EPÍLOGO

6.2K 500 60
                                    

Johnson.

—¡Papá! —el grito atraviesa los pasillos y me hace elevar la mirada.

Sonrío de medio lado, empezando la cuenta regresiva en mi mente.

Cinco, cuatro, tres, dos, uno...

—¡Papá! —me incorporo del asiento, me ajusto el saco y me aparto del escritorio justo cuando la puerta se abre y Thiago aparece corriendo.

Me inclino, recibiéndolo en brazos.

—¡Feliz cumpleaños! —dice con emoción abrazándose a mi cuello.

—Gracias, campeón —dejo un beso en su mejilla y le revuelvo el cabello —¿has venido solo?

—Claro que no —Bea aparece, sostiene un pastel en sus manos y una serie de globos de "feliz cumpleaños" en el otro —Feliz cumpleaños, cielo.

Se acerca, sostengo a Thiago con un brazo mientras Bea se aproxima y llega hasta que la tengo a un par de pasos de distancia. Extiendo el brazo rodeándole la cintura y me inclino para dejar un corto beso sobre sus labios.

—Su presencia ha mejorado mi día por completo —admito con una sonrisa —¿es pastel de chocolate?

—Tu favorito —dice Thiago —¿verdad que sí?

—¿Cómo lo adivinaste? —inquiero empleando un tono de sorpresa que lo hace reír.

—Porque también es mi favorito —dice y parece orgulloso de su respuesta.

Bea y yo reímos, lo dejo en el suelo y me fijo que el pastel que Bea trae en manos tiene una pequeña vela encendida. Miro a Thiago, luego a mi esposa y ambos parecen entusiasmados en que sople.

Así que lo hago, me inclino levemente y soplo. El diminuto fuego se apaga, y Thiago chilla emocionado.

—¡Comamos pastel! —dice.

—De acuerdo, llamaré para que nos traigan platos y cubiertos...

—Oh, venimos bien preparados —arqueo la ceja cuando Bea saca los cubiertos y tres pequeños platos.

—Me pregunto como pasaste los filtros de seguridad con ese cuchillo.

Ella se ríe.

—Soy socia, esposa de uno de los socios y cuñada del director de la empresa, ¿crees que alguien me impediría pasar? —cuestiona.

No tengo ninguna objeción contra eso, así que Bea se encarga de cortar el pastel en rebanadas para que podamos disfrutarlo.

Mientras ellos están aquí, me permito olvidarme del trabajo. Lo cierto es que desde la muerte de mi padre, mis cumpleaños no fueron tan importantes. Quiero decir, tenía cosas más importantes que festejar un cumpleaños que en realidad no merecía la pena celebrar.

Pero desde que Bea llegó a mi vida, muchas cosas han cambiado. Hoy es el primer cumpleaños que celebramos como esposos, y sin duda, ha conseguido que recupere el gusto por ellos.

Ellos se quedan un par de horas, Thiago está encantado con estar en la oficina, y lo llevo a dar un recorrido para calmar su insistencia. Bea viene con nosotros aunque es evidente que ya se sabe de memoria cada pasillo.

Luego, dicen que se tienen que ir así que me obligo a despedirme de ellos y cuando se han marchado, me concentro de nuevo en el trabajo. Pero no puedo hacer mucho porque Kiara viene entonces con un obsequio, y luego la voz se corre y tengo a la mayoría de empleados tocando a mi puerta para desear un feliz cumpleaños.

Kyle tuvo reuniones con clientes fuera de la ciudad así que me toca el ocuparme de la mayoría de los pendientes así que son cerca de las siete cuando regreso a casa.

Tentación ProhibidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora