18 Aclaraciones

56 12 33
                                    


Este capítulo va dedicado a Gabystrini2020

Mana, disfruta este capítulo que me costó horrores escribir el comienzo, pero con la satisfacción de que lo amaran.

Y gracias a PaolaArias96  por los consejos

Estamos en la recta final, así que espero que me dejen en comentarios hasta ahora que les está pareciendo y que esperan para el final.

Únete a mi grupo de WhatsApp y sígueme en instagram

Charlotte

Desperté por las ganas de ir al baño, la luz del amanecer se colaba por las cortinas y entonces fui consciente de la hermosa vista desde aquí; no era un simple hotel, pero no esperaba menos, Luka obtenía siempre lo mejor.

El plan había funcionado a la perfección. Me atuve a las consecuencias y ahora estoy entre esos cálidos brazos que me habían reconfortado tantas veces de pequeña. A pesar que aún quedaban dudas, pasaron a segundo plano al sentir el calor de su cuerpo, su deseo y sus ganas hacia mí. Ha hecho vibrar mi ser entero.

Me puse de pie y observé como su pecho subía y bajaba tranquilamente. Sus facciones son tan perfectas que no me cansaría de verlo todos los días. Sin importar mi desnudez, me acerqué a los enormes cristales y cerré las cortinas con cuidado de no despertarlo, debía estar agotado después de ese largo vuelo.

Entré al baño para tomar una ducha y entonces me observé en el espejo, sus dedos estaban marcados en mi cuello, había moratones en mis senos y había más dedos en mis muslos y caderas. Pero esta vez no me sentía horrorizada, estaba feliz, satisfecha, pero a la vez con ganas de más.

Abrí la ducha y entré para relajar mi cuerpo un poco, cerré los ojos y dejé que el agua me bañara entera. Escuché ruido y me giré para ver a Luka de pie, completamente desnudo, entonces pude observar bien sus tatuajes.

— ¿Hay algo que quieras saber? —Su ronca voz me devolvió a la realidad—. ¿O solo me vas a devorar con la mirada?

—Bueno... quisiera devorarte con la boca —contesté envalentonada mirando sus ojos y enarcó una ceja, bajé la vista a su miembro erecto y posé mis manos en sus caderas acariciando suavemente con la yema de mis dedos—, pero no sé siquiera cómo tomarlo con las manos, es enorme y...

Me tomó del cuello con fuerza y me obligó a mirarlo a esos negros orbes de nuevo.

—Híncate —susurró cerca de mis labios—. Ahora —obedecí sin chistar. Con el pulgar trazó mis labios y levanto mi rostro por el mentón—. No bajes la vista, mírame a los ojos —asentí suavemente y sentí el roce de su glande en mis labios humedeciendo todo a su paso, sin la intención de meterla a mi boca—. Tómala con tus manos, así con la fuerza que te tomaré del cabello —apretó en una coleta, fuerte pero sin lastimar—, mueve hacia delante y hacia atrás.

Lo tomé con la mano izquierda y comencé lento, después empujó con sus caderas, sintiendo la presión más fuerte con su puño en mi cabeza.

Aunque se sentía extraño, nunca imaginé llegar a tanto con un hombre, mucho menos con Luka; su expresión oscura por el deseo hacia que valiera la pena hacerlo. Era excitante que rozara con suavidad su pene en mis labios lo que hacía que mi excitación creciera aun más.

¿Hasta dónde sería capaz de llegar con tal atrevimiento?

—Abre —así hice y comenzó a introducir lentamente, moviendo sus caderas—, respira por la nariz.

Barrera de hieloDonde viven las historias. Descúbrelo ahora