MEMORIAS LEJANAS

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Aun así,no aparté de mi mente aquel inquietante recuerdo.Continué con mi rutina diaria de todos los días;con la excepción de que no iba ir al instituto.
Con añoranza,recordé las palabras de Sean : "Te echaré mucho de menos..."
Ojalá hubiese podido ir a verlo una última vez...
Bueno,pero las cosas suceden por algo ¿no?.Al menos me había dejado un buen último recuerdo.Fantaseé sobre lo que podría pasar en el futuro.
El futuro.Para mí es incierto y esperanzador:incierto porque lo desconozco y esperanzador porque,de algún modo me da esperanza.
La esperanza tiene dos caras: la buena y la mala.Aunque todo el mundo piense que la esperanza es buena,en realidad no del todo.Te ayuda que en una situación tengas fe y sigas adelanta,pero también en otras circunstancias te da falsas esperanzas.Es confuso.

Me pasé el resto del día leyendo,dibujando y buscando que hacer para pasar el rato entretenida.Cuando ya era casi de noche y mis padres ya estaban durmiendo,sonó mi teléfono.Cuando contesté,oí una dulce melodía procedente de una flauta.La melodía duró unos cinco minutos.
Cuando se acabó,oí una voz ligera como el viento diciendo:"Te estoy vigilando...Todavía no ha acabado...Tienes que volver...Te necesitamos...Vuelve...No tenemos mucho tiempo...Estas en peligro..."

Colgué el teléfono.Un escalofrío subió por toda mi espalda.Me estaba volviendo loca.Noté una especie de calor que procedía de mi frente.Justo en el centro.Me dirigí hacia mi espejo,que mi padre había colocado al lado de mi armario.Cuando me ví reflejada,no daba crédito a lo que veía:una luz violeta atravesaba mi piel, y sin saber como,provocaba figuras difusas e increíbles.En ella aperecían misteriosamente,siluetas de duendes,elfos,hadas,sirenas,pegasos y unicornios.Estaba totalmente asombrada.No había visto nada tan mágico en toda mi vida.
Estaba tan agusto que,por un segundo,casi me duermo.Menos mal que me despertó una visión.

En ella se veía claramente un bosque.Pero no era un bosque normal y corriente como todos los demás.Pequeñas hadas y elfos bailaban alrededor de una hoguera violeta.Canturreaban una canción en una lengua prohibida.
Al parecer,estaban haciendo un ritual para invocar a su soberana,La Señora de los Espejos.Su próposito era invocar a su reina para que los sacara de la esclavitud a la que estaban sometidos desde que Los Salpicados habían invadido su territorio.Se les llamaba así a estas criaturas (eran identicos a los humanos excepto por esos majestuosos tatuajes color azabache hechos de un mineral extraño que sólo se encontraba de donde procedían.Sólo en sus reuniones importantes o fiestas,sus tatuajes estaban mezclados con polvo de diamantes o pequeños pigmentos de malaquita,turquesa o cualquier otra piedra preciosa) porque según comentaban algunos,hace milenios su sangre fue salpicada con la de un demonio.De aquellas, Los Salpicados lucían sus tatuajes,pero la deferencia era que en aquellos tiempos era blancos,simbolizando pureza.Su jefe de la tribu se llamaba Fordet.Fordet era muy avaricioso y quería cuanto podía y más.Un día se enteró que cerca de las colinas de Hurem se alzaba una poderosa cueva llena de piedras preciosas,oro, plata y muchas otras cosas.Estaba tan sorprendido que no dudó ni un instante en reclutar a sus mejores hombres para apoderarse de aquella cueva.El único problema que había,era que estaba custodiado por grandes y terrorificos grifos y dragones.Pero la avaricia lo dejó ciego,y cuando se dió cuenta,ya había perdido a todos sus guerreros,y su tribu estaba llena de mujeres.
Sintiendo la fuerte necesidad de conseguir la cueva,realizó un trato con Umnio,el ser maligno que habitaba en los profundidas,oculto de civilización,de donde salía de vez en cuando para devorar sus almas.El trato era el siguiente:Umnio le daría la fuerza para aniquilar a los monstruos y apoderarse de la cueva,pero si algo salía mal, el y todos sus súbditos,le darían su alma a él. Fordet sin dudarlo,aceptó.Cuando llegó a la cueva,luchó contra las bestias,y cuando ya había acabado con todos los grifos y dragones,salió el ser más espeluznante que había visto en su vida:Un lobo gigante color sangre que presentaba en su cuello un collar con cabezas.
Fordet luchó contra él,pero el animal le cuadruplaba el tamaño así que su fuerza también,sus esfuerzos no valieron la pena;perdió un brazo y una pierna.Cuando volvío a la tribu,Umnio lo esperaba. Fordet se echó a llorar y le suplicó que los mantuviera a él y a su tribu con vida.Umnio tomó una decisión:«Un juramento es un juramento,lo prometiste frente a mí,y gracias a eso sellaste tu sangre con mi nombre.Tu serás mío quieras o no maldito enjendro.Tu tribu no se merece morir por algo como tú.Ellos a cambio tendrán que rendirme homenaje para siempre.Sus tatuajes se volverán negro azabache,color de mi sangre.Así recordarán quién es su legítimo amo y señor.Si alguien osa negarse,perecerá de la más cruel y dolorosa manera.Derramaré una gota de mi sangre en la suya así podré controlaros desde donde quiera.Quedareís unidos a mí hasta que el último de vuestra tribu muera».Esas fueron las últimas palabras de Umnio antes de que se fuera con Fordet a las profundidades.

De la hoguera salio un rostro translúcido.Era una mujer de tez platina.Sus ojos celestes combinaban con sus labios, también celestes.Su pelo blanco como el papel y ligero como una pluma flotaba alrededor de las llamas.
Era La Señora de los Espejos.De repente,se abalanzó un grupo de jinetes con majestuosos caballos y elegantes tatuajes:eran Los Salpicados.

Se detuvieron en frente de la hoguera para apagarla con palos y gruesos troncos.Cuando acabaron de apaciguar el fuego,se abalanzaron frente a los elfos y hadas;que sollozaban,y con sus armas,espadas instrumentos de tortura y semejante ira, hicieron su trabajo.No quedaba ni un alma cuando de pronto un elfo al que le faltaba media cabeza,las dos piernas,medio brazo,los ojos las orejas y tenía todo el pecho abierto dejando a descubierto sus órganos internos,grito entre las últimas:"¡Ella vendrá del otro mundo para acabar con vosotros,LARGA VIDA A LA CRISTALINA!
Justo cuando acabó,uno de los guerreros le cortó la cabeza.

Cuando desperté de la visión no pude evitar caerme al suelo,abatida.Mis piernas no me respondían y mi cabeza había quedado en estado de shock.
Sabía tantas cosas acerca de ese lugar...
Y aquel elfo.Dijo algo sobre una Cristalina...Había sido muy confuso.Pero de algo si estaba segura,eso no fue una visión, había sido un recuerdo que viví hacia ya mucho tiempo.

Más allá del ríoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora