Ternura cruel [USA x All]

51.

Había tomado varias pastillas para manejar su celo, pero no funcionaban. No podía mentirse a sí mismo. USA estaba consciente de lo difícil que sería el primer celo después del vínculo... Ya lo había vivido antes
Pero esta vez era diferente
El celo después del lazo era intenso y asfixiante, su alfa vinculado correspondía con energía para tenerlo tranquilo y se debía tomar al menos tres días en privado... Tal vez más. En su memoria guarda la sensación ardiente de la piel sensible y de la satisfacción que era ser mordido y besado por doquier

—Deja de pensar en eso. Deja de pensar!

Se refugiaba debajo de sus sábanas y se encogía de forma fetal. No quería recordar a su ex en ese momento... Lo que quería era centrar su mente en controlar su cuerpo.
Pero ni siquiera pensaba en su ex
Ni siquiera recordaba quién era su ex
Solo saboreaba imágenes distorsionadas de México y disfrutaba de la agradable calidez que le brindaba el lazo. Deseaba fervientemente que México estuviera ahí .. a su lado... En su celo... Porque era su alfa

—Le vas a dar problemas. No pienses en eso... —se recriminaba—. Tú puedes superar este celo solo, USA. Si lo superas, el siguiente será más sencillo y la medicina ayudará

Intentó dormir, intentó con un baño de agua fría, intentó meditar, intentó masticar hielo, intentó ver una película. Pero era obvio que nada de eso iba a funcionar

—Ay no

Su cuerpo caliente no se calmaba. Su entrada estaba escurriendo lubricante en preparación para ser tomado con fuerza por su alfa. Su mente solo podía materializar la sonrisa de México, el movimiento de su manzana de Adán al hablar, esos dedos rasposos que le acariciaban la mejilla.

Lo deseaba tanto

—No quiero enviarle sensaciones por el lazo... Pero ya no lo soporto

Se levantó tembloroso hacia su armario y se escabulló hasta una esquina donde escondía un acceso secreto a sus... Juguetes
Necesitaba bajarse el calor un poquito. Solo un poquito. Abrió la caja y miró aquello como su salvación. Usaría un par de vibradores para calmar su cuerpo.

—Lo intenté... Lo siento Mex... Solo no te des cuenta, por favor, que de verdad el vínculo no te envíe estas sensaciones desesperantes

Suplicó antes de llevar sus cosas cerca de su cama mientras empezaba a quitarse la ropa. Ya no soportaba el calor