AmO sEr Tu mAsOquistA // Errorink

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Ink regresó al empleo. Se veía físicamente mejor y más activo. Esto daba buenas señales para todos pero más que nada al jefe, serán mejores números. No obstante, esto también era bueno para Error.

Después de todo, su víctima era quien podía controlar al mustio. Nadie más. Por más que no le agradaba esa idea, debía confiar en él. Si eso significaba que Dream no vaya a la policía, es mejor que no recurra a las amenazas.

Que mejor manera de sobrellevar la situación que aprovechándose de su debilidad: Ink

Eran altas horas de la noche. -¡Dream! ¡Basta!- Ambos habían finalizado su turno nocturno. Mientras Dream se encontraba de camino a casa...o bueno, a la policía, Ink lo perseguía. -¡Por favor! ¡Escúchame! No te preocupes por mi- Seguía gritando tratando de llamar su atención.

Dream rápido volteo a mirarlo. -¿Cómo no quieres que me preocupe? Estás con un maldito criminal- Contestó derrotado y triste. No podía creer que estando con ese azabache hizo que Ink cambiara tan repentinamente. De cierta manera, ya no era el mismo chico que antes. -Todos los días veo tus golpes. Error no solo te amenaza a ti, ahora va conmigo. Esto no es normal- Continuó con su queja.

-Debo reportarlo- Dream estaba por voltear. Hasta que sintió una fuerte presión.

Era Ink, lo tomó de la mano. -¡NO!- El amarillo miraba asustado a las expresiones de ese chico. Realmente se veía traumado, de verdad le tenía miedo ir contra Error. Que horror. -P-Por favor- Habló en bajo suplicándole.

No podía creer que estaba por hacer esto, pero debía. -N-No prefieres...¿salir a un café c-conmigo?- Preguntó nervioso y sonrojado. El de amarillo por su parte también se sonrojó. Era raro verlo así de avergonzado, le parecía muy adorable. Carajo, a veces pensaba que lo hacía a propósito.

Igual no le podía decir que no a esos bellos ojos. La policía podrá esperar un día.

Lo terrorífico es que esto perduró unos días. Error era un maestro en utilizar debilidades.