¡𝐊𝐈𝐒𝐒!
Pasaron el resto de la tarde entre risas, y uno que otro juego de empujoncitos. Cualquiera que las viera diría que sin duda eran una linda pareja juvenil.
Las manos de ambas sostenían una brocheta de dangos, solo que la pelinegra también llevaba consigo un peluche de oso, otorgado por la linda rubia.- Rosé, estoy muy feliz de haber aceptado está cita, no pensé que me divertiría tanto. -Las mejillas de la mencionada se tornaron de un tono rojizo, mientras que una sonrisa tímida se posaba en sus labios.
- Yo también estoy feliz de haber aceptado. -Ambas se miraban fijamente a los ojos, las mejillas sonrojadas, al igual que sus narices puesto a qué al esconderse el sol, todo aquel ambiente cálido que había se había esfumado.
El escenario era algo que quedaría en la mente de Rosé para siempre, el viento movía suavemente los cabellos de Lisa, sus mejillas y nariz sonrojadas, y aquella sonrisa tan inocente que la había cautivado desde la primera vez que la miro; pero no era un pensamiento muy alejado de lo que pensaba Lisa, pues también había quedado un tanto cautivada por la vista que recibía de parte de la rubia.
- ¿Quieres ir a dar una vuelta más? - Inquirió la lluvia después de haber observado la hora en la pantalla frente a ellas, recibió un asentimiento de confirmación por parte de la pelinegra.
Comenzaron a caminar por la calle, la gente caminaba tranquilamente, las luces iluminaban las calles, los locales de comida que desprendían un olor delicioso. Todo aquello comenzó a desvanecerse conforme más caminaban, llegando a un parque casi semi vacío a excepción de unas cuantas personas que estaban tranquilamente descansando en el.
Unas cuantas parejas acampando, amigos pasando el tiempo y una que otra familia, pero realmente estaba un tanto vacío para ser un parque tan grande.- Es aún más agradable cuando está vacío. -Comento Lisa, rompiendo un poco el cómodo silencio en el que se encontraban.
- ¿Quieres sentarte en la banqueta? Comienzan a dolerme un poco las piernas.-Bromeo la rubia, escuchando la risita de la contraria.
- Esperaba que dijeras algo así. -Admitio con una sonrisa, dejándose llevar tomo el brazo de la chica para arrastrarla hacia la banqueta.
- Gracias. -Expreso con una sonrisa tímida en sus labios.
- ¿Por qué? - Rosé la miro sin entender el porqué de su agradecimiento.
La pelinegra levanto la vista hacia la rubia frente a ella y tomo su mano.- Por todo.
Rosé sin entender muy bien todavía simplemente asintió.- No te preocupes.
La chica no sabía a lo que Lisa se refería con "todo" tal vez la salida de hoy, el peluche de oso entre sus manos, o las chucherías y comida que le había invitado. Sin embargo Lisa no se refería a eso, o bueno, no totalmente; ella se refería a las flores, en la salida de hoy había crecido en ella una ligera sospecha de que la rubia era la dueña de aquellas notas que iban acompañadas de flores hechas a mano.
Algo dentro de ella lo sentía, al mirar a la rubia a los ojos un impulso de estar las cerca de ella la invadió. Lentamente comenzó a acercarse, sintiendo la calidez del cuerpo de la contraria, tomo sus frías manos y las coloco en sus mejillas haciendo que un escalofrío la recorriera.
- Tienes unos labios muy bonitos.-Confeso aún mirando fijamente los ojos de la contraria.
- Gracias. -Exlcamo la rubia intentando no tartamudear, su corazón latía con vehemencia, estaba por darle un paro cardíaco tal vez.
Sus rostros se acercaban cada vez más y más, hasta el punto de sentir la respiración de la otra. En un abrir y cerrar de ojos sus labios estaban tocándose, en un ligero y tierno beso con sabor a dulce, pues era lo último que habían comido minutos antes.
Sus labios se movían a un ritmo lento, dejándolas disfrutar de la cercanía de la otra y del calor que emanaban.Se separaron al sentir que el aire comenzaba a faltar en sus pulmones, con una sonrisa y las mejillas sonrosadas.
- Es un poco tarde, debemos ir a casa. -Propuso la rubia, rompiendo todo aquel ambiente romántico que se había formado.
- Ah, si, claro. - La pelinegra tomo sus cosas, para después comenzar a caminar junto a la rubia.
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𝐅𝐥𝐨𝐰𝐞𝐫𝐬 𝐅𝐨𝐫 𝐘𝐨𝐮 ! ♡|| 𝐂𝐡𝐚𝐞𝐋𝐢𝐬𝐚
Teen Fiction♡Lisa es alérgica a las flores, sin embargo las ama y desea tener muchas de ellas sin importar su alergia. Rosé al saber de sus alergias y su amor por las flores decide hacer flores de papel ella misma, dejándolas en el casillero de Lisa acompañada...