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-Agh, ¿qué hacemos despiertos tan temprano? - se quejó con el pequeño omega a su lado, Gaara tomó su mano y lo siguió jaloneando.
-Ya te dije lo que haríamos hoy, ahora ven que los demás están esperando. - dijo el pelirrojo muy sonriente como siempre.
-¿Los dem-... - fue muy tarde cuando escuchó los gritos de ambos niños en la recepción, viendo también a ambos omegas, una quien estaba muy alegre jugueteando con ambos niños y el supuesto padre de las crías estaba sentado con la mirada perdida y sin saber qué hacer -. Ah genial, la pesadilla de la familia nos acompaña.
Gaara rodó los ojos al escuchar aquello y asintió.
-Son vacaciones en familia, así que tenemos que estar todos juntos. - le sonrió, el rubio bufó mientras veía a los dos niños seguir jugueteando con su hermana.
Fue sorprendente para Naruto ver como Sasuke lo ignoraba todo el rato, es decir, le había sonreído y hablado, sí, pero cada vez que intentaba acercarse a él para mantener una conversación amistosa como las que siempre solían tener, el pequeño omega huía a donde sus hijos o detrás de Sakura, ¿desde cuándo Sasuke y Sakura se llevaban tan bien? ¿Acaso algo pasaba de lo que él no estuviera enterado?
Después de pasar largas horas de caminatas, juegos, risas a causa de haberse encontrado un jabalí que los persiguió y casi se comió a Sakura, por fin vieron su lindo destino al llegar a una cascada muy grande y extravagante en aquel lugar, Sasuke se quedó maravillado con la vista, jamás había ido a Hawái y por ende, a una cascada así de bonita en otro lugar que no era Japón, le impactaba mucho.
-¿Quieren ir a nadar? - Gaara preguntó a los dos niños, quienes asintieron rápidamente, Sarada fue la primera en quitarse su playera y la pequeña mochila que llevaba y corrió al agua de la mano de Gaara, sin embargo, Menma se quedó paradito en su lugar sin moverse y con un leve puchero.
-Menma, ¿por qué no vas? ¿Estás bien? - preguntó su verdadero padre con preocupación.
-Es que yo... - dudo unos segundos en decirlo -. Yo no sé nadar.
-¿Qué? ¿De qué hablas? ¿Cómo que no sabes nadar? - preguntó algo alterado el alfa -¿Y para eso querías que te trajera a Hawái a nadar con los delfines?
-No lo consideré. - murmuró apenado el menor.
-Cállate, si no sabe nadar es porque su tonto padre no le enseña. - respondió Sasuke tomando de los hombros a su pequeño hijo.
-Él dijo que iba a enseñarme a nadar hace un año, pero esta ocupado. - Menma hizo un pequeño puchero al recordar aquello.
-Ah claro, ocupado siendo un idiota. - respondió el mayor.
Sasuke lanzó una pequeña risita por las palabras de Naruto.
-¿Sabes qué cielo? creó que iré a nadar también un rato, ¿te quedarías aquí con tu padre falso? - le habló a su hijo, quien enseguida asintió y corrió a los brazos del alfa.
-¿Y se supone que vas a nadar desnudo o traes un traje de baño? - preguntó. -Eres un omega Sasuke, no puedes irte exhibiendo así de esa manera.
Sasuke rodó los ojos y sin importarle los gruñidos de Naruto, se quitó su playera azul, para poder adentrarse en el agua y nadar un poco, Sakura abrió la boca en una perfecta "o" cuando vio el cuerpo semi desnudo del pequeño omega.
-¿Acaso tú sabías dónde tenía guardado todo eso? - le dijo a su hermano, Naruto la miró confundido y negó, no mentiría, Sasuke tenía un cuerpo muy lindo, un cuerpo bien esculpido y ahora lo comprobaba mucho mejor, porque detrás de aquella fea ropa holgada que el menor solía usar, había un perfecto cuerpo con excelentes curvas y un lindo trasero.
Sakura no pudo evitar mirar de reojo a Naruto y la manera en la que el pelinegro tenía el ceño fruncido por la vista que tenía.
-Que bueno que en este viaje él y yo somos esposos- la pelirosa dijo, evitando reír para no echar a perder su plan -. Y que mala suerte por ti que se están divorciando.
El alfa gruñó al escuchar sus palabras y una vez más se preguntó, ¿desde cuándo Sakura y Sasuke comenzaron a llevarse tanto? Antes no solían intercambiar muchas palabras, y si lo hacían era para decirse pequeñas ofensas.
-Cállate y no lo mires. - gruñó el alfa tapando rápidamente los ojos de su hermana, provocando que Menma soltará una pequeña risita.
-¿Seguro que sí quieres divorciarte de él? - preguntó divertida recibiendo un golpe de parte de su hermano.
Naruto volvió la vista al frente para poder apreciar la imagen de una Gaara completamente feliz en el agua, pero no pudo evitar desviar su mirada hasta el otro omega, el cual nadaba mientras jugaba con su hijo mayor.
Sasuke realmente era muy lindo.
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