18: Cena Familiar

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Daylight (Taylor Swift)

Zoé 🌷

Ha pasado una semana desde aquella fiesta. Esta semana he estado distanciada de Jake, necesitaba ordenar las ideas. Darme cuenta de mis sentimientos y por supuesto tiempo conmigo misma. Siempre es importante cuidarte a ti.

Y todo este tiempo lo he dedicado a mi misma. Sorprendentemente ya no me da tanto miedo enamorarme. Digamos que hablar conmigo ayuda muchísimo en la reflexión. Y sé que no debo tener miedo. Ya no. No por Jake.

Mi mala experiencia pasada con Jasón me dejo con ese terror de enamorarme. Y ese rubio ni siquiera tiene la culpa. Yo fui la que me ilusione. Pero ahora ya no soy yo la única que siente algo por otro. Jake me dejo más que claro que me ama.

Me... ama. Joder, es tan bonito recordar la manera en que esa palabra salió de sus labios. Y a la vez es tan bonito saber que tú también compartes ese sentimiento.

Mamá y papá me dijeron que querían tener una cena conmigo y con Jake. ¿Por qué no también con Jasón? Ni idea. Ya tuvieron una cena con él. Pero igual me parece extremadamente extraño. Para eso necesito decirle a Jake si quiere y puede ir.

Lo que cortaria el distanciamiento, perfecto. Una excusa para volver a acercarme a él. Toque con cautelo la puerta. Y Jake la abrió, baje la mirada y me di cuenta que no tenía camisa. ¡Solo tenía una maldita toalla enrollada en su cadera! Observe sin disimulo sus abdominales.

No era la primera vez que lo veía sin camisa. ¡No lo malpiensen! Pero sí era la primera vez que miraba todo sin disimulo. Conte los "cuadritos" ¿tenía seis u ocho?

No importa, lo que importa es que tiene. Al subir mi cabeza Jake me miraba burlón. Su cabello también estaba mojado. Si de por si es guapo. No digamos en este momento.

-¿Necesitas algo? ¿O solo deseabas verme sin camisa, tulipán?

Trago saliva y niego.

-Eh... ¿puedo pasar?

-Por supuesto -dijo con una sonrisa.

Entre y me senté en la cama. Él se quedó apoyado en la puerta.

-Ejem... l-lo que te q-quería decir es...

Es imposible hablar con él cuando esta semidesnudo.

-¿No te cambiaras? -cuestioné.

-¿Eso quieres?

-No.

Abri los ojos de par en par al notar lo que había dicho. Y Jake solo se reía.

-Tranquila, tulipán, me cambiaré.

Suspiré, aliviada. Jake se fue y entro a su clase, cerrando la puerta. Esperé ahí unos minutos hasta que Jake por fin salió y se sentó al lado de mi.

-Ahora sí, continúa Zoé.

Asentí.

-Mis padres te han invitado a una cena. ¿Quieres ir?

-Por supuesto.

Le sonreí, me acerqué a él queriendo besarlo, pero él se alejó.

-¿No pensaras que todos esta perfecto? Me has ignorado, Zoé.

-Pensé que lo habías entendido, Jake.

Negó. Resople, me puse de pie y me dirigí hacia la puerta. La abri pero sentí una mano sujetando mi muñeca. Y sentí unos labios presionando los míos. Cerre los ojos y pasé mis brazos por su cuello -como siempre-, y el en mi mejilla.

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