director jimin › jikook.

Capítulo 22

Esta nervioso y quiere comerse las uñas de solo estar parado mirando la cama frente a él, misma cama en la que probó el placer más sucio y humillante qué jamás ha tenido, el más caliente y con el que se sintió plenamente satisfecho cuando acabó. Jungkook espera por Park JiMin, espera por ese hombre que cuando lo vio por primera vez hizo qué su ropa interior se mojara, que se imaginara entregándole a él y que todo su cuerpo temblara. Aunque debe aceptar que no se imaginó la fuerza con la que tiene sexo, su porte y mirada fuerte le dieron la advertencia, la cual, claramente le importo un centavo y aun así hizo lo que quiso. Acostarse con Park JiMin, ¡JA!, pensó que le llevaría más tiempo hacerlo.

De todos modos, y aun pensando en el mayor de ojos oscuros, empezó a jugar con el candado en su pulsera, perdiéndose en los maravillosos recuerdos qué tiene en esa maravillosa cama de sábanas azules. Jungkook puede sentir, todavía, las manos del director acariciándole los brazos, las piernas y cada rincón de su cuerpo, aún siento los besos que dejo en sus muslos y labios, incluso pude sentir la fuerza con la que dejo marcados sus dedos en sus muslos. Tan maravilloso, tan bueno, tan excitante.

─¿Recordando lo de anoche, Jungkook? ─ La voz del director hizo a Jungkook girarse. Aquel hombre se veía hermoso con sus ajustados trajes de trabajo, pero ese pantalón de cuero y aquella camisa tinta lo hacen ver más que guapo, lo hace ver como un puto dios.

JiMin se acercó a él y sin perder tiempo lo beso, le mordió el labio inferior y metió su lengua cuantas veces quiso porque esa boca le mostró qué puede hacer muchas cosas maravillosas y excitantes qué lograron hacerlo sentir más que bien.

─¿Y Ji-Hyun?

─Está dándose un baño y como ya se siente mayor no deja que yo esté ahí por si necesita algo. ─ respondió apretando una de las mejillas traseras de Jungkook. ─ ahora, vamos a quitarte todo esto. ─ JiMin se alejó un poco de Jungkook y con sus manos fue quitándole cada prenda al menor. Desde la camisa blanca con azul, hasta el pantalón ajustado de mezclilla y cuando estaba abajo, beso la primer marca de sus dedos, Jungkook lo miró, Park JiMin fue besando cada uno de esos morados qué sus piernas y muslos tenían. Llego a su estómago y con su lengua guio un pequeño rastro de saliva hasta uno de sus botones para luego tirar de él y ver la expresión de Jungkook mientras sonríe. ─ te ves hermoso con mis dedos marcados en tu piel. ─ le susurró muy cerca de los labios para luego besar sus clavículas. Siente este, el último lugar marcado por sus labios una noche antes. ─ ¿Cómo vas a cubrir esto?

─El uniforme hará su magia. ─ respondió mirando al mayor. ─ cinco de siete días estoy en la Universidad, no será problema.

─Bueno, pero ¿Y en casa? ¿Qué vas a decir? ─ JiMin sostuvo la pequeña cintura de Jungkook con una de sus manos mientras que con la otra acaricia la mejilla de este. Jungkook suspiro, ignorando completamente su desnudez y siendo prisionero de aquellos oscuros ojos felinos.

─No los vera, tu mejor amigo no sabrá que te coges a su único hijo. ─ respondió sonriendo. Y JiMin lo beso una vez más. Ya después tendría tiempo para los problemas que vendrán con su mejor amigo.