•Mi hermosa casualidad• [Blas Polidori]

Capítulo III

•Novata•

→Nuestros protagonistas—dijo Tim para aplaudir todos— Mackenzi levantate por favor y ambos venga por aquí— dijo Tim.

Ambos hicieron caso a lo que dijo el director, una vez parados frente a todos Tim los tenía abrazados por los hombros a ambos.

—Jóvenes revelación que estoy seguro que de la mano de ellos y ustedes lograremos que esta producción sea un éxito— dijo Tim.

Todos volvieron a aplaudir, Tim los soltó y ambos vieron como avanzó un poco más adelante de ellos y justo ambos cruzaron miradas.

—Que el festín comience— dijo Tim para ver como servían la comida.

Ambos chicos volvieron a sus asientos y empezaron a dialogar entre todos, la comida y el tiempo eran la mejor combinación junto a la música de fondo y las risas, la gente se contaba sus experiencias o que era de su vida.

Convivir, eso era, pues al final de cuentas todos trabajarían juntos.

—Dale gila comé un poco más— dijo Ariana.

Mackenzi estaba tan metida en sus pensamientos que apenas tocaba la comida.

—¿Vos eres nueva no? —dijo Ariana nuevamente.

—Solo trabajé en talleres de teatro— dijo ella.

—A bue' eres nuevecita a la pantalla grande—dijo ella.

—¿Y tú? — dijo Mack.

—Una que otra peliculilla— dijo metiendo un trozo de carne a su boca.

—Aprenderé un poco de ti— dijo.

—Pará pará, aún no soy tan experta, en lo que pueda ayudaré, tampoco es que ayude a la que me quiere quitar a mi marido—dijo riendo en referencia a sus personajes.

Era cierto, Victoria iba a actuar de la esposa de Victor.

Hablando de Victor, Blas se encontraba dando miradas de reojo a ambas chicas como si estuviera pendiente a su conversación.

—Blas eh— dijo Ariana—un pibe medio gil pero buen actor— dijo.

—Salió en la producción de Bayona— dijo Mack.

—Si, es más Tim no hizo casting para Victor, solo eligió a Blas—dijo ella.

—¿Lo conoces?—dijo.

—No, es fácil de saber cuando el mismo Blas pidió el papel en una entrevista de Ping pong—dijo ella.

—¿Enserio?— dijo.

—No te jodo mamichula, Blas pidió ser Victor y aquí esta— dijo.

¿Enserio? ¿así de fácil?.