Like a honey to your heart

Cute cuddly boy

Harry es un chico popular que ama ser el centro de atención, y amaría aún más tener la atención de un novio, cosa que no tiene, pero tal vez esto cambie cuando Louis adelante un nivel debido a las altas calificaciones que tiene, compartiendo así la mayoría de sus clases.

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Harry podría decir que fue el centro de atención desde siempre, porque así era y siempre ha sido así. Y le gustaba serlo a pesar de sólo quedarse sentado ahí luciendo serio y desinteresado por todo.

Esto creció en cuanto él también...bueno, creció.

Y las chicas empezaron a coquetear con él usualmente los halagos iban algo así "lindos ojos" "tiernos hoyuelos" "sedosos rizos". A Harry le gustaba cuidar su piel y que su cabello siempre oliera de un aroma fragante y frutal, que su perfume fuese suave, pero cautivador, que sus labios se vieran pomposos y brillantes.

Harry es popular, pero siempre odió el fútbol o cualquier tipo de deporte que no fuese el golf, el baile o el boxeo.

Tres deportes bastante distintos, pero muy poco usuales en los gustos de alguna persona común, casi siempre a las personas les gusta el fútbol, el básquetbol y una que otra persona, la natación.

Así que no verías jamás a Harry en ese tipo de lugares, las chicas lo sabían. Otro punto para Harry. Se veía sensual y maduro, nada bruto y lo suficientemente inteligente lo que cabía en sacarse buenas calificaciones, pero no siempre perfectas o en saber cuando una chica decía alguna indirecta y ella no debía estar intentando que captase la idea.

Harry no entendía algo, no entendía el hecho de simplemente que al "existir" las chicas pidieran su número o le pidieran una cita.

Y eso subía un poco su egocentrismo, pero había algo.

Últimamente ha estado teniendo un serio problema con su cuerpo a decir verdad.

No, no se sentía subido de peso o bajo peso. Había mantenido su cuerpo, después de todo le encantaba practicar baile al llegar de sus clases.

Y no, no eran los pequeños granos que le salían por ser aún un adolescente.

Sino que...habían comenzado a crecer.

Mucho.

Y demasiado rápido.

Gemma se reía de él y su madre se preocupaba más por ese hecho, porque dios santo, él no tomaba ningún medicamento más que cuando se sentía enfermo o cuando tenía alguna reacción alérgica.

Pero sus pezones, comenzaron a crecer sin razón alguna, lo preocupaba sinceramente. Pero creía que si lo aprendía a manejar, amaría este nuevo cambio.

De hecho tenía una hora al médico esa tarde, por si había algo raro en él.

Porque bueno, dolían. No sabía si era porque estaban creciendo o porque sus hormonas estaban haciendo algo raro con su cuerpo.

Las sudaderas escondían un poco lo crecido que estaba su pecho y se sentía aún más avergonzado porque estaba usando una prenda sobre ellos la cuál usualmente era para mujeres.

Y bueno se sentía raro...ser inseguro, no sabía cómo sentirse al respecto.

–Bueno, hoy tenemos un nuevo integrante a nuestra clase. Él adelantó un año por sus buenas calificaciones— —

–Es decir que es un nerd –interrumpió el idiota del salón haciendo reír a los demás, porque bueno él pensaba que se reían con él no de él.

–Jacob, silencio –regañó la profesora.