𝐌𝐢 𝐩𝐥𝐚𝐧𝐞𝐭𝐚 [ tierra x luna ]

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Un trato mucho mejor a ojos de todos.

Marte y Venus al ver a Tierra tan feliz conversando con las lunas de Marte se sintieron tan felices, de verdad estaba cambiando un cien por ciento pero más grande era la sonrisa que tenía Luna.

—Nunca pensé en ver esto. En serio es tan agradable tener este ambiente después de tanto caos —dijo Marte, estando lado a lado de Venus.

—Yo estoy feliz de verte finalmente en buenos términos con la Tierra. Se que es tu amigo y, todo eso —dijo Venus pero sonaba un poco molesto con lo último, lo que causó una sonrisa burlona en Marte.

—¿La diosa de la belleza está celosa de que el dios de la guerra se vaya con Terra?

—Callate estupido.

Las risas de Marte llegaron a los oídos de Venus quien ya estaba bastante rojo, las lunas de Marte llegaron muy felices con unas cartas muy diferentes a las de siempre, Fobos y Deimos les mostraron esas cartas a ambos planetas.

—¡Señor Venus, Marte! ¡Miren que el señor Tierra dijo que estas cartas eran más divertidas! —gritaba muy feliz Deimos.

—¡Vea señor Venus! Juguemos un día los cuatro estas cartas ¡El señor Tierra nos las regalo solo para nosotros! —decía muy feliz Fobos.

Venus igualmente sonrió ante las lunas de Marte, aún recordaba la primera vez en que lo vieron y se asustaron un poco pero ahora lo trataban como su planeta; era algo que Venus le gustaba así no lo dijera, pero Marte sabía perfectamente que era así.

Mientras ellos estaban en su mundo Tierra y Luna miraban la escena muy conmovidos.

—Ohhh, ¿no es lindo como esos dos se tratan? —preguntó Luna.

—Claro que lo son —Tierra se fue acercando para finalmente jugar con ellos, estaban un poco lejos en ese momento Tierra recordó algo—. Por cierto Luna, ¿qué es lo que deseas decirme? Ya sabes, antes que Fobos y Deimos nos interrumpieran.

Luna al escuchar eso se sonrojo mucho, tanto que estaba rojo, Tierra se sorprendió por eso ¿Tan vergonzoso era lo que quería decirle? Aunque, ¿por qué tener vergüenza? Han estado juntos por miles de millones de años. Tierra no dijo nada y dejó en paz a su Luna, no quería formarlos a decirle lo que deseaba, esperará.

Tierra ahora estaba junto a Venus y Marte, preciso había llegado igualmente Mercurio. Marte sacó las cartas y las repartió para todos.

—En la siguiente partida puede jugar Luna, nos vamos rotando para poder jugar todos —dijo Marte. Tierra asintió al igual que Luna.

Así ahora era incluido en el juego, era feliz con solo estar al lado de su planeta y verlo jugar, así perdiera siempre era feliz a su manera.