Poco a poco

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Habían pasado unos tres días desde su "encuentro" con Omar. Ambos habían estado muy liados, Omar estaba en prácticas de bombero y trabaja en ambulancias, a parte de escribir música, y Ruslana se los había pasado dibujando y haciendo entregas para clase. Aunque, aún así, no habían perdido el contacto del todo, se pasaban las noches chateando hasta que alguno se quedaba dormido.

Ruslana acababa de llegar a casa después de clases y recibió una llamada de Martin, su mejor amigo de Madrid.

- Hola Martin amorch, ¿cómo estás?

- Muy bien Rusli, tenía ganas de hablar contigo de una vez, llevas unos días muy ocupados... - le contestó el chico.

- Han pasado muchas cosas estos días, ya te contaré. Pero bueno dime cómo están todos, ¿has hablado con mi hermana?

- Hablé con ella el otro día, le di los calcetines esos rosas de las tetas que te dejaste en mi casa, sé que te encantan así que a ver si te los manda.

Ese comentario hizo que ambos rieran, esos calcetines tienen muchas anécdotas, además, le parecen super graciosos.

- Por cierto Rus, ¿cómo es que ya no bailas? Con lo que te gusta a ti bailar - le preguntó el chico.

- Es que me da corte preguntarles a mis tíos si me pueden apuntar a clases de urbano y heels, sabes que yo no tengo ni un duro.

- Bueno Rus, por intentarlo no pierdes nada.

- Ya... Pero bueno, que ya te llamo esta noche y te cuento absolutamente todo, pero ahora me tengo que ir a... acabar unos bocetos - mintió la pelirroja.

Se despidieron por teléfono y colgaron la llamada.

En realidad, la ucraniana no tenía que acabar ningún boceto, sino que había quedado con cierta persona de la que Martin aún no sabía de su existencia. Así que se dirigió al parque donde habían quedado -que le agradaba mucho porque le recuerda al Retiro de Madrid- y cuando llegó vio a ese chico que le parecía tan atractivo a lo lejos, con su guitarra tocando al sol.

- Hola guapo - le dijo sobresaltando al chico.

- Hola pelirroja, tú tampoco estás mal.

Ruslana puso los ojos en blanco, riéndose.

- ¿Qué tocabas? - le dijo ella.

- Nada, solo unas frases sueltas que tengo.

- No te cortes, deléitame con tu música.

Omar siguió tocando. Ambos estaban bajo un árbol, Omar apoyado en tal y Ruslana estirada al sol en una de sus piernas. Mientras él tocaba, ella le robó las gafas de sol, cosa que a él no le importó, y solo cerró los ojos disfrutando del momento.

Estuvieron así durante unos minutos, hasta que de repente Omar dejó de tocar.

- Rus, ¿puedo preguntarte algo?

Ruslana cambió su postura, se levantó y se sentó al lado del chico.

- Claro, ¿qué pasa?

- Han pasado unos días desde que, bueno, nos besamos.

De repente todo se volvió incómodo, Ruslana bajó la mirada.

- Y... - prosiguió Omar - me gustaría saber que somos.

Ruslana volvió a subir la mirada hacia ese chico y siguió ella.

-  ¿A qué te refieres exactamente?

- Solo quiero saber si significo algo más que un amigo para ti, porque tú para mi desde luego que si, pero no quiero presionarte. Solo quiero saber que sientes.

Ruslana cerró los ojos y suspiró hondo.

- Claro que eres más que un amigo, eres la única persona que me hace sentirme nerviosa pero muy feliz a la vez, que hace que me vuelva tímida solo con una mirada, que me hace sentir querida. Asi que sí, Omar, a mi también me gustas, y mucho, de hecho.

El chico no pudo evitar sonreír tras las palabras de la pelirroja. En ese momento todo era perfecto, parecía sacado de un libro. 

En ese momento ambos se miraron a los ojos, y pocos segundos después, ambos estaban metidos en ese beso dulce que solo acabó cuando notaron que les faltaba el aire.

Después de eso sonrieron y volvieron a su posición original, sintiéndose más a gusto que nunca.

- Oye por cierto - dijo la ucraniana - ¿crees qué debería decirle a mis tíos sobre apuntarme a danza? Es que era algo que me encantaba hacer en Madrid y lo hecho de menos, pero no sé.

- Si a ti te gusta, Rusli, no pierdes nada por intentarlo.

Ruslana simplemente se acomodó en su pierna y así se quedaron durante el resto de la tarde.


New life, new meDonde viven las historias. Descúbrelo ahora