JOHNSON
He funcionado en modo automático desde esa llamada. Es como si de pronto, toda mi atención se hubiese centrado en una sola cosa.
Acabar con Bruno Miller.
No he salido mucho de casa, apenas y he respondido los mensajes de Bea, y no sé en realidad como es que me las he arreglado para no contarle toda la verdad. Porque con cada día que pasa, el peso que tengo sobre mis hombros parece hacerse cada vez más y más grande.
Sé que la única manera de dejar de sentirme de este modo, es hablándole con la verdad. Pero no planeo ceder antes, no planeo darle el gusto a ese cabrón de ver como la única posible relación en mi vida se va a la mierda.
Kyle y yo no hemos hablado mucho, apenas y se cruza conmigo en los pasillos de la empresa, y aunque se siente como la mierda, me alivia el hecho de que él no se esté involucrando demasiado.
He aprendido lo suficiente a lo largo del tiempo como para saber que no necesito a más personas involucradas en mis asuntos, mientras más personas lo sepan, más es el riesgo de cometer errores, y en este punto, no puedo siquiera considerar una equivocación.
Mantengo la atención en la pantalla de la computadora, como si de esa forma pudiese conseguir que el mensaje que llevo horas esperando, al fin llegue.
—¿Se puede saber qué le hiciste? —elevo la mirada cuando la voz de Josh se escucha. Arqueo la ceja, sin saber a lo que se refiere.
—¿De qué hablas ahora?
—Tu hermano —dice dejándose caer en el asiento frente a mí —ha estado siendo el señor del inframundo desde hace días y eso solo ocurre en dos situaciones: O Aria y él están enojados, o tú le hicist algo.
Ruedo los ojos.
—No le hice nada.
Josh entrecierra los ojos.
—Vale, entonces si fuiste tú —se cruza de brazos —teniendo en cuenta que no me has pedido apoyo en nada más, lo estás resolviendo por tu cuenta.
Considero si es buena idea hablar con Josh o no, suelto un suspiro mientras me inclino hacia adelante, después de todo, Josh ha sido de gran ayuda desde que mi pesadilla comenzó otra vez.
—Tuve que hacer un par de llamadas, pero lo estoy resolviendo —regreso mi atención a la pantalla de la computadora —tenías razón, tal vez solo tenía que pedir un par de favores.
Josh entiende de inmediato.
—¿Y qué es lo que planeas hacer?
—Solo hay una forma de acabar con las personas como Ron Collins o Bruno Millers, y esa es cortando el mal de raíz —sonrío —así que creo que deduces que solución hallé.
Josh sacude la cabeza con desaprobación.
—¿Al menos seguirás mi consejo?
Como si su pregunta hubiese invocado la respuesta que espero, un nuevo mensaje aparece.
Sonrío un poco más.
"Bodega 154, North Park. 8:00 pm. No me hagas esperar".
El remitente es un número desconocido, pero no requiero el nombre para saber de quien se trata.
Miro la hora en el reloj, 6:35 pm.
Me incorporo, cierro la computadora y me guardo el teléfono en el bolsillo.
—Eso es justo lo que haré —respondo con una sonrisa —asegúrate de que Kyle no me siga. Ni sus guardias, lo conozco y sé que lo hará.
Josh no tiene tiempo de responder, me marcho con rapidez deseando que esta solución, sea la definitiva.
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Tentación Prohibida
RomanceLibro 2 "Bilogía tentación". Se puede leer sin necesidad de leer el libro anterior. ¿Qué pasa cuando el amor se encuentra al lado de una persona prohibida? Bea y Jonhson en circunstancias normales nunca se hubiesen conocido. Pero ninguno vive con...