capitulo 16: Amor Por Siempre.

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Los gritos de batalla resonaban en los pasillos del castillo mientras Ryu, Yue y las fuerzas de la resistencia luchaban contra los esbirros de Lina y Campus. Ryu bloqueó un golpe con su báculo mágico, contraatacando con un hechizo de fuego que derribó a varios enemigos.

"¡No podemos dejar que se apoderen del castillo!" gritó la Princesa Hilde, blandiendo su espada. "¡Resistan!"

Yue disparó una lluvia de flechas certeras, cubriendo a Ryu mientras él concentraba su magia. Con un rugido, invocó un poderoso rayo que barrió las filas enemigas. Lentamente, las fuerzas oscuras comenzaron a retroceder.

De repente, una oscura presencia inundó el pasillo. Lina hizo su aparición, con una sonrisa malévola en su rostro.

"Vaya, vaya, miren quiénes han decidido regresar," dijo con sorna. "Pero temo que han llegado demasiado tarde para detenerme."

"¡Lina! ¿Dónde está Lia?" exigió saber Ryu. "¿Qué has hecho con ella?"

Lina se rio cruelmente. "Esa pequeña traidora ha sido derrotada. Sus poderes ya no son rivalidad para los míos." Hizo un gesto desdeñoso con la mano. "Ahora, ¿por qué no se unen a mí? Juntos, podríamos ser imparables."

"¡Nunca!" gritó Yue, apuntando una flecha directamente al corazón de Lina. "Jamás nos uniríamos a una malvada como tú."

Los ojos de Lina se estrecharon con furia. "Entonces, sufran las consecuencias." Lanzó una poderosa ráfaga de energía oscura que los golpeó con fuerza, haciéndolos volar por los aires.

Ryu chocó contra el suelo con un grito ahogado, sintiendo el aire escapar de sus pulmones. Luchó por ponerse de pie, pero una punzada de dolor lo atravesó. Miró con horror cómo una filosa estaca de roca había atravesado su pierna durante la caída.

"¡Ryu!" El grito desgarrador de Yue lo hizo levantar la vista. Ella corría hacia él, con los ojos desorbitados por el miedo.

Lina se cernió sobre ellos, con energía oscura acumulada en sus manos. "Qué lástima. Hubiesen sido aliados poderosos. Pero ahora, sólo son insectos que deben ser aplastados."

Justo cuando estaba a punto de atacar, una voz profunda resonó a través del pasillo.

"¡Detente ahí, Lina!"

Todos se volvieron para ver a Einion y a Satoshi de pie al final del corredor. El antiguo mago tenía un brillo fiero en sus ojos.

"¡Einion!" siseó Lina. "No puedes detenerme esta vez. Tú y tus estudiantes serán los primeros en perecer."

Una risa siniestra inundó el aire cuando Campus apareció detrás de ellos. "Lamentarás el día en que te negaste a unirte a nosotros."

Einion no se inmutó, irradiando una poderosa aura mágica. "No fue a mí a quien rechazaron, Campus. Fue a ti y a tu ansia de poder lo que me obligó a alejarme."

"¡Suficiente charla!" grito Lina con impaciencia. "¡Acábenlos!"

La batalla explotó con renovada furia. Einion y Satoshi se enfrentaron a Lina y Campus en un choque épico de magia y hechizos. Mientras tanto, Ryu hizo todo lo posible por quitarse la estaca de roca de la pierna, apretando los dientes por el dolor.

"Ryu, resiste," suplicó Yue con lágrimas en los ojos. "No me dejes, por favor..."

Él la miró, conmovido por su preocupación. Lentamente, levantó una mano temblorosa para acariciar su mejilla. "Yue... has sido mi mayor fuerza en esta batalla. No hubiera llegado hasta aquí sin ti."

Ella tomó su mano y la sostuvo contra su rostro. "Te amo, Ryu. No puedo perderte ahora que finalmente nos hemos encontrado."

A pesar del dolor, Ryu sonrió con ternura. "Yo también te amo, Yue. Y te prometo que ninguna fuerza oscura podrá separarnos."

Reuniendo su fuerza restante, Ryu comenzó a trazar un hechizo de curación con su báculo. Yue lo observó con ojos esperanzados mientras la energía mágica fluía hacia su pierna herida.

Lentamente, la estaca de roca comenzó a disolverse hasta que finalmente la pierna de Ryu quedó libre. Yue lo ayudó a ponerse de pie con sumo cuidado mientras él terminaba el hechizo, curando su pierna por completo.

"Gracias a ti, mi amor," dijo Ryu con devoción.

Yue lo abrazó con fuerza. "No podría seguir sin ti. Prométeme que estaremos juntos, sin importar lo que suceda."

"Lo prometo," juró Ryu con solemnidad.

Luego, tomó su rostro con ambas manos y la besó apasionadamente, sellando su promesa con un amor inquebrantable.

Fortalecidos por su vínculo, ambos se volvieron una vez más hacia la batalla.

Esta vez, lucharían juntos hasta el final.

Fin del capítulo.

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