14

852 192 93
                                    

N/A:
Crazy, el final se viene.
150 votos y seguimos con esto.

Soñar siempre nos ayuda a mantener los pies sobre la tierra, nos ayuda a tener esperanzas en el futuro y así me sentía yo mientras intentaba pensar todos los escenarios donde JooHyun y yo podíamos mantener una vida tranquila lejos de esa asquerosa sociedad que nos reprimía cada vez más. JooHyun no parecía pensar mucho en las consecuencias de tener una relación lésbica o quizá no le importaba en lo absoluto porque vivió toda su vida sin seguir leyes, órdenes ni estereotipos, estaba muy adelantada para la época en la que vivía.

Yo nunca comprendí como algo tan puro como el amor de dos personas podría ser algo malo, ser algo digno de odiar o guardar en un closet como la ropa vieja que uno no quiere volver a usar por el miedo al qué dirán. De igual forma, comprendo su punto; cuando vi a JooHyun, mi mayor miedo no era enamorarme en sí, sino enamorarme específicamente de una mujer porque siempre nos habían enseñado que eso estaba mal.

Llevaba casi cinco meses viéndome a escondidas con JooHyun, casi todas las noches ella venía y pasaba por la iglesia hasta llegar a mi dormitorio para dormir conmigo o simplemente charlar, charlar de nada con alguien que significaba todo para mí. A veces las risas eran tan intensas que teníamos que tapar nuestras bocas o simplemente callarnos con un beso. Hablábamos bajo y con calma, siempre me aseguraba que la puerta estuviera con llave y ponía una toalla bajo la misma. Demasiado crédula e inocente para pensar que aquello podía funcionar.

El padre JumSeok se iría a Italia al día siguiente, finalmente se había rendido y entendió que mi destino no estaba allí en Europa, yo pertenecía aquí y la madre superiora también apoyó la idea y fue quien realmente lo convenció de que se retire por su cuenta.

ㅡ ¿Entonces nunca quisieron adoptarte? ¿Ninguna familia se interesó en ti? Seguramente eras adorable de pequeña, ¿Quién se resistiría a esos ojos diminutos? ㅡ Sonreí y ella jugaba con mis manos, acariciando, tocando, recorriendo mis huellas con cariño.ㅡ ¿Nunca nadie lo intentó?

ㅡ Un par de familias, pero jamás se concretó, no entendí mucho el papeleo, pero siempre adoptaban a otro niño. Da igual, no la pasé mal, la madre superiora siempre cuidó de mí. ㅡ Lo conté como si fuera lo más insignificante, pero cuando era pequeña me afectó más de lo que debería, lloraba hasta dormirme, preguntándome por qué esos niños y no yo. ㅡ Supongo que por algo fue, ¿no? No nos hubiésemos conocido.

ㅡ Oh, SeulGi. Yo creo que nos hubiésemos conocido de todos modos aunque vivieras del otro lado del mundo. ㅡ Se acercó a besarme, era dulce y tranquilo, pero mi corazón se aceleraba cada vez que sus labios rozaban los míos. ㅡ Nosotras estamos destinadas a tener la mejor historia de amor jamás contada.

Era inexplicable la paz que invadía mi interior con una sola palabra suya o un simple gesto que provenía de ella, estaba completamente, locamente y perdidamente enamorada de JooHyun. Sabía que ella estaba enamorada de mí también, la forma en la que sus ojos brillaban más que un cielo estrellado de verano cuando me veía era la única prueba que necesitaba para confirmar que le pasaba lo mismo que a mí.

ㅡ Miro hacia atrás y después de todo, tú eres lo único bueno que me ha pasado en esta vida. ㅡ Contaba ella mientras yo entrelazaba nuestros dedos. Compartíamos una manta, una cama y un mismo sentimiento. Sus piernas se enredaban con las mías bajo las sábanas. ㅡ Quiero pasar el resto de mis días contigo. Tener una casa lejos de la ciudad, ambas podemos conseguir un buen empleo, cosechar y hasta tener una familia.

Nuevamente volvía el tema de huir juntas, lejos de las atrocidades de la gran ciudad, la religión y la vida galante que ella llevaba desde hace mucho tiempo. Tener hijos era difícil, más en ese tiempo porque era imposible pensar que dos mujeres podían criar a un niño siendo pareja. En realidad era imposible pensar que dos mujeres podían ser pareja y quererse tanto como un hombre y una mujer.

𝐑𝐄𝐋𝐈𝐆𝐈𝐎𝐍Donde viven las historias. Descúbrelo ahora