Octava página

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Ay diario. Espero que ella entienda que no me doy cuenta de las cosas hasta que sufre, sino hasta que me siento realmente abandonado.

Si es que lloras, acude a mí, mis manos están esperando tu cara y tus ojitos para llegar a secarlos. Te dije que siempre estaría para secarte las lágrimas y así será, deja que mis manos puedan tocar una vez más tu cara.

Creo que he dejado más que claro mí disculpa en las anhwrio páginas y hasta en los mensajes que envíe. Si no es que lo llegaste a haber leído entonces te lo digo acá.

Lo siento profundamente por el dolor que te he causado. Mis acciones fueron insensibles y egoístas, y ahora veo claramente el daño que te he infligido. Me duele saber que te he lastimado de esta manera, y desearía poder retroceder en el tiempo para corregir mis errores. Te pido humildemente perdón por todo el sufrimiento que te he causado. Tu dolor es algo que llevaré conmigo siempre, y haré todo lo posible para enmendarlo y demostrar con acciones sinceras mi arrepentimiento. Por favor, perdóname..
Le hice vivir a la persona que más amo lo que yo de chiquito viví.

Mi mente es clara con esta decisión, me gustaría que al menos hablemos durante una hora, aclarar todo, saber algo del otro y sobretodo: volver a sentir la emoción de recibir un mensaje tuyo.

Mi familia lo sabe, sabe el daño que te he hecho, sabe más que nada mí hermana, que fue testigo de mi sufriendo y las lágrimas que dejé ver tres semanas antes de tu cumpleaños. Le comenté esa noche lo arrepentido que estoy, lo mal que me siento por todo y también le comenté mis ideas suicidas. Al principio juzgó mis acciones, me vió como una mala persona, ¿Lo seré?, solo ella sabrá si lo que dijo fue verdad. Mí hermana fue la que me consoló y trató de que me calmara cuando lloré, me abrazó y me dijo que más cosas. Le comenté mí idea de hablarte el día de tu cumpleaños y ella apoyó la idea, le dije que habías bloquea y no sabía nada de vos. Ella me dijo que  podía enviar el mensaje que quería mandarte si quería, al principio accedí. También me dió la idea de mandarte un Audio pero me negué porque sabía que mientras lo mandaba iba a romperme a llorar.

Yo solo quiero que hablemos, que pueda sacar tus lágrimas, que te recuestes en mí hombro, tomado de las manos mientras hablamos. Qué seas el vendaje de mis autoleciones y que seas mí salvadora.

Te amo transfinitsmente, te espero con muchas ansias y amor.

Mi diario personal no tan personal Donde viven las historias. Descúbrelo ahora