Jack y Samantha Dawson viven aventuras que, nadie se podría imaginar. La vida de ambos cambia por completo, cuando Jack junto a su mejor amigo ganan tres pasajes de tercera clase en el barco de los sueños, sin saber que en medio del mar conocerían a...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
--Si—Sami sonrojada James le besa la mejilla.
--Oww que bueno esta esté –dijo Ximena.
¿Cuál?—pregunto Sami Charles le muestra –Es un regalo para Rose, cuando lleguemos a Nueva York –dijo ella.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Mientras tanto en uno de los camarotes, privados del barco Jack estaba viendo los cuadros de, la habitación de Rose mientras la pelirroja buscaba algo, en la caja fuerte.
--Es lo apropiado te lo aseguro, es la sala de estar ¿la luz está bien?—pregunto Rose.
--Nunca he trabajado en condiciones tan horribles –dijo Jack en acento francés Rose se ríe. Jack ve el cuadro y se acerca.
--¿Conoces su obra?—pregunto Rose.
--Por supuesto mira como usa el color aquí no es genial –dijo Jack.
--Lo sé es extraordinario –dijo Rose Jack estaba mirando cada rincón del camarote –Cal insiste en cargar esta cosa en todas partes –dijo Rose.
--¿Crees que llegue pronto?—pregunto Jack.
--No mientras dure los puros y el brani –dijo Rose sacando una caja de la caja fuerte de la caja de color marrón quita el collar de diamante corazón azul y se lo muestra a Jack.
--Oww que grande, ¿Es un diamante?—pregunto Jack.
--Es una especie de diamante raro uno muy extraño –dijo Rose y mira a Jack –Jack quiero que me dibujes como tus chicas francesas usando esto –dijo Rose.
--Si quieres –dijo Jack mirando el corazón de mar.
--Usando solo esto –dijo Rose Jack la mira, mientras Jack preparaba todo Rose se fue a alistarse mientras tanto fuera de ese camarote, la menor de los Dawson estaba con Ximena ambas estaban, hablando de Harold y James.
--Conocí a Harold desde que tengo memoria, siempre fuimos nosotros tres y, un buen día miraba a Harold con otros ojos dijo Ximena
