El Dia Que Mi Mundo Se Detuvo (TERMINADO)

CAPITULO 02

SUS HOYUELOS

VENUS BLOSSOM

Mi primer día de clases fue un desastre por ese chico idiota, ¿en serio me dijo ciega en mi cara? Cada vez que lo recuerdo me dan ganas de darle golpe en la cara, para ver si así se le quita lo idiota.

—Venus—escucho mi nombre—Venus...

—¡Ah! ¿Si? ¿Que me decías? —digo saliendo de mi mundo —¿Que te pasa? ¿Estás en tu vieja astral o que? —dice mi hermano frente al mesón de la cocina.

—Si, como sea. ¿Que me decías?

—Que vas a llegar tarde —me dice a lo que reacciono en seguida por su comentario. Okey segundo día de clases y al parecer llegaré tarde, en estos momentos le estoy rezando a los dioses para que eso no pase.

—Mierda! —digo levantándome del taburete lo más rápido e ir a mi habitación para ir por mis cosas.

Y así como subí así mismo baje hasta salir de la casa donde ya hacía Asher con su auto afuera de el listo para llevarme.

—Vamos —digo entrando al auto a lo que el se da la vuelta para hacer lo mismo —Que agresividad —dice con un tono gracioso a lo que pone el auto en marcha, yo solo espero y no llegar tarde asi que por favor Afrodita no me decepciones. El trayecto no es tan lejos pero pareciera que el tiempo no está de mi lado.

—Llegamos —habla mi hermano estacionado ya en la universidad —Ya era hora —digo desabrochando el cinturón.

—Que no te pase lo de ayer —escucho decir, cuál comentario hace que ponga mala cara. A lo que bajo del auto azotando la puerta.

—¡Ten un buen día! —lo escucho gritar haciendo llamar la atención de todos los presentes.

A pasos rápidos rezando a la vez a los dioses para llegar rápido a clases y la primera clase es de contabilidad y también espero no cruzarme con ese vampiro porque si, tiene la piel como vampiro o mejor dicho como la droga esa blanca como es que de llama...? Así a la cocaína, okey me pase de la raya.

«Estas loca hermana», dice mi subconsciente.

—Tienes razón —respondo con una risita mientras a pasos no tan rápido en busca de mi salón y si aún me duele mi tobillo.

—Aparte de ciega, también loca —me quedé quieta deteniendo mis pasos y cerrando mis ojos. Esa voz la reconocía muy por favor traga me tierra y escupe me en corea, esto no me puede estar pasando ¿acaso me echaron agua con sal de en ves de agua bendita? Volteo con mis talones abriendo lentamente mis ojos viéndolo ahí parado mirándome con esos ojos negros que no veo más que oscuridad, lleva unos vaqueros rotos de color negro y un suéter del mismo color y el cabello un poco desordenado.

—¿Te quitas o te quito? —su voz fue que me saco de mis pensamientos —¿Ah? —digo sin entender de lo que está diciendo.

—Que te quites —siempre actúa así—Oye acaso no... -no me dejó terminar cuando pasa por mi lado en casi un empujón.

Acaso no sabe que es tener modales?

—¿Y yo en qué estaba después de todo? —me pregunto yo misma quedándome pensando.

—¡Joder! —recorde que tengo que ir clases, que estúpida soy. Así sin más salgo como loca que se la lleva el diablo subo por unas escaleras, al llegar paro al frente de dos grandes puertas hago un amago para abrirla pero detengo, lo vuelco hacer pero esta vez veo que la puerta se abre sola a lo que veo el chico de ojos negros entrar por ella a lo que yo me quedo viendolo.