Todo lo que soñaba, contigo quisiera vivirlo.
Frente al mar.
Sólo frente a las olas.
Oliendo la sal en tu pelo negro.
Ver ese momento mágico del horario de invierno juntos:
Como cuando son las siete de la noche y el cielo se pone de un color violeta azulado.
Quiero que me digas que soy linda, mientras me miras desde arriba.
Y volver a esconder la sonrisa, para evitar lucir demasiado enamorada.
Que te carcajees de mí, y sentir las vibraciones de tu risa.
Recostarme en tus piernas y llenarnos de arena húmeda.
Extraño contarnos cosas que no le diríamos a nadie más.
Incluso lo extraño más que besarnos.
Que meternos mano.
Que verte fumar en la acera frente a mi casa.
Que marzo de este año.
Marzo de este año, que se fue tan rápido que no tuve oportunidad con él.
Ni siquiera de hacerle una captura de pantalla.
Te extraño al cuadrado, y ya.
Tanto que el álgebra me entiende:
Porque cuando encuentro dos X y pienso que las alcanzo, la operación es hallar las putas raíces cuadradas.
Es separar números que habían sido hechos para estar juntos, y sumarles la mitad incompleta de alguien más.
Porque tú y yo estamos hechos para que nos dividan galeras.
¿O acaso ya no estoy hablando de números?
A veces lo que más me jode es que la puta playa, tú, y hasta las putas mates están sólo en mi cabeza.
Que ojalá nosotros en la estúpida playa hipotérica.
Y no lo de ahora:
Quedarme sola en nuestra playa.
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Girasoles Blancos
PoetryEn mi balcón del segundo sembré muchos girasoles. El Sol los pintó de amarillo. Van Gogh los llenó de rojos. Y también les puso azules. Pero hoy yo los dejo en blanco. Porque mis flores y yo nos parecemos mucho: Vivimos buscando nuestros verdad...
