Efímero.
Así como una vida.
Que aunque dure cien años.
A tiempos del universo son sólo segundos.
Porque mientras, sufrimos.
Lloramos.
Algunos sonríen y se burlan.
Se regodean revolcándose sobre quienes lloran de las cosas que se logran.
Que se tienen, que se saben.
Que no digo que no sea yo.
¿Eres tú?
Otros le dan la mano a la madre, al padre.
Al novio.
A la hermana de la prima de la tía.
Por ahí los hay rescatando perros.
Haciendo el amor.
Haciendo el amor con perros.
Estamos aquí.
Dándonos importancia.
Como si le estuviéramos gritando a alguien.
"Mírame, aquí estoy"
"Hago cosas que están mal hechas a conciencia"
O
"Estoy viviendo mi vida al máximo"
Andamos buscando atención.
Portándonos lo que se dice mal.
O no.
¿A quién le importa?
Sobrevalorando a gente sin sentido.
Gente desesperada, igual que nosotros, por tener un reflector sobre ellos.
Maximizando problemas sin valor.
Como si no estuviéramos solos en la Vía Láctea.
De nuevo, como si a alguien le importáramos.
Como si no tuviésemos fecha de caducidad.
El tiempo no siguiese fluyendo imitando a un río.
Y lo que llamamos una larga vida no se viera, en realidad, como algo...
¿Cómo era?
Ah, sí:
Efímero.
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Girasoles Blancos
PoetryEn mi balcón del segundo sembré muchos girasoles. El Sol los pintó de amarillo. Van Gogh los llenó de rojos. Y también les puso azules. Pero hoy yo los dejo en blanco. Porque mis flores y yo nos parecemos mucho: Vivimos buscando nuestros verdad...
