El Dia Que Mi Mundo Se Detuvo (TERMINADO)

CAPÍTULO 07

CONFUSIÓN

AXEL

Ya han pasado algunos tres días desde que la rarita pelirroja beso mi mejilla, y desde ese día la e, estado evitando a toda costa, y tampoco he podido dejar de pensar en aquello. Y otra cosa que su acto impulsivo me dejó con escalofríos ya que me tomo por los hombres y medio se empina para besar mi mejilla, y tampoco estoy acostumbrado al contacto físico no me gusta, y no me gustara.

En estos momentos me encuentro en casa de mi padre tal vez se van a preguntar ¿Que haces en casa de tu padre? Sencillo, ayer me llamo eso de 8:20 de la noche para que fuera, ya que iban o van a venir unos ejecutivo o creo que socios de padre. (Se acuerda que tiene hijo cuando le conviene), mi relación con mi padre no es que sea muy buena que digamos, las pocas veces que eh estado en su casa siempre salimos de discusión y yo soy el que sale perdiendo.

—Señor, su padre lo espera abajo —Escucho unas de las tantas empleadas que tiene mi padre.

—En unos minutos bajo —Digo terminando de recoger mis cosas, y así salir de mi antigua habitación. Porque, si no vivo aquí. Mi propio padre me echo, y yo solo vivo en apartamento viviendo una vida "normal" si se puede decir de esa manera.

Bajo las grandes escaleras de las enormes casa, si se pregunta que es mi padre es: un gran empresario y para mi desgracia si o si tengo que estudiarla porque, soy el único que tiene que administrar la empresa.

—¡Hijo mío! —Alaga mi padre un señor ya de 59 años con cabello negro y algunas canas que hacen presencia pero no lo hacen ver viejo. Y un físico que se nota que un poco de ejercicio (no tanto) pero si resalta su porte, se acerca hacia a mi tomándome por el brazo para nada ligero cual acto hace que haga una mueca de dolor.

—Mas te vale y te comportes —Me susurra al tiempo que veo a unos señores más viejos que mi padre, su agarre se hace más fuerte a medida que avanzo hacia ellos.

—Señores, les presento a mi único hijo — dice con una sonrisa falsa, como siempre.

Hipócrita.

—Mucho gustó señor... me llamo Thomas —Habla un señor de algunos 60 años, lo cual no le importa. Es de tes blanca, su cabello ya se ve canoso y la cara ya un poco arrugada por los años.

Dudo unos segundos en aceptar su saludo, si no fuera por mi padre que aún me tiene del brazo haciendo presión para nada ligero.

—Mucho gustó, Axel —Digo dándole la mano.

¿Entonces, que para eso me llamo? Para presentarme a esos idiotas.

—Como ya saben, y por lo que les he comentado. Axel va hacer el próximo  jefe de mi empresa y se va a ser cargo de toda la compañía (STM COMPANY)  así que para que ya vayan sabiendo el trato que se merece.

Dice con su estúpida sonrisa estúpida en su rostro, aparentando lo que no es en realidad.

—Me voy —Digo en su susurro para que el solo escuché, y así me suelta el brazo, que de seguridad debo tener un moretón así, como a pasado en algunas ocasiones.

—Bueno, ya me querido hijo se tiene que ir.

Que arrogante es.

—De seguro tiene buenas notas altas en la universidad —Dice unos de los sujetos que está ahí también, que no se cual es su nombre y tampoco me interesa saber.

—Si, tiene buenas notas, así como yo. Cuando tenía su edad.

Me despido de los señores, y con ganas de partirle a la cara al que sea que se ponga en mi camino me dirijo a la salida tirando la puerta cerrando la de tras mío.