La lluvia golpeaba implacablemente contra el parabrisas del coche de Charles Leclerc mientras conducía por las tortuosas carreteras de Mónaco. Sus pensamientos estaban en Ava, el amor de su adolescencia, y en el hijo que nunca conoció.
La idea de que pudiera tener un hijo lo atormentaba día y noche desde que se enteró de la noticia hace unos meses. Después de años de evitar enfrentarse a su pasado, finalmente había decidido buscar a Ava y a su hijo.
Ava, una chica dulce y gentil, había sido su primer amor. Se conocieron en la escuela secundaria de Mónaco y rápidamente se enamoraron. Pasaron días enteros juntos, explorando las calles de Mónaco y soñando con un futuro juntos. Pero todo eso cambió cuando Ava quedó embarazada.
Al principio, Charles estaba emocionado con la idea de ser padre. Pero cuando la realidad de la situación se hundió, entró en pánico. Apenas tenía 18 años y su carrera como piloto de carreras apenas estaba despegando. No estaba listo para ser padre, y el miedo lo hizo actuar de manera impulsiva.
Una noche, después de una discusión acalorada, Charles abandonó a Ava y se fue. La dejó sola, sin apoyo y con un futuro incierto por delante. Se sintió abrumada y desamparada, y finalmente tomó la dolorosa decisión de mudarse lejos de Mónaco, lejos de Charles y comenzar una nueva vida.
Mientras conducía por las estrechas calles de Mónaco, Charles recordaba el día en que Ava le dijo que estaba embarazada. Fue un shock para él, pero en lugar de enfrentar la situación con valentía y responsabilidad, huyó. Ahora, años después, se arrepentía de su decisión y estaba decidido a hacer las paces con Ava y su hijo.
Después de horas de conducción, finalmente llegó a Italia, el lugar donde había oído que Ava y su hijo estaban viviendo. Mientras se acercaba a la pequeña ciudad costera donde creció Ava, una mezcla de nerviosismo y anticipación lo invadió.
Al llegar a la ciudad, Charles se encontró con calles adoquinadas y edificios pintorescos que bordeaban el mar. La belleza de la ciudad contrastaba con la tormenta de emociones que sentía en su interior. Sin perder tiempo, se dirigió al pequeño apartamento donde se suponía que vivía Ava.
Al llegar, tocó la puerta con manos temblorosas, su corazón latiendo con fuerza en su pecho. Después de un momento de espera angustioso, la puerta se abrió lentamente, revelando a Ava parada frente a él, con una expresión de sorpresa y confusión en su rostro.
—Charles— murmuró, su voz apenas un susurro. —¿Qué estás haciendo aquí?.—
Charles se sintió abrumado por la presencia de Ava, su belleza y gracia lo dejaron sin aliento.
—Ava, necesito hablar contigo— dijo con voz firme, aunque su corazón latía con nerviosismo. —Hay algo que necesito decirte—
Ava lo miró con cautela, sus ojos buscando respuestas en los suyos.
—¿Qué pasa, Charles? ¿Por qué estás aquí después de todo este tiempo?.—
Charles respiró hondo, reuniendo el coraje para decir las palabras que había estado ensayando en su mente durante semanas.
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Formula 1 - One Shots
FanfictionPequeñas historias con pilotos de F1 para poder imaginarnos una vida a su lado que no podemos tener. -espero que les guste y disculpen si encuentran faltas de ortografía, es mi primera vez escribiendo historias :)- *Toda imagen que utilice le doy cr...