Los Hermanos Dawson.

Capítulo 4.

Esa mañana fue horrible para Sami, se sentía morir ahora que recordaba ella tomo más de un vaso de cerveza por eso se sentía fatal, Estaba acostada en la cama tapada hasta la cabeza; escucho unos golpes en la puerta de seguro era Jack se levanta con mucha flojera cuando abrió la puerta, vio a James.

--Hola hermosa—dijo James Sami sonríe.

--No estoy hermosa, debo estar fatal –dijo Sami.

--Pues para mi estas hermosa –dijo James Sami se sonroja --¿Puedo?—pregunto él.

--Ah, si pasa—dijo Sami James pasa y Sami cierra la puerta—gracias por lo de anoche—dijo ella ambos sonríen Sami se acerca a él y lo besa James le corresponde.

--De nada –dijo James y le acaricia la mejilla –Ah te traje algo para el dolor de cabeza—dijo él.

--Gracias –dijo Sami y sonríe ambos se miran –me estaba por volver loca del dolor—dijo ella y ambos ríen.

--Y también vine a invitarte a desayunar—dijo James.

--¿Y tú turno?—pregunto Sami James la mira—Es que el señor Thomas me está ayudando para que podamos estar juntos—dijo ella sonrojada.

--Empiezo a las 10 –dijo James Sami sonríe –Conque tenemos más de un cómplice eh –dijo él.

--Eh—dijo Sami.

--Mi hermana, Harold y William son los otros cómplices—dijo James Sami se ríe.

--Me cambio y vamos a desayunar –dijo Sami James sale afuera a esperarla y Sami se cambia –mierda –dijo ella quería ponerse el vestido de su madre pero la cremallera no alcanzaba, abre la puerta –M...James –dijo Sami.

--Si princesa?—pregunto James Sami se sonroja.

--¿Me ayudas con la cremallera?—pregunto Sami apenada.

--Si – dijo James y entra en la habitación de Sami—Ya está –dijo él, Sami se voltea ambos se miran y se besan, luego del beso salen de la habitación.

--¿Por qué nos miran tanto?—pregunto Sami y les sonríe a unos pasajeros que le sonreían.

--Están celosos de que estoy con la más hermosa –dijo James Sami se sonroja.

Mientras tanto en una de las cubiertas privadas del barco, una bella pelirroja desayunaba con el ogro de su novio, todo era silencio solo se escuchaba el sonido de los cubiertos; Rose no dejaba de pensar en lo de anoche realmente la paso muy bien, junto a Jack, Sami y James los cuatro se divirtieron mucho.

--Esperaba que me acompañaras anoche –dijo Cal.

--Estaba cansada—dijo Rose Cal hace una mueca.

--Tu baile con los de abajo te dejo cansada—dijo Cal Rose niega con la cabeza –Con esa niña ridícula—dijo él.

--Oye no le digas ridícula, así que enviaste a tu fiel perro faldero que vergüenza –dijo Rose.

--No te comportes más así Rose—dijo Cal.

--No soy uno de tus empleados que te obedecen fielmente, soy tu prometida—dijo Rose,

--Mi prometida—dijo Cal algo molesto –mi prometida mi prometida –dijo él y tira la mesa—mi esposa en la práctica aunque no por la ley asi que debes honrarme como una esposa honra a su esposo a mí no me vas a engañar Rose, algo no te quedo claro—dijo el.

--No –dijo Rose.

--Excelente, disculpa –dijo Cal y se va.

--Fue un accidente –dijo Rose Trudy viene a ayudarla.