Capítulo 10

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_ Hay algo que nos une y es 
Más fuerte que un lazo creado
Por una mordida...
✨️

La mesa estaba servida, el príncipe y el rey se encontraban a punto de cenar, habían diferentes platillos dignos de la realeza, el principe sintió el olor de aquella comida entrar por sus fosas nasales y le dieron ganas de vomitar, se disculpo con su padre y salió corriendo hacía el baño de su habitación.

—Hannie ¿Estas bien?—  preguntó el rey afuera de la habitación del príncipe,
—¿Peter?—

Minutos después la puerta de la habitación fue abierta mostrando un pálido Omega salir de ella.
—¿Estas bien?— Volvió a preguntar el rey colocando su mano sobre la frente del príncipe para verificar que no tuviera fiebre.

—Estoy bien papá, seguramente algo que comí para el almuerzo me cayó mal, no te... —No termino de hablar cuando la ganas de vomitar llegaron nuevamente, el rey entró junto con el al baño sostuvo su cabello y sobo su espalda.

—Llamare al doctor—

—No hace falta papá, estoy bien, solo es un poco de vomito, si mañana continúo así entonces si puedes llamar al doctor, por ahora solo quiero descansar, tal vez solo sea el estrés acumulado.

Eso fue lo que le dijo a su padre pero el sabía muy bien a que se debían los vómitos, pues tenía todos los síntomas de un embarazo.

Los sirvientes caminaban de un lado a otro, apresurados con los preparativos para celebrar el cumpleaños número 19 del príncipe, habían finos platos de porcelana y oro sobre la mesa, deliciosos pavos y brochetas de cerdo servidas junto a un pastel...

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Los sirvientes caminaban de un lado a otro, apresurados con los preparativos para celebrar el cumpleaños número 19 del príncipe, habían finos platos de porcelana y oro sobre la mesa, deliciosos pavos y brochetas de cerdo servidas junto a un pastel gigante.

—Papá, Minho vendrá a la fiesta, lo he invitado— dijo el príncipe mientras su padre le señia el corset con fuerza.

—No quiero a un vampiro en mi casa—  respondió el rey tirando con mucha más fuerza de las cintas del corset, casí dejando sin respirar al príncipe.

—Entonces tendrás que celebrar mi cumpleaños sin mí— el príncipe tiro del nudo del corcet para aflojarlo y luego tomó su abrigo y salió de sus aposentos.

—Han Peter ¿A donde crees que
vas?— la voz del rey hizo eco en aquella habitación, haciendo que el príncipe detuviera sus pasos.

—Si Minho no puede entrar a este lugar en el día de mi cumpleaños entonces, iré a celebrar solo con él— el príncipe giro sobre sus talones y empezó a caminar hasta la salida.

—Peter detente—  hablo el rey con voz firme —Sabes muy bien que esta fiesta no es solo por tu cumpleaños, El príncipe Jake viene desde Inglaterra solo para porder conocerte mejor, estás comprometido con él, Peter_

—¿QUÉ? _¿Yo estoy comprometido con él?— Una pequeña risa se le escapo de su boca —Te recuerdo padre que yo rechace ese compromiso, te dije que estaba, estoy y seguiré enamorado de Minho, y no  puedes separarme del padre de mi hijo.

El rey se quedó atónito sin poder procesar lo que el príncipe había dicho.

—¿Que, que  quieres decir con tu hijo?—  preguntó en un tartamudeo.

—Estoy embarazado, pase mi celo con un vampiro y ahora estoy esperando un bebé— El rey ya no dijo nada solo se quedó ahí parado viendo como su hijo se alejaba.

Los guardias del palacio abrieron las puertas para que el principe pudiera salir pero  cuando las puertas fueron abiertas un precioso carruaje negro con el logo del rey de  Inglaterra se parqueo frente a él, el chófer de aquel carruaje se bajo y abrió la puerta para que el príncipe de Inglaterra bajara, aquel joven vestido con ropa de seda fina, una corona sobre su cabeza, guantes cubriendo sus delicadas manos  y costosas joyas sobre su cuello, Peter solo puso los ojos en blanco y siguió su camino pero la mano del príncipe de Inglaterra lo detuvo.

—¿Así es como recibes a tu
prometido?—  dijo sonriendo.

—Tiene una linda sonrisa, pero no tanto como la de Minho— pensó

—¿Prometido?— la voz de Minho hizo que ambos voltearan para verlo, Minho  dejo caer el ramo de rosas que llevaba en sus manos y el príncipe sintió que su corazón se partía en miles de pedacitos al ver los ojos cristalizados del vampiro, Minho inmediatamente se dió la media vuelta y desapareció del lugar en un abrir y cerrar de ojos.

Peter se soltó del agarre de Jake y siguió a Minho, ya tenía grabado su olor así que le fue fácil encontrarlo, el vampiro estaba sentado bajo un árbol de manzana, como cachorro abandonado.

El príncipe abrió sus piernas y se sento sobre su regazo y se froto en el cuerpo de Minho intentando calmarlo, podía sentir que el vampiro no estaba enojado pero si estaba  triste.

—¿Que haces aquí? Es tu cumpleaños deberías estar celebrándolo— dijo el vampiro tratando que su voz no se escuchara entrecortada por el nudo que sostenía en su garganta.

—¿Quieres que me vaya?— Pregunto el príncipe con un puchero en sus labios.

—No, no te vayas por favor, no quiero que estés cerca de ese Principito que dice ser tú prometido, Yo soy tu prometido yo te propuse matrimonio primero, eres Mío Han Peter y no sabes como me encantaría ser un lobo y no un vampiro, para poder morderte y que llevarás mi marca en tu cuello.

—Eres un tonto Lee,  ahora hay algo más fuerte  que nos une— El príncipe tomó la mano del vampiro y con ella acaricio su vientre aún plano, levantó la mirada y sonrió al ver el rostro de confusión de Minho—Estoy embarazado ¡Honnie!.

Los ojos de Minho se llenaron de emoción tan solo de imaginarse un mini Hannie corriendo por todas partes.

—¿Vo-voy a ser papá?— preguntó y Peter  asintió.

—¡Sii voy a ser papá!— Grito emocionado —Espera, ¿eso quiere decir que será un vampilobo? O un lobovampidios— el príncipe soltó una carcajada al escuchar las palabras de Minho.

—Solo será nuestro o nuestra bebé, Min, no importa si es vampiro, lobo, humano o semidiós, lo importante es que será nuestro.

—En ese caso, te lo iba a dar ahora frente a todos  pero no se pudo así que lo hare ahora— Minho levantó a Peter de su regazo y se arrodillo frente a él, llevó sus mano hasta el bolsillo de su pantalón y  sacó una pequeña caja plateada.

—Han Peter... ¿Te quieres casar conmigo?—

—Claro que si— Respondió el Principe emocionado —es más estas apartado para casarte conmigo en todas mis demás vidas, pero... ¿Pero me amaras cuando yo me vea viejo y tu sigas viéndote como un adolescente?.

Minho lo abrazo —Siempre te amaré, no importa como te veas o si reencarnas siendo un gato, yo te amaré sin importar tu apariencia.

Márcame (Minsung)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora