¿QUIÉN ERES? [INCOMPLETA]

PRÓLOGO

- ¡NO, NO, NO, NO, NO! ¡Déjame en paz!, no te he hecho nada ¿vale? - gritaba entre sollozos y lágrimas- No sé quiénes sois, así que por favor dejarme en paz

‹‹Diego››, ‹‹Culpable››, ‹‹Tú tienes la culpa››, ‹‹¿Por qué lo hiciste?››, ‹‹Vas a pagar por ello››

Era extraño, esas voces, no me sonaban, así que no creía que las hubiera escuchado antes, por lo que no les había podido hacer nada. Además, yo no soy un chico malo, soy más un buenecito, estudioso y un poco "antisocial". Pero tenía que pensar, ¿dónde estaba? quizás alguien me hubiera secuestrado o simplemente estuviera soñando, aunque esto último lo dudaba, lo comprobé, tal y como lo había visto en series y películas, me pellizqué el brazo y después me pegué dos tortas en la cara,

- ¡au! -exclamé, poco después me di cuenta del tremendo error que había cometido al gritar, y me tapé la boca con las mano, como si eso hiciera algo, ¡sí ya había gritado!

Sólo había una cosa que tenía clara de todo esto, estaba despierto cien por cien comprobado, y además dolorido, todo por la tontería esta de la tele, con las veces que me han dicho que no hay que fiarse de lo que ves. Así que la primera idea me aterraba bastante, pero es la más realista, era eso o que me estaba volviendo loco, aunque eso no lo creía.

‹‹¡Pum!›› un ruido se oyó de repente, era una puerta que se estaba abriendo lentamente, tenía realmente mucho miedo, y eso que soy considerada una persona fuerte.

----------------------------------------------------------------------------------------------------------

EL DÍA ANTERIOR:

Yo estaba hablando tranquilamente con mi amigo Jorge, mientras dábamos una vuelta por las calles cercanas a mí casa, por la plaza del Pilar.

- ¿Viste el partido de anoche? -pregunté alegre por poder salir de casa y estar con uno de mis amigos, ya que hasta entonces había estado inundado de exámenes que me habían impedido realizar cualquier actividad que no estuviera relacionada con los estudios.

- Sí, joder, ¡así cualquiera gana! -dijo Jorge enfadado, pues había perdido su equipo favorito.

- Jorge, no pasa nada, a veces se gana y otras se pierde -dije bastante pacífico, pues había notado a Jorge demasiado tenso.

- Ya..., ¡pero es que todo es culpa del árbitro! Era totalmente comprado, seguro que le habían pagado para que les diera la Víctoria -dijo Jorge, y nada más decir esto me miro fijamente y empezó a reírse -¡Claro! Lo dices tú, que te tragas todos los partidos que puedes.

La verdad es que lo más importante en mi vida es la lectura, los estudios, los videojuegos y sobretodo ¡los partidos!, me dan absolutamente igual si son de fútbol, como si son de ajedrez, no me pierdo ni uno. Eso es lo que en parte me hace en parte... "antisocial", ya que no tengo mucho tiempo libre, bueno a quien quiero engañar, no tengo nada de tiempo libre, que no esté ocupado por mis múltiples aficiones, pero la verdad, me da igual. A ver, tengo amigos, pero no muy abundantes, aunque eso no me preocupa.

- Ya me conoces, así soy yo -respondí con un gesto inocente, mientras acompañaba a las carcajadas de su amigo.

- ¿Quedamos mañana para ver el "clásico" Barça vs Madrid? - Preguntó mi amigo, que aún seguía riéndose.

Es curioso, la gente suele estar emocionada con este partido porque la mayoría de las personas son de uno de estos dos equipos, sin embargo, yo soy diferente, no soy de ningún equipo en especial, me da igual quien gane, lo único que me importa es el juego, nada más.

- Por supues... - un ruido sonó fuertemente, y eso hizo que me callara por unos instantes - ¿Has oído eso?

- ¿El qué? - preguntó asustado

No podía creer lo que lo que pasaba, ¿por qué Jorge no lo oyó?, ¿me estaría mintiendo?, bueno, supongo no, que sería una tontería sin importancia, aunque no lo recuerdo bien, pues lo último que oí fue la respuesta de mi amigo. Después todo a mí alrededor se volvió negro, y un silencio envolvió mi memoria.