director jimin › jikook.

Extra O1

6 años después

Mingguk y Jumin están cumpliendo 8 años justamente un día antes del 24 de diciembre. Su papá siempre les hace una fiesta grande con sus amigos de la escuela y su hermano mayor Park JiHyun, el cual por cierto ya tiene 15 años y es todo un rebelde. Menos con su Kookie blue, a él lo ama más que a nada en el mundo.

JungKook ha decidido no tener cena navideña este año, pues se organizó con Taehyung, Seokjin y Chenle para hacer esta fiesta con temática especial. Príncipes y princesas. Mingguk ni siquiera se queja, no fue el caso de Jumin qué apenas escuchó la idea dijo que no. Bastó una plática con su tío Seokjin para que el menor cambiará de opinión y ahora fuese el príncipe conejo más lindo de la fiesta. Mingguk es todo un príncipe azul, llevando, literalmente un traje azul con blanco qué Taehyung le compró. Chenle ni siquiera hace el esfuerzo por que alguno de los dos niños lo tome como su favorito, porque esos dos bebés, aman al tío Chenle tanto como esos dos.

Y quizás es por el hecho de que Chenle es el tío tapadera, el que los defiende cuando hacen travesuras y JungKook está de malas. El que los lleva a los videojuegos aun cuando tiene tarea de escuela y el que los trae de arriba para abajo cuando Taehyung y Seokjin tiene mucho trabajo.

La fiesta que están disfrutando los hijos de JungKook y JiMin, fue pagada totalmente por Park SooMan. El abuelo de los gemelos nunca piensa en su billetera cuando sus nietos cumplen años y gasta tantos miles de pesos como le es posible. Sin importar que eso lo vaya a llevar a la quiebra en el futuro.

─¡Papá Minnie! ¡Abuelo! ─ Mingguk es el primero en gritar cuando ve a su papá entrar en la terraza de la casa, Jumin lo imita, dejando atrás a sus amigos y su tío Seokjin. Ambos gemelos corren y se dejan ir contra su papá, que termina en el suelo con los niños encima. JiMin ama a sus hijos con cada latido de su corazón y poder verlos cada que quiere, lo hace todavía más feliz. Incluso el qué JungKook lo dejará estar ahí en su casa, significa mucho para él. ─ papi, soy un príncipe azul y Junie el príncipe conejo, ¿Verdad que se ve lindo?

─Claro que se ve lindo. Los dos se ven lindos. ─ responde levantándose del suelo con sus hijos en brazos.

─¿Dónde está JiHyun? ─ pregunta Jumin mientras busca a su hermano mayor con la mirada y al no encontrarlo hace un puchero y los ojos se le llenan de lágrimas.

─¡Aquí estoy! ─ Jumin le sonríe y JiHyun lo abraza con fuerza mientras le da besos. ─ Eres un llorón, Junie.

─¡Papá, JiHyun me está diciendo llorón!

─JiHyun... ─ habla el abuelo Park al mismo tiempo que deja los regalos sobre la mesa. ─ ya deja de molestar a Jumin.

─Lo voy a morder...

Las risas de parte del menor no tardaron en aparecer, así como los aplausos de Mingguk. JiMin bajo a su hijo y lo dejó correr a donde sus demás amigos estaban esperándolo. No pasó desapercibido la forma en que el castaño junto a su hijo lo cuidaba. JiMin camino a la cocina, donde probablemente estuviese el padre de sus hijos y lo encontró recargado en la barra, dándole la espalda mientras respira repetidas veces. Y es que JungKook, con el paso de los años, la carga laboral y el hecho de ser padre soltero, le han causado ansiedad. JiMin llego a ayudarle varias veces, pero siempre era corrido de la casa apenas JungKook se recuperaba. Esta vez, no estaba seguro de acercarse, pero al ver al menor debilitarse por la presión, fue qué corrió a donde él estaba, llegando justo a tiempo para sujetarlo.

─JungKook, ¿qué pasa?

JungKook negó apretando los ojos con fuerza mientras trata de respirar de esa forma en que su doctor le recomendó. Y JiMin se quedó ahí, abrazándolo con fuerza y cariño para que su menor no se lastimara más.