La sirena [Hanstoff] [BL/GL/AU]

❄️Las criaturas prohibidas

Al siguiente día, después de alimentar a la joven que tenían escondida. Nils entró al palacio. Usó su moretón para dar pena y cuando llegó el primer guardia, no tardó en manipularlo.

-Es terrible...ese sujeto golpeó al príncipe Hans y ahora está hablando de sirenas con Ana- ese guardia entró en alerta, sabía que esa palabra estaba prohibida y Hans tenia que saberlo, temía que fuera despedido, en vez de hacérselo saber directamente, se lo dijo a otros sirvientes.

Alrededor de las 6:30, Hans estaba en su despacho, estaba revisando algunos documentos junto con Nils, de pronto una sirvienta entró y confesó todo.

Nils miró su reloj, tardaron solamente 30 minutos, fue muy rápido.

Hans estaba hirviendo de ira. Salió para ir a la habitación del contrario. Kristoff estaba levantado, quería ir a recorrer otra vez Arendelle y pensaba cambiarse de ropa, un fuerte golpe lo hizo voltear y era Hans entrando a su habitación.

🍒-¡Maldito! ¡Largate ahora mismo de mi palacio! ¡No quiero volver a verte en Arendelle!!- Cerró la puerta con la misma intensidad. El rubio solamente tomó un suspiro, pero no quería incomodar a nadie por lo que siguió esa amenaza.

Unas horas más tarde, mientras Hans se ahogaba en su propia rabia, Anna ya se había levantado y buscaba a Kristoff en el castillo. Incluso fue a su habitación y cuando vio la ausencia de su maleta supo lo que estaba sucediendo. La culpa la puso mal, sabía que los guardias ya se habían enterado. Era irónico que ahora su interés estaba puesto en un muchacho y era Hans quien lo corría del palacio, generalmente Anna los ahuyentaba en 2 días, pero ese era un tiempo récord. 🌸-Hans? ¿Qué sucede? ¿Dónde esta Kristoff? -

Nils se quedó perplejo, creía que ella no estaría interesada en la presencia de aquel hombre, ella nunca había preguntado por ninguno de sus pretendientes.

[...]

Afortunadamente Kris tenía buena memoria y sabía cuál era el mejor hotel para quedarse junto con su mejor amigo Sven, no quería irse tan pronto de Arendelle, quizás se quedaría al menos ese día y a la mañana siguiente regresaría a Tempestad o incluso a su pueblo natal, en este último, lo que hacía era cosechar hielo y venderlo a sus otras tierras, le gustaba mucho trabajar porque ahí estaba su verdadera familia. Dió un recorrido más a Arendelle y mientras andaba logró ver nieve en algunas casas y unas mujeres hablando. -Qué extraño, la nieve no vendría hasta 2 meses...esto nunca había pasado-

Kris sabía lo que estaba a punto de suceder. Vio como el inspector de Arendelle, quien también usaba ahí en la investigación, iba directamente a sus oficinas y mandaría a llamar al príncipe Hans. Éste último aprovechó y fue a la tienda para comprar algo de ropa para la próxima tormenta.

[...]

🌸-¡¿Cómo pudiste hacer eso?! ¡Ni siquiera sabes que eso es verdad! -

🍒-¿No recuerdas la última vez que se trató ese tema?! ¡Nosotros mismos la buscamos y no encontramos nada!-

🌸-¡Entonces Kristoff mintió o simplemente pensó que había visto una sirena! ¡Santo cielo, Hans! ¿Por qué lo corriste?!-

🍒-No tiene porqué decir nada sobre esas criaturas...¿Crees que voy a dejar que llegue a mi palacio y simplemente diga incoherencias?

🌸-Por si no lo sabes...este también es mi palacio-

🍒-Sí, Anna, ¿Sabes qué pasaría si se vuelve a tocar ese tema aquí? ¿Quieres regresar a la otra habitación?- ya estaba bastante molesto y esa discusión provocó que saliera esa parte malévola que trataba de ocultarle a su hermana. Ella al ver esos ojos tan fríos cerró la boca y se dió vuelta para ir a su habitación y encerrarse ahí.