ʙᴇʜɪɴᴅ ᴛʜᴇ sᴄᴇɴᴇs ➸ [ᴢᴀʏɴ ᴀᴜ] || ᴇsᴘᴀñᴏʟ

[8] Suelo de mármol

"¿Ya llegamos?"

Me encontré haciendo esta pregunta cada vez que doblábamos, lo cual fue... Mucho.

"No todavía. Te dije, tengo que tomar el camino largo para librarme de cualquier paparazi. No quiero que me sigan y descubran dónde está mi nueva casa."

Me doy vuelta mirando hacia fuera, "Somos como... Las únicas personas en esta carretera, ¿De verdad es tan necesario que siga manteniendo mi cabeza abajo?"

Ríe entre dientes, "Los perdimos hace como veinte minutos."

Frunzo el ceño, "¿Estás hablando jodidamente en serio?" Me siento.

"Sí."

"¿Puedes encender la radio? Los silencios incómodos no son lo mío."

"¿Incómodos?" Levanta una ceja en el espejo, "Me gusta este incómodo silencio. Es tranquilo."

"Es molesto."

"Tú eres molesta."

Ruedo mis ojos y luego lo atrapo viéndome en el espejo retrovisor. De pronto todo se silencia otra vez. No sé cómo éste silencio no lo molesta, pero de nuevo, Él es un raro.

Me apoyo contra el asiento de copiloto presionando mi mejilla en el respaldo. No hay mucho que mirar afuera ya que está oscuro, así que lo veo a Él.

Siempre pensé que era caliente. Como caliente, caliente. Bueno, quizás aún lo pienso. Desearía que fuese tan hermoso  por dentro como lo son sus características. Sigo sin entender cómo alguien como Aly puede estar con Él... Aunque bueno, estaban peleando, creo. Me pregunto de qué se trata.

"Ya llegamos." Anuncia. Mi cabeza se dispara para observar con detalle cuando las grandes puertas exteriores se abren lentamente.

No soy capaz de ver demasiado, pero puedo decir que la casa, bueno, mansión, es blanca y diestramente diseñada. ¡Y eso es sólo afuera! Además hay varias palmeras por todo el camino de entrada y rodeando el nivel más bajo.

Cuando miro hacia arriba noto el agua turquesa de la piscina a través del cristal que la contiene. Los chorros de ésta hacen pequeñas burbujas y mi mandíbula se cae. Parece jodidamente asombroso, como algo salido de una revista de lujo.

"¿El agua nunca se rebalsa?" Pregunto, ya que está perfectamente nivelado hasta el borde superior.

"No." Gira su cabeza con una engreída sonrisa. Maneja hacia un nivel que está más arriba, apretando un botón que abre la gigantesca puerta del garaje. Puedo sentir cómo se acaba mi paciencia por lo lento que se mueve. No puedo esperar para ver qué más hay aquí.

Una vez arriba, entra en el espacioso 'garaje' que no luce para nada como uno normal. Es totalmente blanco e inmaculado. Ni siquiera hay marcas de neumático o grasa en ninguna parte. Estaciona detrás de un Lamborghini blanco y miro boquiabierta los otros autos deportivos que están frente a mí. No esperaba menos de Él, honestamente.

Cierra tu boca, Faye.

Lo atrapo sonriendo engreídamente otra vez y de inmediato me siento recta, pretendiendo que no presto atención a estas grandiosas cosas. Y algo me dice que no he visto nada aún...

"Bonito." Le hago un pequeño cumplido, Él simplemente sonríe y sale del Porsche.

Sorpresivamente abre la puerta para mí, e incluso más chocante, estira su mano. Frunzo el ceño observándola y luego a su rostro, el cual está pasivo.

En el segundo en que nuestras palmas conectan el calor arrasa en mis mejillas y a través de mi cuerpo, por lo que intento encarecidamente expulsar el sentimiento lejos, muy lejos de mí.