del demonio aterrizó contra una pared de las inmensas columnas montañosas que habían en el lugar… no… de hecho, su cuerpo consiguió atravesar por completo el cuerpo de la estructura haciendo que se derrumbara justo frente a él.

- Tsk… - El demonio apretó sus dientes ensangrentados.

Trató de levantarse, pero se le dificultaba, pues su cuerpo había sufrido las horribles secuelas de la golpiza que se acaba de llevar, las facciones de su rostro estaban inflamadas y ensangrentadas, su cuerpo estaba magullado y resentido por los impactos que recibió, tenía huesos fracturados, cortaduras y raspones por todo su físico, razón por la cual sus piernas ya no le responden para ponerse en pie una vez más.

El general Mi-youn12 caminaba lentamente hacia su víctima sin ningún tipo de rasguño en su indumentaria y su capa más allá de la sangre tan excesiva de los demonios que cayeron ante el. Cómo un aterrador némesis de devastación, Mi-youn12 se posicionó frente al séptimo pilar caído y se jactó de orgullo y soberbia al comentarle.

- Has resistido muy bien, pero el estado tan lamentable en el que estás indica que no serás capaz de recibir un golpe más de mi parte. –

Mi-youn12 caminó hasta el aturdido pilar y lo levantó del cuello como si se tratara de un simple peluche, lo acercó hacia él y le preguntó.

- Ahora porque no nos ahorramos todo esto y me dices dónde se encuentra el rey demonio de este mundo?, así no tienes porqué sufrir más. –

Entonces, tras el término de aquella frase, el cuerpo del pilar demonio comenzó a emanar el siniestro resplandor oscurecido de una energía demoniaca sin igual, la misma que se precipitaba por todo su cuerpo a modo de llamas negras que además de incrementar el poder del pilar demonio, curaban poco a poco sus heridas.

El agresor suspiró profundamente con decepción y soltó a su saco de golpes permitiéndole caer de rodillas, el general Mi-youn12 en un desplazar lateral se perdió de vista al moverse tan rápido como la luz, pero solo por escasos momentos antes de reaparecer tras el séptimo de los siete pilares agarrando su cabeza de golpe en el proceso, el poderoso e inquebrantable general del planeta de los Ming, Mang1965 le envistió llevándoselo por delante haciendo gala de su súper fuerza, el lo arrastro por todo suelo a más de cuatro kilómetros de distancia levantando el polvo y escombros a su paso con la cara del demonio despiadadamente, quebrando el piso y el suelo kleperiano con el rostro del demonio causando desastres en su paso.

Pero no conforme con eso, Mi-youn12 tras el arrastre que le dedicó al sujeto, levantó a su víctima separándolo de los escombros de forma brusca y cuando los pies del demonio estaban a centímetros separados del área de desastre, Mi-youn12 lo soltó y se desplazo hacia el lateral derecho a la velocidad de la luz desapareciendo en el acto para luego, reaparecer frente al demonio quien aun suspendido en el aire en su lenta caída libre recibió en el centro de su rostro un poderoso puño que le envía ensangrentado de regreso al suelo estampándolo de espaldas contra el mismo, provocando débiles temblores por el área a causa del brusco impactó por caída.

El séptimo pilar demonio por un momento entre la agonía y el dolor de sus mortales heridas pareció perder el conocimiento al cerrar sus ojos carmesí, Mi-youn12 lo observó desde las alturas y comentó:

- Vaya, parece ser que ya se murió, tendré que buscar a otro pilar más para interrogarlo… -

Su voz repentinamente se apagó cuando le dedicó un vistazo a lo alto de los cielos, el general Mi-youn12 se percató del como alguien o algo estaba haciendo que las nubes y la atmósfera del planeta parecieran desplazarse para darle paso a algo enorme, algo gigantesco que estaba descendiendo justo sobre otra nación diferente. A pesar de la enorme distancia que existen entre ambos, en el punto donde se encontraba Mi-youn12 también se sentían esas brutales ráfagas de viento huracanado que se están precipitando a causa de eso.

Incluso las mareas de los océanos de mercurio parecieron bajar a causa de este fenómeno, pero solo para agruparse a grandes distancias posteriores y bautizar terribles tsunamis que están a punto de ser creados. El general de los Ming, Mi-youn12 entre cerró su mirada y agudizó su vista periférica microscópica, el observó a la distancia entre las nubes aquello que es responsable de estos fenómenos climáticos a miles de kilómetros de distancia.